En el próximo mes de marzo, concretamente los días 23 y 24 del citado mes, se celebrará el juicio en el que se discutirá la propiedad de 36.869 acciones del Real Betis Balompié adquiridas por Farusa en 1992 y que suponen un 31,38 por ciento de las participaciones del club, incluidas en el 51,34 que están embargadas por el Juzgado de Instrucción número 6 y administradas por Francisco Estepa. En la demanda presentada por diecisiete accionistas en el Juzgado de lo Mercantil se señala que las 36.869 acciones que integran el paquete de Farusa tras la subrogación en la deuda de un préstamo de las cajas de ahorros (El Monte y San Fernando) al Betis no fueron abonadas en el plazo (30 de junio de 1992) y que igualmente, 6.000 acciones más tituladas por José León y Manuel Morales tampoco fueron pagadas en esa fecha y provenían de un préstamo impagado a Unicaja que fue incluido en la deuda que asumió el plan de saneamiento. Lo que se conoce como delito societario.
Pues bien, ese juicio que se celebrará en marzo ya tiene un precedente reciente en el Real Mallorca, del cual se conoció la sentencia condenatoria en el día de ayer. En concreto, el expropietario y exconsejero delegado del RCD Mallorca, Javier Martí Asensio, ha sido condenado a dos años de prisión y a pagar una indemnización al club bermellón acusado de serautor de un delito societario de administración desleal por usar fondos de la entidad deportiva para pagar el paquete de acciones que en su día le compró a Mateo Alemany. Según la jueza Gemma Robles, de la Audiencia de Palma de Mallorca, Martí Asensio, tras su nombramiento como consejero delegado del Mallorca, hizo uso de sus facultades recién sumidas de gestión y administración “con ánimo de injusto enriquecimiento y en detrimento del resto de accionistas del club”, tal y como recoge la magistrada en el escrito de acusación que ha asumido el acusado. Martí Asensio fue condenado en diciembre de 2013 por el juzgado de lo Mercantil 2 de Palma de Mallorca a devolver al RCD Mallorca y a la masa activa del concurso de acreedores de la entidad 602.345,12 euros, tras declarar culpable dicho concurso y constatar que “dispuso de fondos del club sin justificación y para fines que le eran ajenos”.
El paralelismo entre el caso de Martí Asensio y el de Lopera es total y habrá que estar muy pendientes del juicio correspondiente a la propiedad de las acciones de Manuel Ruiz de Lopera, que se celebrará en marzo.
El juicio por la propiedad de las acciones de Lopera ya tiene un precedente - Al final de la Palmera
Pues bien, ese juicio que se celebrará en marzo ya tiene un precedente reciente en el Real Mallorca, del cual se conoció la sentencia condenatoria en el día de ayer. En concreto, el expropietario y exconsejero delegado del RCD Mallorca, Javier Martí Asensio, ha sido condenado a dos años de prisión y a pagar una indemnización al club bermellón acusado de serautor de un delito societario de administración desleal por usar fondos de la entidad deportiva para pagar el paquete de acciones que en su día le compró a Mateo Alemany. Según la jueza Gemma Robles, de la Audiencia de Palma de Mallorca, Martí Asensio, tras su nombramiento como consejero delegado del Mallorca, hizo uso de sus facultades recién sumidas de gestión y administración “con ánimo de injusto enriquecimiento y en detrimento del resto de accionistas del club”, tal y como recoge la magistrada en el escrito de acusación que ha asumido el acusado. Martí Asensio fue condenado en diciembre de 2013 por el juzgado de lo Mercantil 2 de Palma de Mallorca a devolver al RCD Mallorca y a la masa activa del concurso de acreedores de la entidad 602.345,12 euros, tras declarar culpable dicho concurso y constatar que “dispuso de fondos del club sin justificación y para fines que le eran ajenos”.
El paralelismo entre el caso de Martí Asensio y el de Lopera es total y habrá que estar muy pendientes del juicio correspondiente a la propiedad de las acciones de Manuel Ruiz de Lopera, que se celebrará en marzo.
El juicio por la propiedad de las acciones de Lopera ya tiene un precedente - Al final de la Palmera
Comentario