Espérate sentado, otra manifestación como aquella no va a haber nunca y hace falta de nuevo porque la situación es muy grave,así es.

Me conformo con concentraciones de protesta por el estadio.

Bienvenido.

No he nombrado ningún entrenador, sólo la dirección deportiva. El puesto de entrenador depende de la dirección deportiva. Y a esta achaco todos los fichajes. No he entrado en si a Lo Celso lo trae Catalán, a Zozulya el preparador físico o a Jessé Serra. Ficha y desficha la dirección deportiva.

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Bueno, bueno, dejate, tampoco pensàbamos entonces que aquella manifa iba a ser posible y se hizo y fue un rotundo éxito. Así que no se fíen estos dos por que en una de las tropelías que hacen , se puedan ver como Lopera.

Pues como esto sea cierto, vamos de mal en peor.

Te ha faltado, en mi opinión:

Temporada 17-18. Antes del mercado de invierno el equipo no va demasiado bien, pese a haber jugado algunos buenos partidos. El entrenador pide los fichajes de Sandro y Roque Mesa (este último lo reconoce públicamente). Se impone la opinión del que trae a Bartra (ahora para los perros, las cosas como son) provocando un cambio, inaudito en Setién, de sistema que hace remontar la temporada.

Veo imposible que aquello se repita.

La ruina que van a dejar estos tipejos se le va a parecer mucho a la del indemnizado.

A los de los negocios de ciudades deportivas y veintisete mil deportes ...llevan camino de ser recordados como los peores dirigentes de toda la historia muy por encima de Lopera por que como bajemos la deuda de Lopera sera calderilla con el trampón que nos van a dejar estos dos y su put ..madre del big data.

'Éste es el bueno'... Ya no cuela"
PC Betis 6.0
A. Fdez.

El título de este artículo va relacionado con el famoso juego de ordenador que hace más de 20 años hacía las delicias de los que soñábamos en trabajar en algo relacionado con el fútbol. Jugarlo o contarlo, todo iba de la mano por aquel entonces. Y nos viene al dedillo, eso de jugar quiero decir, a lo que ha vivido este año el Real Betis Balompié, en un nuevo curso que se va por el sumidero para desilusión de una parroquia harta de estar harta. Cansada de darle al botón de reilusionarse cada verano. Es innato al aficionado al fútbol el enterrar en la arena de las ya concurridas playas su furia y frustración. Sin embargo, llega un momento que hay que pararse a pedir responsabilidades. Todos los años no vale engancharse al manido 'éste es el bueno'. Ya no cuela. O no debería. Que no hay mayor camelo que la propaganda repetida hasta la saciedad con mensajes cortos y concisos. 'Yo soy el bueno'. 'Aquel es el malo'. En eso hay dirigentes que son cinturón negro.

Porque no le quitaré el honor a los rectores verdiblancos de haber colocado, estructural y empresarialmente, al Betis como un club de este siglo. Digo y remarco honor, no mérito. Que los clubes más modestos de Primera y muchos de Segunda ya tienen estas estructuras. Aquí nadie ha inventado la rueda. Propaganda. Lo que ocurre es que a veces se menosprecia demasiado que este negocio se llama fútbol y hay que dejar trabajar a las personas que saben del tema. No hay que confundir el hecho de que todos podamos opinar de este apasionante deporte. Faltaría más. Una cosa es la opinión de barra de bar y otra muy distinta el sentarse a realizar una planificación pensada y medida. Aún recuerdo cuando se podía firmar al delantero más sobresaliente del PC Fútbol con un equipo modesto. O incluso ganabas la Champions con el que te gustaba, por mucho que en la realidad eso fuera un sueño imposible. Cada vez que oigo despreciar a personas que saben de este negocio y controlan bien el análisis de defectos y necesidades a la hora de hacer las plantillas se me enciende la luz de alarma. O se es muy prepotente, pensando que fichar ficha cualquiera. O muy necio, porque no ficha cualquiera.

Tenemos a un Betis de supuestos grandes jugadores que tienen al equipo el 14 tras 30 jornadas. Se destituye al entrenador por no dar con la fórmula de la Coca-Cola. Y se repite hasta la saciedad que cómo es posible todo esto con la plantilla de campanillas que tiene el club de las trece barras. Propaganda. Una plantilla sin físico ni oficio. Con lagunas claras en zonas del campo o posiciones esenciales. Y las trincheras desviando la atención a todo aquello que no sea una mejora deportiva clara y manifiesta. El bético ya sabe que los actuales dueños de la entidad lo seguirán siendo por muchísimo tiempo. Nadie va a dar un paso al lado. Demasiado les costó a los generales el largar a su potente rival en aquel recordado (ya no sé si para bien o mal) 15-J. Los soldados hicieron su labor y puede que les toque volver a alzar la voz. Lo malo del sistema actual, como en la política, es que nadie quiere que le toquen su parcela y todo se corrompe por el peloteo y el 'déjame a mí que yo sé de esto'. Gastarse el dinero en lo más bonito de la tienda sin saber si te hace falta es propio del despilfarro que se ha acostumbró el poder por esta tierra.

No quería terminar sin insistir en que no creo que la vuelta al pasado sea la solución. Hay muchos que piensan que con Lorenzo Serra todo iría mejor. Puede ser. Sigo viendo el problema mucho más estructural y de mando. Echarse a un lado no es perder. Delegar no es perder. Buscar soluciones y darle el mando (no del club y sí de la parcela deportiva) a personas más capaces no es perder. Marchar el 14 con cerca de 200 millones de presupuesto sí que lo es. Y acostumbrarse a quemar proyectos cada verano es, como mínimo, de una irresponsabilidad supina. Porque ya sabemos quién paga esa cuenta. Y la está pagando el Betis. La reflexión, alejada de la propaganda, exige la unión sobre una idea real de crecimiento deportivo. El PC Fútbol es una reliquia. Que no lo sea el Betis.

No es lo que parece si miras el foro.

Y claro que no tengo fuentes, las mismas que tenemos todos. Yo escuché la rueda de prensa se Serra, su aparación con De la Morena, la de Quique y su tour por las radios y la rueda de prensa se HyC...y saqué mis propias conclusiones.

Quique desde invierno como mínimo, se quedó sólo... El único delantero que vino fue Jesé y lo fichó él junto a Sarabia (contado por el propio Jesé).

Serra ese año no se qué hizo por el Betis, si no podía convivir con el entrenador que lo hubiera echado...y si no le dejaron que se hubiera ido él con toda la dignidad del mundo.

Mejor aún hubiese sido sacar el beticismo, tragar saliva y remar para el mismo lado...y al final de temporada pues si quieres te vas y dices: "Mira, os dije que este tipo no valía, le traje todo lo que necesitaba para su gilisistema de carrileros y mediapuntas y aún así ha fracasado"...y se hubiera ido con la chorra encima de la mesa.

Se va cuando ya Quique está fuera...que podría quedarse con un entrenador de su agrado y trabajar en equipo... Y dice que Haro es un presidente brillante...qué sentido tiene eso, sabiendo que HyC van a una??

Como dices al principio ni Serra ha hecho todo mal o bien ni Catalán ha hecho todo mal ni bien...los dos se enzarzan en una lucha de egos absurda.

Y ante la pifia de los dos, ya lo dije una vez, considero que tiene que estar más a la altura al que se le presupone como leyenda del club (merecida) que al recién llegado. Si tienes dos hijos que sacan malas notas y uno es torpe y el otro listo, te enfadas más con el listo.

Al final por orgullo se fue y deja sólo a este par se pobres diablos que sigo pensando que no tienen mala intención pero que tampoco tienen ni idea de manejarse en situcaciones deportivas.

Ahí están los dos que llevan toda la temporada mirandose el uno al otro sin saber qué hacer...y no ha sido hasta Junio cuando se han atrevido a dar un paso ya por el canguelo del descenso.

Ojalá Serra aquí...pero ojalá un Serra con el veneno que siempre decís, en la dirección correcta.

Casa Betis: restaurante gurmé, comida de batalla.

El crecimiento del Real Betis bajo el mandato de Haro y Catalán ha sido espectacular en prácticamente todos los ámbitos: el económico, el social, el de infraestructuras…falta el deportivo, que es cuestión de tiempo. Esto no lo digo yo, lo dicen ellos, lo cual dice muy poco de su conocimiento de la empresa deportiva y, más concretamente, de la futbolística. Lo que no tiene que parar de crecer en un club de fútbol es precisamente lo deportivo. De lo contrario, lo convertimos en Casa Betis, un restaurante gurmé con comida de batalla.

Y me remito al título del artículo para intentar desmenuzar figuradamente el dislate que subyace a esa afirmación de partida. Háganme el favor de imaginarse por un momento un bar o restaurante cualquiera que funcione con éxito principalmente por su buena comida, la relación calidad-precio y un servicio cercano. De esos que no tiene un local excelso, pero que está lleno siempre. De los que apenas necesita más publicidad que el boca a boca. De los que se convierten en altares para sus fieles por la calidad de sus viandas y caldos. Uno de esos bares o restaurantes que está a la altura de la Guía Michelín aunque nunca consiga formar parte de ella.

En Sevilla, se me viene a la mente el Yebra de hace cinco lustros, aunque seguro que habrá muchos en ésta y otras ciudades. Un sitio de culto culinario donde te servían delicias en platos comprados por mi abuela para tomar en sillas de enea ante una fachada descascarillada.
El cuchitril destartalado convertido en remozado local gurmé

Imaginen ahora que ese bar-restaurante lo cogen unos exitosos empresarios en distintos sectores que, pese a su absoluta inexperiencia en la hostelería, le van a dar el giro definitivo hacia el éxito. El cuchitril destartalado se convierte de pronto en un remozado local gurmé en el que se van a vivir experiencias místicas con la comida. Se remodela la carta, se echa al cocinero de toda la vida y se ficha uno nuevo cada diez días. Se apuesta por una nueva cerveza puntera a través de un beneficioso acuerdo económico. Se quita de en medio a los veteranos camareros de mandil churretoso y tiza en la oreja, y se ponen en su lugar venus y adonis que tardan seis horas en servirte pero que te dejan aturrullado por su belleza.

La vieja barra empercochá ha dado paso a solemnes salones y el negocio se posiciona en TripAdvisor. Sólo tiene un problema: que la comida que sale de la cocina es de batalla un día sí y otro también, que los vinos se avinagran al servirse, que la cerveza está mal tirada y que el servicio tarda un verano en traerte el plato. Todo ello, a precio gurmé. Y, claro, ni contenta a los nuevos clientes ni mucho menos a los de siempre. Porque el restaurante es una maravilla…hasta que se abre. Lo único importante es lo menos importante

Eso es el Real Betis de los últimos años, una empresa donde lo que debería ser clave es anecdótico y donde lo único importante es lo menos importante, al menos temporalmente. El único año de los últimos en que funcionó el restaurante da la casualidad de que había vuelto uno de los cocineros veteranos para supervisar la labor de un gran pinche que se creía que estaba en El Bulli y valoraba más la elaboración que el resultado de los platos. Y que acabó yéndose peleado con la clientela porque, habiendo inventado él la cocina, no se le comprendía.

Ése es el Betis actual, un maravilloso establecimiento con un sindiós en la cocina. Una multinacional de la carne con tomate donde lo único que falla es la carne con tomate. Un maravilloso Titanic al que lo único que le falta es flotar bien. Un grandioso club donde sólo estorba la dichosa pelotita.

Nacho Delgado.

Han dado instrucciones claras para que los *******s oficiales corran la voz. Esta es de Mateo.

Los alumnos aventajados de Lopera.

No son dos paquetes ni inocentes ignorantes. Aunque de fútbol ni pajolera, de acuerdos sin luz ni taquígrafos y de moverse entre bambalinas son expertos.
Conocen muy bien las debilidades de los demás accionistas, manejan bien a las Peñas, detrás hay mucho de fontanería y malicia a raudales.
El modo de mover y resolver la situación con Oliver, Lopera, las Peñas, la Fundación, los críticos, etc., ojo con el duro escenario que tenían, denotan que el desalojo va a ser más complejo que la toma de la playa de Omaha en el Desembarco de Normandía.

Y tanto. Estos están bastante más preparados que la ratera. En el tema accionarial y de poder, tienen el colmillo retorcío. Son unos cracks. ¡¡¡Si se han quedado con el club y los han financiado los pequeños accionistas!!! Eso es algo grandioso, aunque sea mortal para el Betis hay que reconocer que son brillantes en sus temitas.

No se si lo han puesto, pero es de alguien neutral