De vez en cuando, últimamente más, me paro a ver si mi contribución al foro es lo que yo quiero que sea. Puede ser que esté etiquetado o yo mismo me etiquete. De eso no hay dudas, pero la idea principal, la idea que tengo que tener de lo que pienso que puede ser mejor, bajo mi punto de vista debe prevalecer sobre piques momentáneos y distintos puntos de vista sobre gente más o igual de cabezota que yo.
Es cierto que cada uno puede pensar las mil maneras de mejorar al Betis en general o en particular, o no hacer nada por pensar que todo está perfecto. Pero más allá de lo que cada uno en su foro interno tenga a bien a considerar, lo que no nos entra en la cabeza a la mayoría es que el que tenemos en frente también piensa en el Betis, y por encima de esa frase tan de moda ahora NI LOPERA, NI PLATAFORMAS, ETC. ETC. Es que se trata de eso.
Don Manuel es un mecanismo para hacer grande a la idea, no a la empresa, y para muchos ese mecanismo ha dejado de funcionar o no lo hace correctamente. Sale otro mecanismo auspiciado por cientos de béticos para ayudar (SÍ, AYUDAR) e inmediatamente se declara una guerra en la que todo vale, y no lo digo sólo por los que están en contra, ni mucho menos. Si el Betis se dota, por dentro o por fuera, de estos mecanismos, el bien es para el Betis. Por supuesto que existe miedo a lo desconocido, por supuesto. Pero hasta ahora ese nuevo mecanismo ni ha dejado mal al Betis ni lo va a dejar, de hecho quizá tenga que cubrir parcelas que el otro mecanismo no las quiera o no las pueda cubrir. Y si quereis una prueba, entre muchas, os la digo.
Lo del protagonismo es algo que me cansa, es cierto y respeto a quien lo piensa. Pero si haces algo inmediatamente te piden responsables y si salen son protagonistas, yo me quedo simplemente en responsables. He leído a foreros que se le escapan cosas duras respecto de quien quiera hacer algo que en el mecanismo que rige al Betis o los han ninguneado o simplemente no los conciben. No pasa nada, queda demostrado que quien quiere dignificar al Betis lo puede hacer dentro y fuera. Ahí están los ejemplos de los béticos catalanes intentando organizarse y organizar actos (perdón a otras provincias, conozco menos su actividad y me gustaría -buen programa para la Radio del Betis-), ahí están actos de peñas muy dignos y sobre todo béticos, ahí está la propia comisión del centenario de la que sé que quiere retomar un querido proyecto: la escuela de béticos, ahí está una asociación que nació de las ganas de hacer cosas cuando se torcieron en el centenario y se vieron con toda la ilusión enfocándolas en actos que se han querido ver como antiBetis y nada más lejos de la realidad.
Por ello, a pesar de la brutal crisis social que vive el club, yo veo que hay esperanzas de hacer cosas, muchas cosas. Algunos tienen el derecho de pensar que siempre hay alguien detrás de esto con ganas de echar, de robar, de protagonizar, de herir al Betis. Pero mejor informarse bien porque a la hora de la crítica, si se critica mal sí que se le hace daño al Betis. Sobre todo cuando esperamos una vuelta de tuerca del destino para escupirnos reproches a la cara. El fracaso de un trabajo bien hecho no es fracaso, el fracaso debido a la desidia y a la chapuza sí que lo es.
Por último, también deberíamos recapacitar sobre la unión. La unión es algo que estamos de acuerdo todos que es necesaria, pero cuando todos queremos unión bajo las propias consignas o bajo la manera personal de ver las cosas, creemos entonces que es el otro el separatista. No señores, los gestos tienen que ser de todos y para todos. No podemos nunca pensar que hay nadie por encima de los demás, porque es la mejor forma de destruir esa unión.
Es cierto que cada uno puede pensar las mil maneras de mejorar al Betis en general o en particular, o no hacer nada por pensar que todo está perfecto. Pero más allá de lo que cada uno en su foro interno tenga a bien a considerar, lo que no nos entra en la cabeza a la mayoría es que el que tenemos en frente también piensa en el Betis, y por encima de esa frase tan de moda ahora NI LOPERA, NI PLATAFORMAS, ETC. ETC. Es que se trata de eso.
Don Manuel es un mecanismo para hacer grande a la idea, no a la empresa, y para muchos ese mecanismo ha dejado de funcionar o no lo hace correctamente. Sale otro mecanismo auspiciado por cientos de béticos para ayudar (SÍ, AYUDAR) e inmediatamente se declara una guerra en la que todo vale, y no lo digo sólo por los que están en contra, ni mucho menos. Si el Betis se dota, por dentro o por fuera, de estos mecanismos, el bien es para el Betis. Por supuesto que existe miedo a lo desconocido, por supuesto. Pero hasta ahora ese nuevo mecanismo ni ha dejado mal al Betis ni lo va a dejar, de hecho quizá tenga que cubrir parcelas que el otro mecanismo no las quiera o no las pueda cubrir. Y si quereis una prueba, entre muchas, os la digo.
Lo del protagonismo es algo que me cansa, es cierto y respeto a quien lo piensa. Pero si haces algo inmediatamente te piden responsables y si salen son protagonistas, yo me quedo simplemente en responsables. He leído a foreros que se le escapan cosas duras respecto de quien quiera hacer algo que en el mecanismo que rige al Betis o los han ninguneado o simplemente no los conciben. No pasa nada, queda demostrado que quien quiere dignificar al Betis lo puede hacer dentro y fuera. Ahí están los ejemplos de los béticos catalanes intentando organizarse y organizar actos (perdón a otras provincias, conozco menos su actividad y me gustaría -buen programa para la Radio del Betis-), ahí están actos de peñas muy dignos y sobre todo béticos, ahí está la propia comisión del centenario de la que sé que quiere retomar un querido proyecto: la escuela de béticos, ahí está una asociación que nació de las ganas de hacer cosas cuando se torcieron en el centenario y se vieron con toda la ilusión enfocándolas en actos que se han querido ver como antiBetis y nada más lejos de la realidad.
Por ello, a pesar de la brutal crisis social que vive el club, yo veo que hay esperanzas de hacer cosas, muchas cosas. Algunos tienen el derecho de pensar que siempre hay alguien detrás de esto con ganas de echar, de robar, de protagonizar, de herir al Betis. Pero mejor informarse bien porque a la hora de la crítica, si se critica mal sí que se le hace daño al Betis. Sobre todo cuando esperamos una vuelta de tuerca del destino para escupirnos reproches a la cara. El fracaso de un trabajo bien hecho no es fracaso, el fracaso debido a la desidia y a la chapuza sí que lo es.
Por último, también deberíamos recapacitar sobre la unión. La unión es algo que estamos de acuerdo todos que es necesaria, pero cuando todos queremos unión bajo las propias consignas o bajo la manera personal de ver las cosas, creemos entonces que es el otro el separatista. No señores, los gestos tienen que ser de todos y para todos. No podemos nunca pensar que hay nadie por encima de los demás, porque es la mejor forma de destruir esa unión.
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