Cada día que pasa creo que, además de cabezón, es "poco listo" este hombre de ser cierto que no les convoca ni juegan.

Pues este es el nivel de exigencia de algunos desde la prensa:


Tirar la Copa - Al final de la Palmera

Por JUAN ARBIDE, 1 de diciembre de 2015 13:48 h.

Ya está aquí la Copa del Rey. En diciembre se ofrece un aperitivo. Los primeros y segundos platos, en enero y febrero. El postre, la gran final, para finales de mayo. Lo importante se concentra en mes y medio. Seis semanas seguidas alternando partidos ligueros y coperos. Mucha tela para la mayoría de los mortales. Tanto, que muchos de los entrenadores no se lo piensan. Paso atrás, minutos para los suplentes y a liquidar el mal trago de la manera más digna posible. Triste, pero cierto. La Copa es algo que estorba. Sobre todo entre los que forman la clase media de la Primera y Segunda división. Los equipos que, a duras penas, pueden sacar adelante una competición.

El Betis de diciembre de 2015 es uno de ellos. A no ser que de aquí a mañana sufra una transformación radical, el verdiblanco es un plantel preparado, sólo y exclusivamente, para sumar los puntos necesarios que le den la permanencia en la Liga. No hay para más. Es triste, pero no parece haber otra. Se mira a la Copa con recelo e, incluso, con algo de miedo. No vaya a ser que, eliminando al Sporting, otro que no quiere ni oír hablar de la Copa, te plantes en los octavos de final y en la bolita del sorteo vaya a salir el que todos piensan….No, no se trata ni del Madrid, ni del Barcelona…

Una lástima. La Copa lo tiene casi todo. Es el banco de pruebas perfecto para tener enchufado a la mayoría de los jugadores. Para ganar en competitividad dentro del vestuario. Por no decir que es el camino más corto para ganar un título o, al menos, plantarse con honores en una final. Pues nada. Hay futbolistas que sufren más que ganan con estos partidos. No hay más que recordar las participaciones coperas del Betis en las dos últimas temporadas. Vaya espanto. Menos mal que, de vez en cuando, aparecen equipos que se encargan de darle una vuelta a la historia de la Copa. Y no se trata de los humildes que, con todos los respetos, bastante tienen con pelear desde agosto para vivir una fiesta si les toca jugar en el Nou Camp o el Bernabéu. Se trata de los clase media que desafían al cargado calendario y a presupuestos con más ceros para dar batalla. Recordando, de paso, que tirar una competición antes de tiempo puede no ser garantía de éxito en otros frentes.

de forma encubierta y como quien no quiere la cosa, nos deja caer... que la plantilla apenas da para no descender...
vaya campañita de comida de coco...

Que hartura tío

Pues este es el nivel de exigencia de algunos desde la prensa:


Tirar la Copa - Al final de la Palmera

Por JUAN ARBIDE, 1 de diciembre de 2015 13:48 h.

Ya está aquí la Copa del Rey. En diciembre se ofrece un aperitivo. Los primeros y segundos platos, en enero y febrero. El postre, la gran final, para finales de mayo. Lo importante se concentra en mes y medio. Seis semanas seguidas alternando partidos ligueros y coperos. Mucha tela para la mayoría de los mortales. Tanto, que muchos de los entrenadores no se lo piensan. Paso atrás, minutos para los suplentes y a liquidar el mal trago de la manera más digna posible. Triste, pero cierto. La Copa es algo que estorba. Sobre todo entre los que forman la clase media de la Primera y Segunda división. Los equipos que, a duras penas, pueden sacar adelante una competición.

El Betis de diciembre de 2015 es uno de ellos. A no ser que de aquí a mañana sufra una transformación radical, el verdiblanco es un plantel preparado, sólo y exclusivamente, para sumar los puntos necesarios que le den la permanencia en la Liga. No hay para más. Es triste, pero no parece haber otra. Se mira a la Copa con recelo e, incluso, con algo de miedo. No vaya a ser que, eliminando al Sporting, otro que no quiere ni oír hablar de la Copa, te plantes en los octavos de final y en la bolita del sorteo vaya a salir el que todos piensan….No, no se trata ni del Madrid, ni del Barcelona…

Una lástima. La Copa lo tiene casi todo. Es el banco de pruebas perfecto para tener enchufado a la mayoría de los jugadores. Para ganar en competitividad dentro del vestuario. Por no decir que es el camino más corto para ganar un título o, al menos, plantarse con honores en una final. Pues nada. Hay futbolistas que sufren más que ganan con estos partidos. No hay más que recordar las participaciones coperas del Betis en las dos últimas temporadas. Vaya espanto. Menos mal que, de vez en cuando, aparecen equipos que se encargan de darle una vuelta a la historia de la Copa. Y no se trata de los humildes que, con todos los respetos, bastante tienen con pelear desde agosto para vivir una fiesta si les toca jugar en el Nou Camp o el Bernabéu. Se trata de los clase media que desafían al cargado calendario y a presupuestos con más ceros para dar batalla. Recordando, de paso, que tirar una competición antes de tiempo puede no ser garantía de éxito en otros frentes.

Pues este es el nivel de exigencia de algunos desde la prensa:


Tirar la Copa - Al final de la Palmera

Por JUAN ARBIDE, 1 de diciembre de 2015 13:48 h.

Ya está aquí la Copa del Rey. En diciembre se ofrece un aperitivo. Los primeros y segundos platos, en enero y febrero. El postre, la gran final, para finales de mayo. Lo importante se concentra en mes y medio. Seis semanas seguidas alternando partidos ligueros y coperos. Mucha tela para la mayoría de los mortales. Tanto, que muchos de los entrenadores no se lo piensan. Paso atrás, minutos para los suplentes y a liquidar el mal trago de la manera más digna posible. Triste, pero cierto. La Copa es algo que estorba. Sobre todo entre los que forman la clase media de la Primera y Segunda división. Los equipos que, a duras penas, pueden sacar adelante una competición.

El Betis de diciembre de 2015 es uno de ellos. A no ser que de aquí a mañana sufra una transformación radical, el verdiblanco es un plantel preparado, sólo y exclusivamente, para sumar los puntos necesarios que le den la permanencia en la Liga. No hay para más. Es triste, pero no parece haber otra. Se mira a la Copa con recelo e, incluso, con algo de miedo. No vaya a ser que, eliminando al Sporting, otro que no quiere ni oír hablar de la Copa, te plantes en los octavos de final y en la bolita del sorteo vaya a salir el que todos piensan….No, no se trata ni del Madrid, ni del Barcelona…

Una lástima. La Copa lo tiene casi todo. Es el banco de pruebas perfecto para tener enchufado a la mayoría de los jugadores. Para ganar en competitividad dentro del vestuario. Por no decir que es el camino más corto para ganar un título o, al menos, plantarse con honores en una final. Pues nada. Hay futbolistas que sufren más que ganan con estos partidos. No hay más que recordar las participaciones coperas del Betis en las dos últimas temporadas. Vaya espanto. Menos mal que, de vez en cuando, aparecen equipos que se encargan de darle una vuelta a la historia de la Copa. Y no se trata de los humildes que, con todos los respetos, bastante tienen con pelear desde agosto para vivir una fiesta si les toca jugar en el Nou Camp o el Bernabéu. Se trata de los clase media que desafían al cargado calendario y a presupuestos con más ceros para dar batalla. Recordando, de paso, que tirar una competición antes de tiempo puede no ser garantía de éxito en otros frentes.

2 ascensos,una permanencia tranquila,una clasificación para europa league, un descenso (con una plantilla formada por los chuli,andersen,verdú,sara,b rodriguez,didac) y de momento otra permanencia tranquila.. No sufras tanto hombre,que Mel no es ni el mejor entrenador que hemos tenido pero ni de lejos el peor o uno de los peores,y el que no lo quiera ver.. Que se tape los ojos

Segun el As mel no convocará ni a Wolfs ni a Pezzella de ser así se cofirma el pulsito y la setencia a estos jugadores.



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Declaraciones de Mel tras perder hoy 1-3 contra el Sporting: "ya sabíamos que la Copa es complicada, nuestra plantilla es corta y debemos centarnos en lo que cuenta, que es la Liga. Hace un año el Betis estaba a 8 puntos del ascenso y ahora estamos en mitad de la tabla en Primera, este último año hemos dado un salto. Se nota que aplicando mis conocimientos adquiridos en la Premier el equipo carbura pese a sus carencias"