Betis: el vaso, medio vacío
El equipo sigue sin jugar a nada

Por RAMÓN ROMÁN, 7 de octubre de 2014 11:16 h.
Que quede claro, antes de que dé mi opinión sobre la situación del Betis, que por supuesto es muy respetable la de todos los que piensen que el vaso está medio lleno porque el equipo está a un punto del liderato y lleva dos semanas seguidas sin encajar. Faltaría más. Pero yo soy de los que piensan lo contrario, es decir, que el vaso está medio vacío. Y es que, aunque valoro lo dicho anteriormente, y también el hecho de que el Betis no pierda ante un rival directo después de haber visto bochornos tipo Ponferrada o Albacete, para mí falta todavía mucho para que este equipo esté a la altura. Sí, como digo cada semana, el objetivo es estar en Primera en junio, pero para llegar a él creo que hay formas y formas de hacer las cosas, y las que está utilizando el Betis no me están gustando.
Porque el equipo de mayor presupuesto de Segunda no puede llevar siete jornadas sin un patrón de juego, más allá que el de esperar a que Rubén Castro meta todo lo que le caiga a sus pies. Un conjunto como el Betis, con jugadores como el canario u otros con nivel de Primera tipo Molina, Lolo Reyes, Ndiaye o Adán, no puede jugar a merced del rival, aunque sea un histórico como el Valladolid, y por ello dejar el sistema con el que habían llegado dos victorias consecutivas para volver a poblar el centro del campo. El Betis, tampoco se puede permitir el lujo de tener una única ocasión durante todo un partido mientras Jorge Molina y Rennella están en el banquillo, por más que Velázquez le haya dado prioridad al hecho de cortar la sangría defensiva. Y, aunque la realidad es que sólo hay un punto de diferencia, el Betis no puede estar una semana sí y otra también fuera de los dos primeros puestos de la clasificación, los cuales dan derecho a ascender de forma directa. Por eso, bien harían todos en el club, desde Velázquez hasta el presidente, pasando por Alexis y los jugadores, en dejar decir que lo importante es sumar, porque la afición ya dejó claro en el descanso del encuentro ante el Mirandés que también quiere una mejoría en el juego. Sí, exigencia, esa palabra que parecía olvidada en Heliópolis…