Sacar conclusiones de un primer partido es arriesgado, pero un poquitín sí podemos rascar.
-Al contrario de lo que piensan algunos béticos pre-ilustrados, al ver a N'Diaye ayer corriendo, es muy probable que las leyes físicas fijadas desde los lejanos tiempos de Galileo y posteriormente Sir Isaac Newton no sean del todo un disparate.
-Portillo, en medio de tanto músculo, coberturas, desdobles, presión en banda, balones verticales y búsqueda del rechace, parecía el grumete de un ballenero de tripulación ucraniana, a punto de llorar ante la perspectiva de tantos meses sin pisar puerto, sabedor de que, a los pocos días de navegación, el trabajo duro, la monotonía, los peligros y la ausencia de mujer, convertirán su travesía en un auténtico infierno. Esperemos que Ceballos, si se queda, y Wander Brá, lo protejan de tanto atleta, porque emparedado entre N'diaye, Torres, Vargas, Piccini y demás, temo que pueda pasarle algo en las duchas.
-Siempre que se asciende, parece que los jugadores que ya estaban en segunda no valen. De nuevo, se demuestra de que no tiene por qué ser así.
-Westermann acaba de llegar, y si Bruno juega no porque el otro sea malo, sino porque él lo hace bien, es una buena noticia, no una mala. Lo digo por los listos vociferantes.
-Una pregunta maliciosa: ¿la ausencia de extremos trae el efecto beneficioso de que la tendencia a partirnos se modere, al trabajarse mucho más las coberturas?
-Me gustó que el equipo chutara de lejos, a pesar de que no estuvieron muy acertados. Hay dos teorías sobre los beneficios de chutar desde fuera del área: una es la técnica, que dice que así se acaban las jugadas y se reducen las posibilidades de contraataque, a la vez que se obliga a los defensas a salir a cubrir el tiro, aumentando las posibilidades de pase o penetración -de jugador, claro. La otra es la teoría sádica, que dice que si no va a puerta el chut, al menos le dará al contrario en el estómago, la cara o sus partes nobles, con gran placer para la grada.
-A la espera del cierre de mercado, Rubén y Molina no habían muerto ni habían sido abducidos.
-Hay que mejorar a balón parado. Tenemos gente grande.
-Viendo a Adán ayer, hay que echar al entrenador de porteros hoy mismo.
Bien, como hoy venía tranquilo por el resultado y un petardo de los que escriben aquí ya me ha soltado que estaré triste porque el Betis ha empatado, les digo a toda esa caterva vociferante, que se dedica a amargar la vida a los béticos tratando de hundirlos, inventándose o tergiversando cualquier cosa, esa vomitiva cuadrilla que desde el entonnno, el no entonno, asociaciones de pequeños accionistas, tuiteros del jijijaja clubes de admiradores de Castaño y Olivé, periodistas borrachos y demás fauna, y los pintamonas que les hacen caso, a todos ellos les digo que:
-Aquí tienen mi dedo corazón, bien firme y estirado, para lo que sea menester.
-Al contrario de lo que piensan algunos béticos pre-ilustrados, al ver a N'Diaye ayer corriendo, es muy probable que las leyes físicas fijadas desde los lejanos tiempos de Galileo y posteriormente Sir Isaac Newton no sean del todo un disparate.
-Portillo, en medio de tanto músculo, coberturas, desdobles, presión en banda, balones verticales y búsqueda del rechace, parecía el grumete de un ballenero de tripulación ucraniana, a punto de llorar ante la perspectiva de tantos meses sin pisar puerto, sabedor de que, a los pocos días de navegación, el trabajo duro, la monotonía, los peligros y la ausencia de mujer, convertirán su travesía en un auténtico infierno. Esperemos que Ceballos, si se queda, y Wander Brá, lo protejan de tanto atleta, porque emparedado entre N'diaye, Torres, Vargas, Piccini y demás, temo que pueda pasarle algo en las duchas.
-Siempre que se asciende, parece que los jugadores que ya estaban en segunda no valen. De nuevo, se demuestra de que no tiene por qué ser así.
-Westermann acaba de llegar, y si Bruno juega no porque el otro sea malo, sino porque él lo hace bien, es una buena noticia, no una mala. Lo digo por los listos vociferantes.
-Una pregunta maliciosa: ¿la ausencia de extremos trae el efecto beneficioso de que la tendencia a partirnos se modere, al trabajarse mucho más las coberturas?
-Me gustó que el equipo chutara de lejos, a pesar de que no estuvieron muy acertados. Hay dos teorías sobre los beneficios de chutar desde fuera del área: una es la técnica, que dice que así se acaban las jugadas y se reducen las posibilidades de contraataque, a la vez que se obliga a los defensas a salir a cubrir el tiro, aumentando las posibilidades de pase o penetración -de jugador, claro. La otra es la teoría sádica, que dice que si no va a puerta el chut, al menos le dará al contrario en el estómago, la cara o sus partes nobles, con gran placer para la grada.
-A la espera del cierre de mercado, Rubén y Molina no habían muerto ni habían sido abducidos.
-Hay que mejorar a balón parado. Tenemos gente grande.
-Viendo a Adán ayer, hay que echar al entrenador de porteros hoy mismo.
Bien, como hoy venía tranquilo por el resultado y un petardo de los que escriben aquí ya me ha soltado que estaré triste porque el Betis ha empatado, les digo a toda esa caterva vociferante, que se dedica a amargar la vida a los béticos tratando de hundirlos, inventándose o tergiversando cualquier cosa, esa vomitiva cuadrilla que desde el entonnno, el no entonno, asociaciones de pequeños accionistas, tuiteros del jijijaja clubes de admiradores de Castaño y Olivé, periodistas borrachos y demás fauna, y los pintamonas que les hacen caso, a todos ellos les digo que:
-Aquí tienen mi dedo corazón, bien firme y estirado, para lo que sea menester.
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