En la mañana de este lunes, ante el juez Francisco Carretero, comparecerán los encausados en la demanda civil en la que se pide la nulidad de la suscripción de un 31,38 por ciento de las acciones del Betis propiedad de Farusa, ya que se señala que se utilizó un préstamo concedido al club por las cajas de ahorro para titular estas participaciones a nombre de la sociedad vinculada con Manuel Ruiz de Lopera. El que fuera consejero delegado bético será, pues, la gran atracción en la primera jornada del juicio, que se celebrará hoy ante uno de los magistrados titulares del Juzgado de lo Mercantil número 1 de Sevilla, precisamente el mismo en el que se siguió la calificación del concurso de acreedores, vista para sentencia a falta de un último informe pericial.
La esperada comparecencia de Lopera puede devolver a primera línea la famosa frase «¿dónde estaba usted en el 92?», que le replicaba a todo aquel que osaba a criticar su gestión y la forma en la que se hizo con las riendas del club en aquella controvertida conversión del Betis en sociedad anónima deportiva, sobre todo por los indicios que han llevado a juico este importante porcentaje accionarial tras la demanda de 17 béticos que pretenden que las participaciones vuelvan al club y puedan ser suscritas de nuevo, por su valor nominal y libremente, por los aficionados verdiblancos. El caso es la constatación en sede judicial de todo lo que ha venido predicando Hugo Galera desde hace más de dos décadas. Precisamente el expresidente verdiblanco y miembro de Béticos por el Villamarín participará en el juicio que comienza hoy. También intervendrán José León, Farusa y los herederos de Manuel Morales.
El asunto es de calado puesto que Farusa posee el 51,34 por ciento de las acciones (actualmente intervenido judicialmente con la administración liderada por Francisco Estepa tras designación de la juez Mercedes Alaya) y en caso de que se avalen las peticiones de los 17 accionistas Lopera se quedaría con sólo un 20 por ciento, lo que le daría el paquete más importante del club pero perdería la mayoría absoluta.
Se discuten 30.869 acciones que Farusa presuntamente adquirió mediante la subrogación del préstamo de las cajas. Las otras 6.000 participaciones bajo sospecha eran de Léon y Morales. Farusa las hizo suyas en 1995. La defensa de Farusa ha solicitado la suspensión de la vista por prejudicialidad al considerar que el caso se ha tratado en el Juzgado de Instrucción 6.
¿Dónde estaba usted en el 92? - Al final de la Palmera
La esperada comparecencia de Lopera puede devolver a primera línea la famosa frase «¿dónde estaba usted en el 92?», que le replicaba a todo aquel que osaba a criticar su gestión y la forma en la que se hizo con las riendas del club en aquella controvertida conversión del Betis en sociedad anónima deportiva, sobre todo por los indicios que han llevado a juico este importante porcentaje accionarial tras la demanda de 17 béticos que pretenden que las participaciones vuelvan al club y puedan ser suscritas de nuevo, por su valor nominal y libremente, por los aficionados verdiblancos. El caso es la constatación en sede judicial de todo lo que ha venido predicando Hugo Galera desde hace más de dos décadas. Precisamente el expresidente verdiblanco y miembro de Béticos por el Villamarín participará en el juicio que comienza hoy. También intervendrán José León, Farusa y los herederos de Manuel Morales.
El asunto es de calado puesto que Farusa posee el 51,34 por ciento de las acciones (actualmente intervenido judicialmente con la administración liderada por Francisco Estepa tras designación de la juez Mercedes Alaya) y en caso de que se avalen las peticiones de los 17 accionistas Lopera se quedaría con sólo un 20 por ciento, lo que le daría el paquete más importante del club pero perdería la mayoría absoluta.
Se discuten 30.869 acciones que Farusa presuntamente adquirió mediante la subrogación del préstamo de las cajas. Las otras 6.000 participaciones bajo sospecha eran de Léon y Morales. Farusa las hizo suyas en 1995. La defensa de Farusa ha solicitado la suspensión de la vista por prejudicialidad al considerar que el caso se ha tratado en el Juzgado de Instrucción 6.
¿Dónde estaba usted en el 92? - Al final de la Palmera
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