Lo mejor del partido del sábado, sin duda, los tres puntos. Tres puntos que hacen olvidar un poco el juego del equipo y que nos aporta cierta "tranquilidad". O al menos la tranquilidad de saber que el objetivo está tres puntos más cerca de conseguirse. En esta ocasión el planteamiento me pareció más acertado que ante el Athletic. El equipo se equilibró en el centro del campo con la pareja Petros-Digard. Me hubiese gustado algo de continuidad para jugadores como Ceballos o Van Wolfswinkel para ver si con minutos y confianza aumentan sus prestaciones, pero el técnico verdiblanco optó por la simetría esta vez, colocando a Cejudo y Joaquín en bandas y Van der Vaart en la mediapunta. Si me gustó que se equilibrase al equipo en el medio, algo con lo que se tiró el partido ante el Athletic, también me gustó que por fin se jugase con un mediapunta en la mediapunta. Algo que parece muy lógico pero que a jornada once casi que fue la primera vez que lo vimos. Otro debate sería los jugadores a utilizar, pero equilibrar el centro del campo y colocar un jugador por dentro no me disgustó. Algo que no me hacía tanta ilusión dejar a Rubén solo arriba, pero era el dibujo dispuesto y en fin, uno de tantos sistemas disponibles.

El equipo jugó un poco más arropado y un Rubén Castro bastante activo se buscó buenas ocasiones. Tuvo tres y metió una. No nos engañemos con la victoria, el equipo no mejoró nada lo visto anteriormente. Adán volvió a ser San Adán y salvó al Betis más de una vez. Menos mal que las ocasiones rivales le cayeron casi todas a Juankar, del que todos conocemos su "despiadado olfato goleador", pero el acierto de Adán, también a la ocasión a bocajarro de Charles fue decisivo (Hola Vicente Del Bosque, ¿como va eso?).
En una de estas, el equipo presionó, un balón rebotado le cayó a Rubén en posición correcta y este no perdonó, como casi siempre.

Así que, los tres puntos son una alegría porque el Betis lo necesita, pero este equipo necesita mucho trabajo y no podemos hacer la vista gorda. Si lo basas todo en que Rubén se encuentre un rebote, un saque de Adán, un jugadón irrepetible de Westermann o una mano de Rubén Pérez, puedes sumar puntos y sumar, pero no va a responder a un plan de trabajo y nunca sabes que pasará el siguiente partido. Decíamos semanas atrás que este Betis jugaba a que Rubén las meta y Adán las saque, y este partido es el ejemplo más claro de esto. El Málaga, el equipo con menos gol de la liga, tuvo claras ocasiones de gol que no metió y el Betis tuvo 3-4 de las que Rubén si supo aprovecharlas. El siguiente partido es difícil, esperemos salir a competir porque seguramente ahí no valdrá solo tener un delantero que las meta y un portero que pare la mayoría. Todo lo que sea sumar, bienvenido será. Dos semanas de trabajo por delante. Esperemos que sean de provecho.

Adán: Impresionante. Está a un nivel de forma espectacular. La parada que le hace a Charles no es buena, es la mejor de la jornada. (Hola de nuevo Vicente, échale un vistazo al partido anda).

Piccini: Juankar le dio la tarde con su velocidad y se coló más de una vez por la banda. En ataque aporta algo, aunque no fue su mejor partido. En defensa casi siempre fue superado esta vez.

Bruno y Westermann: Estuvo bien, sólidos, con algún fallo aislado pero aportaron cierta seguridad. Jugar más arropados para defender han dado algunos de sus mejores partidos. Si el equipo juega mejor así, ¿por qué cambiar?

Varela: Pienso que no hizo mal partido. Duda a banda cambiada es más de romper hacia dentro y eso hizo que tuviera un partido algo más cómodo. No se le vio demasiado en ataque.

Digard: Aunque he escuchado algunas críticas a su juego, es uno de los medios más completos en lo táctico. Recuperó y llegó al corte más de una vez aunque en muchas ocasiones abusó del pelotazo, como el resto del equipo. En el descanso fue sustituido. Es una pena que después de jugarlo todo con el Niza salvo la última temporada, tenga tantos problemas físicos que esperemos que olvide lo antes posible.

Petros: Se le vio poco con balón porque el Betis no generó fútbol desde el mediocentro y lo hizo todo mucho más directo. Sin balón corrió y se esforzó aunque tampoco me pareció especialmente destacado.

Joaquín: Tiene una calidad superlativa. El balón de gol que le pone a Rubén Castro en la primera parte es oro puro. Dicho esto, tampoco fue decisivo sobre el partido, no tuvo una gran participación, aunque lo que se espera de él cuando coge el balón, al menos te llena de esperanza y sientes que algo diferente podría pasar.

Cejudo: Me gustó su trabajo en la primera parte. No se complicó y completó unos buenos 45'. En la segunda cambió, se entretuvo más de una vez y perdió multitud de balones por intentar salir regateando en lugar de jugar rápido, lo que en mi opinión le bajó puntos al correcto partido que estaba haciendo. Eso sí, a su esfuerzo no hay un pero que ponerle.

Van der Vaart: Cuando recibe se ve lo que técnicamente es capaz de hacer. Controles, pases y visión de juego tiene como siempre tuvo. Otra cosa es el físico. Para ser el segundo hombre de ataque, sin balón no aportó casi nada. Pocos apoyos a la salida del balón aunque bajara alguna vez y poca llegada, pero aún así, bastante mejor que lo que nos dejó ver en su debut.

Rubén Castro: Una cosa que no entendí de su juego es que jugando solo en punta acabase escorándose tanto a la izquierda. No obstante, aun jugando solo tuvo tres ocasiones y una de ellas la convirtió en gol, otra vez él, otra vez tres puntos. (Vicente, venga, un abrazo).

Xavi Torres: Salió por Digard y a mi me gustó mucho su papel sin balón. Se metió entre los centrales y ayudó mucho en defensa. Pienso que el equipo lo notó también.

Dani Ceballos: Más apagado de lo que debería. Muchos dirán que tiene partidos pero yo creo que con una continuidad real, rendiría mejor de lo que lo viene haciendo. Aún así debe dar más de sí.

Molinero: Es el típico cambio para la recta final del partido con la intención de defender mejor una de las bandas. Bien en esfuerzo y asumiendo ese rol aunque pocos minutos.

Pepe Mel: La semana pasada dije que no entendía como ante Deportivo o Espanyol salimos con dos mediocentros defensivos y claras carencias en la creación y ante el Athletic dejamos a N'Diaye solo ante un equipo que acumula hombres en ataque. Ante el Málaga el técnico optó por equilibrar al equipo y me parece que con acierto. El hecho de dejar a Rubén solo arriba nos deja menos alternativas cuando tenemos el balón pero no considero que el planteamiento fuera erróneo aunque como colectivo, mostramos pocos recursos con balón y se abusó del pelotazo.

En defensa, a pesar de jugar más arropados concedimos muchas oportunidades, de las que salimos bien parados gracias al mal momento y poco gol del rival. No obstante, los tres puntos son importantes para la tranquilidad del grupo y ahora hay dos semanas por delante hasta el próximo partido que debería dar para trabajar mucho y mejorar estos aspectos. El equipo lo necesita y creo que se hará porque escudarnos en que tenemos una decente cantidad de puntos no nos hará crecer. Centrarnos en lo que hacemos mal y luchar por mejorarlo si.