Goitia: "Mi mejor momento en el Betis fue el ascenso; el peor, la pérdida de Miki Roqué"

"El Betis tiene un equipazo para estar arriba, haciendo bien las cosas estará pronto en Primera División", afirma el exmeta bético





Iñaki Goitia regresa a Heliópolis. El que guardameta del Real Betis Balompié de 2009 a 2012 afronta el domingo una cita especial. En las filas del Deportivo Alavés, el cancerbero de Cruces (Vizcaya), rememora con cariño para los medios oficiales los años que estuvo en Sevilla, destacando el ascenso conseguido en la campaña 2010/2011.

¿Cómo le van las cosas?
Va todo bien muy bien. Aquí estoy cerca de la familia, algo que es muy importante, así que no me puedo quejar. Ya había morriña por estar cerca de casa después de tantos años en el sur.
Quién le iba a decir que se enfrentaría al Betis en Segunda División…
La verdad que no es nada normal. Es un hecho impensable, pero ya sabemos cómo es el deporte, no solo con el nombre se consiguen los objetivos. Es algo que no me imaginaba cuando salí del Betis.
Dos equipos con objetivos muy diferentes. ¿Creen en la machada en el Benito Villamarín?
Somos conscientes de que nos enfrentamos al Betis, un equipo con una plantilla de Primera y con grandes jugadores. Vamos a intentar ponérselo difícil para conseguir los tres puntos. Nosotros también tenemos nuestros deberes que hacer. Sabemos que es un partido difícil, pero hemos trabajado durante toda la semana para ir a por el partido y hacerles daño.

¿Enfrentarse al Betis supone una motivación añadida para todos los equipos de la categoría?
En todo partido hay que esforzarse al máximo para conseguir los tres puntos y más cuando te enfrentas ante un equipo que tiene como objetivo principal ascender de forma directa. Es verdad que motiva más jugar allí que en otros sitios, en un gran campo, con un número de aficionados bastante importante. Sabemos que visitamos a un gran Club, pero el equipo está convencido de que puede sacar un resultado positivo.
Pierden el domingo y el Deportivo Alavés acaba obteniendo la permanencia. ¿Lo firma?
-Risas-. El fútbol es presente, ir jornada a jornada. Solo tenemos ese objetivo. Hay que ir partido a partido, lo pasamos muy mal el año pasado para conseguir el objetivo. Sabiendo que debemos ir jornada a jornada, estamos ante una nueva oportunidad para intentar conseguir los tres puntos y acercarnos al objetivo. Queremos brindar una victoria a nuestra afición ante un gran rival. Ojalá ambos podamos cumplir nuestros objetivos y llegar a final de temporada con la tranquilidad de haber hecho todo el trabajo.
¿Acabará el Betis regresando a Primera División?
Tiene muy buena plantilla y un equipazo para estar arriba. La Segunda División es dura y larga, cualquier mínimo detalle puede condicionar los resultados y te hacen ganar o perder puntos. Tengo el ejemplo del primer año que estuve en el Betis, en el que había confeccionada una plantilla muy buena y quedamos cuartos. Hay que tener claro que con el nombre no se gana, hay que trabajar cada partido de una forma muy exigente. Cualquier rival se motiva un poco más y te lo pone difícil cuando sabe que quieres ascender.
¿Existe una receta que garantice el éxito en Segunda División?
La paciencia es clave en momentos determinados, pero creo que resulta más determinante tener humildad y compromiso con la causa. Son 42 jornadas en las cuales puedes pasar momentos muy buenos y otros no tanto. Debes tener los pies siempre en el suelo. Cuando pasas rachas negativas, hay que ser constantes en el trabajo diario y saber que todo los jugadores son de la misma categoría y que cualquier rival te puede ganar. Hay que tomarse cada partido como si fuera el último. Los puntos que se van no vuelven. Una pérdida de uno o dos puntos puede condicionar mucho el objetivo final.
Suponemos que habrá hablado con algún compañero de los que tuvo en el Betis. ¿A quién le ha metido algo de presión?
No he metido nada presión, he dejado que trabajen tranquilos durante la semana –risas-. Ya charlaremos el domingo de cómo están trabajando y cómo les va todo.
Usted se marchó del Betis en busca de minutos en otro equipo y aquí permaneció Rubén Castro, que sigue haciendo goles.
No voy a ser yo quien descubra a Rubén, ya le conocemos todos. Está a pocos goles de entrar en la historia del Betis. Tiene un olfato goleador tremendo, es un gran profesional, un delantero muy bueno.
¿Qué recuerdos guarda de su etapa en el Betis?
Tengo recuerdos muy positivos de haber formado parte de un Club grande. A nivel deportivo, guardo con mucho cariño los logros obtenidos en la segunda temporada en la que conseguimos el ascenso. Como contraste, también te viene a la cabeza la pérdida de un compañero y vivir in situ la enfermedad que padeció, vivir con él día a día y conocer de primera persona el final tan trágico que tuvo todo. Son recuerdos que se te quedan en la mente. Estoy orgulloso de haber formado parte del Betis y al que le deseo la mejor suerte a partir del domingo.
Con lo cual, podemos decir que será un partido especial para Iñaki Goitia.
Siempre que te enfrentas a rivales de los que has formado parte y más si cabe en el Betis donde viví todo tipo de momentos, resulta especial. En mi época me tocó convivir con diferentes problemas extradeportivos. Fueron condicionantes que merodeaban en la cabeza de los jugadores, pero fuimos capaces de centrarnos en lo deportivo y de ir sacando los puntos para el objetivo del ascenso. Luego el Betis consiguió a base de trabajo esa plaza europea. Ahora se han dado las vueltas a las tornas y está en Segunda, pero es el equipo más grande de la categoría. El Betis va a tener que luchar para conseguir el ascenso, pero haciendo bien las cosas volverá seguro pronto a Primera División.
Desde fuera, ¿qué diferencias ve entre el Betis que ascendió en la campaña 2010/2011 y la actual?
Teníamos un grupo humano magnífico. Estábamos todos muy unidos y teníamos la humildad necesaria para afrontar cada partido como si fuera el último. De ahora no puedo hablar, sería hacer una opinión que no va a ser objetiva ni real.

Entrevista a Iñaki Goitia en la web oficial del Real Betis Balompié