Indudablemente tras los últimos resultados nada positivos para el Betis, es momento de hacer análisis. Ese análisis nos lleva a apreciar errores de Héctor Cuper al elegir a los jugadores para hacer la alineación. Está claro que el mister tiene las ideas claras en cuanto a que sabe que sistema de juego va a utilizar, donde tiene que presionar el equipo, y quien va a la presión en cada momento, hasta donde replegamos, las jugadas a balón parado llevan a un jugador concreto a cada punto de remate, y como estas, muchas circunstancias de un sistema, preparadas y no dejadas en manos del azar. Por lo tanto, es indudable que se trabaja en todas las facetas, pero como todo el mundo cometemos errores, el mister es humano y también lo hace.

Está tremendamente claro que en el Betis no hay jugadores específicos para mantener la posesión del balón ni para llevar el peso de un partido. Eso está claro, y por lo tanto, en cuanto al aspecto defensivo se debe hilar muy fino y se debe contar en estas tareas con gente muy viva y muy despierta desde el minuto 1 al 90, que estén concentrados, que sean contundentes, agresivos y muy intensos en todas sus acciones.

Cuando esto se da, y un equipo es solvente atrás porque sus jugadores son competitivos y nunca regalan nada, este equipo se convierte en difícil de batir. Cuando llegamos a esto, y conseguimos metros a las espaldas de los rivales podemos iniciar contraataques con la rapidez en banda que tenemos, que eso es indudable, y a su vez, generar ocasiones y llegadas a la portería rival.

Pero, aquí viene el problema. Si tú tienes que dar el balón al rival porque careces de calidad para tenerlo, te tienes que hacer fuerte atrás y no dar ni una concesión al rival, y el Betis da esas concesiones. Además pronto. En los 3 partidos antes de los primeros 25 minutos ya perdía el equipo con goles recibidos muy similares. Ahora, viene el problema. Tengo que tomar la iniciativa y no tengo argumentos para hacerlo y dejamos en el campo verdaderos síntomas de desequilibrio.

Cuper sabe a que juega y tiene claro el sistema, pero se equivoca en los futbolistas.
Si detrás no podemos dar ninguna concesión y tenemos que ser agresivos me hago algunas preguntas:
• ¿Si Juanito carece de toda la intensidad del mundo que hace jugando en esta plantilla?
• ¿Si Ilic es el jugador menos competitivo defensivamente hablando de la primera división como juega todos los minutos en el Betis?
• ¿Si Nano no tiene recursos técnicos ni físicos y siempre llega tarde como puede jugar en el Betis?
• ¿Si Capi es el jugador menos resistente de la liga como puede jugar en un equipo que de forma casi obligada le tiene que dar el balón y el campo al rival?

Pienso, que el sistema es acorde a la plantilla que tenemos, carente de calidad, pero en ella, si carecemos de eso deben abundar otros recursos como la viveza, la testiculina, la agresividad, la capacidad de concentración y la competitividad.

Por lo tanto, si necesitamos todo esto, ¿Cómo Nano, Juanito e Ilic pueden ser indiscutibles en la defensa del Betis?

A tiempo estamos…