Sabor agridulce es que nos dejó este partido, como una buena película cuyo final nos deja fríos e insatisfechos. El Betis jugó bastante bien en general (al menos en mi humilde opinión). No sabía que cara esperar tras el buen partido ante el FC Barcelona y lo cierto es que los verdiblancos aparecieron en el terreno de juego buscando ofrecer un espectáculo parecido. No fueron a especular con puntos o marcadores, ni con miedo ante un rival en horas bajas pero con calidad en gran parte de sus piezas. El Betis fue a por el partido, lo intentó mucho pero la realidad es que no consiguió ganar y ahí están los principales contrastes de esa agridulce sensación con la que los béticos fueron dejando los aledaños del estadio.
Y es que preocupa la falta de gol del equipo. Muchos opinábamos en verano que aunque solo se hablase de mediocentros defensivos y más tarde de jugadores para el centro de la zaga, el problema lo veíamos en la falta de gol arriba, en el desequilibrio y la llegada. En esta cuestión, la presencia de Musonda a inicio de temporada pienso que sumaba un arma más, no tanto por el gol pero sí por el desequilibrio, la velocidad o la imprevisibilidad, como imprevisibilidad te aportaba el lesionado Joaquín. Pero dejando a un lado estas cuestiones que más de uno calificaría como excusas baratas, lo cierto es que al equipo le falta gol. A Rubén no le están entrando, aunque en mi opinión jugó bastante bien y sería injusto valorarlo solo por si entra o no el gol, y además el equipo suma poco gol, que no llegada, desde la segunda línea.
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Y eso es lo agrio de las sensaciones que me inundaron tras el partido porque más allá de no poder estar contento al no conseguir los tres puntos, a mi este equipo me gusta. El equipo se ve que tiene mucho trabajo, tácticamente muy eficientes, ha dejado de pasarlo tan mal en la salida de balón, tiene mucha más llegada a portería y ocasiones con mucho peligro que por H o por B no terminan de besar la red. Tiene un evidente trabajo en la estrategia que, si bien no salió bien, hacía mucho tiempo que no veía tal variedad de jugadas a balón parado por parte del Betis y en alguna pudo sorprender al cuadro valencianista.
En definitiva, un partido con un buen Betis, que ha dejado atrás aquellos tiempos en los que solo preocupaba defender y no encajar. Ahora además de no encajar se busca una y otra vez la portería contraria. No hace mucho tiempo, pedíamos un equipo con intensidad, que pudiera salirle mejor o peor pero con una idea de juego, con un plan establecido, con claras directrices de como dañar al rival con su fútbol y que potenciara las cualidades de los jugadores de la plantilla y todo eso lo veo, la pena es no encontrar el gol. Porque el Betis lo intentó. La tuvo Rubén que estrelló su tiro en la escuadra, la tuvo Alegría en un tiro que salió flojo y sacó Gayá bajo palos, la tuvo Pardo con un lanzamiento desde la frontal que se fue ligeramente desviado o Petros con un lanzamiento que se estrelló en el poste. La tuvo Sanabria que no se atrevió a tirar de primeras en una asistencia del canario y la volvió a tener el 24 al rematar una falta de Durmisi que salió mordida y detuvo Alves.
Por todo esto, estoy descontento, porque no se sumaron tres puntos importantes para pensar en escalar posiciones en la clasificación pero por otra parte, me parece injusto hablar de este Betis como muchos hablan, como si fuese lo mismo de antes, como si no tuviese y mostrase nada como no hace tanto tiempo. Me parece injusto porque veo un equipo con trabajo, con actitud, que lo intenta y que quiere ganar y eso me hace tener fe en que llegarán más resultados positivos. O eso quiero creer. Considero que la línea de trabajo es buena y espero contar victorias en futuras impresiones. El equipo lo está mereciendo.
Adán: De nuevo dejó la portería a cero en casa. Desde la llegada de Víctor su trabajo es menor pero bien y en su sitio suele solventar las que tiene el rival con acierto. No fue un partido demasiado exigido en general y eso habla bien de la disposición táctica del equipo.
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Piccini: No estuvo mal por su banda, más liberado del trabajo defensivo y con la difícil papeleta de parar las permutas constantes entre Mina, Orellana y Nani. Algunos aciertos, especialmente en la faceta ofensiva, algún error, esta vez sin mucha importancia en la pérdida de algún balón. En su línea pero no estuvo mal en el cómputo global.
Mandi: Bien en su labor cubriendo las subidas del lateral italiano e iniciando algunas jugadas desde atrás. Se le ve con más confianza.
Pezzella: A su nivel, intentó alguna en ataque y estuvo contundente en defensa.
Tosca: Con algunos errores en la salida, uno de ellos grave, pero en general bien. Rápido, tapando al incisivo Durmisi y encontrando en el danés un socio ideal en algunos pases en profundidad que pueden sorprender a más de un rival en el futuro.
Durmisi: Lo intentó por su banda, se sumergió varias veces en el costado derecho de la defensa valencianista y lo intentó dando mucha amplitud al equipo y ampliando líneas de pase a los encargados de sacar el balón jugado.
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Petros: Siempre está en todas y a veces, algo pasado de revoluciones. Debe medirse porque ve tarjeta con demasiada facilidad por faltas en zonas poco peligrosas y eso sí es peligroso. Por otra parte, se ofreció y lo intentó. Es una pena que no entrara su gol.
Rubén Pardo: En mi opinión lo vi aparecer algo menos que ante el FC Barcelona pero me dejó unas sensaciones similares. Es un desahogo al juego de los verdiblancos. Sus desplazamientos en largo es un arma contundente que el equipo debe aprovechar y su tiro desde la segunda línea puede ofrecer más de una alegría.
Dani Ceballos: Otra clase de fútbol más. Se le ve en ese punto que se observaba por ejemplo en Joaquín en su día. En ese escalón en el que piensas, este jugador está en un momento por encima del resto. Siempre la quiere, la pide, se siente protagonista y se echa el equipo a la espalda. El Dani Ceballos que todos queremos ver.
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Alex Alegría: Menos acertado que otras veces, aunque trabajador y batallador. No era un partido fácil pero su presencia libera bastante a Rubén, con más movilidad.
Rubén Castro: Lo intentó, estuvo menos egoísta que otras veces. Tuvo una para Alegría, otra para Sanabria y tuvo tiempo de fabricarse tres de las ocasiones más peligrosas del equipo, incluida aquella en que caen al suelo hasta dos o tres defensas ches. No le está entrando el gol y por eso no llegaron los tres puntos pero trabajando así no tardará en volver a mojar.
Jonas Martin: No se le vio demasiado en el partido. Salió para ofrecer más llegada de la que ofrecía Petros y entiendo el cambio como una forma de ir a por el partido por parte del técnico, aunque los cambios tuvieron poco tiempo por delante.
Sanabria: Se le ve muy falto de ritmo. Lo intenta y las pelea pero necesita minutos y que las lesiones no lo lastren más. No estuvo muy acertado el tiempo que estuvo sobre el terreno de juego. Vi bien el cambio pero no era su partido.
Víctor Sánchez del Amo: Como ya he dicho, a mí me gusta como juega su Betis. Está generando mucho y el trabajo se ve en cada acción. Es una pena que las victorias no acompañen más todavía, aunque si se sigue en esa línea, creo que lo harán. El trabajo de la estrategia o el orden táctico considero que es mérito suyo y en eso mejora bastante a sus antecesores. Ya no me puedo quejar se considerarlo demasiado defensivo pues el equipo sale a por los partidos, lo intenta y quiere vencer. Por ponerle un pero, los cambios me parecieron tardíos. El equipo desfondado y a los que entran no les da tiempo de conectarse y entrar. Por lo demás, espero seguir viendo su trabajo.
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Y es que preocupa la falta de gol del equipo. Muchos opinábamos en verano que aunque solo se hablase de mediocentros defensivos y más tarde de jugadores para el centro de la zaga, el problema lo veíamos en la falta de gol arriba, en el desequilibrio y la llegada. En esta cuestión, la presencia de Musonda a inicio de temporada pienso que sumaba un arma más, no tanto por el gol pero sí por el desequilibrio, la velocidad o la imprevisibilidad, como imprevisibilidad te aportaba el lesionado Joaquín. Pero dejando a un lado estas cuestiones que más de uno calificaría como excusas baratas, lo cierto es que al equipo le falta gol. A Rubén no le están entrando, aunque en mi opinión jugó bastante bien y sería injusto valorarlo solo por si entra o no el gol, y además el equipo suma poco gol, que no llegada, desde la segunda línea.
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Y eso es lo agrio de las sensaciones que me inundaron tras el partido porque más allá de no poder estar contento al no conseguir los tres puntos, a mi este equipo me gusta. El equipo se ve que tiene mucho trabajo, tácticamente muy eficientes, ha dejado de pasarlo tan mal en la salida de balón, tiene mucha más llegada a portería y ocasiones con mucho peligro que por H o por B no terminan de besar la red. Tiene un evidente trabajo en la estrategia que, si bien no salió bien, hacía mucho tiempo que no veía tal variedad de jugadas a balón parado por parte del Betis y en alguna pudo sorprender al cuadro valencianista.
En definitiva, un partido con un buen Betis, que ha dejado atrás aquellos tiempos en los que solo preocupaba defender y no encajar. Ahora además de no encajar se busca una y otra vez la portería contraria. No hace mucho tiempo, pedíamos un equipo con intensidad, que pudiera salirle mejor o peor pero con una idea de juego, con un plan establecido, con claras directrices de como dañar al rival con su fútbol y que potenciara las cualidades de los jugadores de la plantilla y todo eso lo veo, la pena es no encontrar el gol. Porque el Betis lo intentó. La tuvo Rubén que estrelló su tiro en la escuadra, la tuvo Alegría en un tiro que salió flojo y sacó Gayá bajo palos, la tuvo Pardo con un lanzamiento desde la frontal que se fue ligeramente desviado o Petros con un lanzamiento que se estrelló en el poste. La tuvo Sanabria que no se atrevió a tirar de primeras en una asistencia del canario y la volvió a tener el 24 al rematar una falta de Durmisi que salió mordida y detuvo Alves.
Por todo esto, estoy descontento, porque no se sumaron tres puntos importantes para pensar en escalar posiciones en la clasificación pero por otra parte, me parece injusto hablar de este Betis como muchos hablan, como si fuese lo mismo de antes, como si no tuviese y mostrase nada como no hace tanto tiempo. Me parece injusto porque veo un equipo con trabajo, con actitud, que lo intenta y que quiere ganar y eso me hace tener fe en que llegarán más resultados positivos. O eso quiero creer. Considero que la línea de trabajo es buena y espero contar victorias en futuras impresiones. El equipo lo está mereciendo.
Adán: De nuevo dejó la portería a cero en casa. Desde la llegada de Víctor su trabajo es menor pero bien y en su sitio suele solventar las que tiene el rival con acierto. No fue un partido demasiado exigido en general y eso habla bien de la disposición táctica del equipo.
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Piccini: No estuvo mal por su banda, más liberado del trabajo defensivo y con la difícil papeleta de parar las permutas constantes entre Mina, Orellana y Nani. Algunos aciertos, especialmente en la faceta ofensiva, algún error, esta vez sin mucha importancia en la pérdida de algún balón. En su línea pero no estuvo mal en el cómputo global.
Mandi: Bien en su labor cubriendo las subidas del lateral italiano e iniciando algunas jugadas desde atrás. Se le ve con más confianza.
Pezzella: A su nivel, intentó alguna en ataque y estuvo contundente en defensa.
Tosca: Con algunos errores en la salida, uno de ellos grave, pero en general bien. Rápido, tapando al incisivo Durmisi y encontrando en el danés un socio ideal en algunos pases en profundidad que pueden sorprender a más de un rival en el futuro.
Durmisi: Lo intentó por su banda, se sumergió varias veces en el costado derecho de la defensa valencianista y lo intentó dando mucha amplitud al equipo y ampliando líneas de pase a los encargados de sacar el balón jugado.
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Petros: Siempre está en todas y a veces, algo pasado de revoluciones. Debe medirse porque ve tarjeta con demasiada facilidad por faltas en zonas poco peligrosas y eso sí es peligroso. Por otra parte, se ofreció y lo intentó. Es una pena que no entrara su gol.
Rubén Pardo: En mi opinión lo vi aparecer algo menos que ante el FC Barcelona pero me dejó unas sensaciones similares. Es un desahogo al juego de los verdiblancos. Sus desplazamientos en largo es un arma contundente que el equipo debe aprovechar y su tiro desde la segunda línea puede ofrecer más de una alegría.
Dani Ceballos: Otra clase de fútbol más. Se le ve en ese punto que se observaba por ejemplo en Joaquín en su día. En ese escalón en el que piensas, este jugador está en un momento por encima del resto. Siempre la quiere, la pide, se siente protagonista y se echa el equipo a la espalda. El Dani Ceballos que todos queremos ver.
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Alex Alegría: Menos acertado que otras veces, aunque trabajador y batallador. No era un partido fácil pero su presencia libera bastante a Rubén, con más movilidad.
Rubén Castro: Lo intentó, estuvo menos egoísta que otras veces. Tuvo una para Alegría, otra para Sanabria y tuvo tiempo de fabricarse tres de las ocasiones más peligrosas del equipo, incluida aquella en que caen al suelo hasta dos o tres defensas ches. No le está entrando el gol y por eso no llegaron los tres puntos pero trabajando así no tardará en volver a mojar.
Jonas Martin: No se le vio demasiado en el partido. Salió para ofrecer más llegada de la que ofrecía Petros y entiendo el cambio como una forma de ir a por el partido por parte del técnico, aunque los cambios tuvieron poco tiempo por delante.
Sanabria: Se le ve muy falto de ritmo. Lo intenta y las pelea pero necesita minutos y que las lesiones no lo lastren más. No estuvo muy acertado el tiempo que estuvo sobre el terreno de juego. Vi bien el cambio pero no era su partido.
Víctor Sánchez del Amo: Como ya he dicho, a mí me gusta como juega su Betis. Está generando mucho y el trabajo se ve en cada acción. Es una pena que las victorias no acompañen más todavía, aunque si se sigue en esa línea, creo que lo harán. El trabajo de la estrategia o el orden táctico considero que es mérito suyo y en eso mejora bastante a sus antecesores. Ya no me puedo quejar se considerarlo demasiado defensivo pues el equipo sale a por los partidos, lo intenta y quiere vencer. Por ponerle un pero, los cambios me parecieron tardíos. El equipo desfondado y a los que entran no les da tiempo de conectarse y entrar. Por lo demás, espero seguir viendo su trabajo.
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