La pasada campaña en Primera esa cifra era de unos 22 millones. Todavía puede subir algo cuando se ajuste el presupuesto. De todos modos, será la mayor de la categoría.
La LFP ha fijado un tope de gasto al Betis en su plantilla deportiva de 9,9 millones de euros, según la primera estimación de presupuesto que presentó el club el pasado mes de abril y que giraba en torno a los 20-22 millones de euros para la campaña venidera, en Segunda división (este año en Primera fue de 44 millones). La media presupuestaria en Segunda gira en torno a los 7 millones de euros y el Eibar ha sido campeón con uno que no llegaba a 4.
A tenor del presupuesto de ingresos que presente cada club, la LFP calcula, según diversas variables, el límite de gasto en personal deportivo que puede tener cada equipo, que suele oscilar entre el 50% y el 60% de los ingresos totales. A 30 de junio el Betis presentará otra estimación de presupuesto –más aproximada– y el 30 de septiembre, la definitiva, en la que estarán incluidas las posibles compras y ventas de jugadores que se produzcan en el transcurso del mercado estival y que pueden elevar algo ese tope de gasto para la 2014/15.
Si hay traspasos de futbolistas (el 40% de la plusvalía va destinada al concurso de acreedores) el tope de gasto estimado en el Betis puede girar en torno a los 12 millones de euros, un montante en el que se incluyen fichas y salarios de jugadores y técnicos, amortizaciones de fichajes y rescisiones de contratos.
La mayoría de los jugadores béticos tienen fijadas en sus contratos una quita salarial que oscila entre el 35% y el 50% para poder hace frente a drásticas reducciones de ingresos como las que se van a producir por derechos de TV (de 26 a 3 millones) sin que peligre el plan de viabilidad firmado en el concurso de acreedores, pues no cumplir el mismo supondría la liquidación del club.
El Betis cerró la temporada 2013/14 con un superavit aproximado, antes de impuestos, de 24 millones de euros, aunque 15 de ellos proceden de un pleito ganado a la Hacienda pública y es una deuda que se dejará de pagar –no supone disponer de mayor liquidez en caja–, por lo que el superavit neto en tesorería será solo unos 4 millones, gracias, sobre todo, a la participación del equipo en la Liga Europa, donde llegó hasta los octavos de final, más lejos de lo presupuestado, lo que supuso unos ingresos extra de unos 5 millones de euros.
Después de haber dado de nuevo beneficios en el ejercicio 2013/14 (en el 2012/13 fueron de 12,7 millones) será difícil que el Betis cierre alguna operación de traspaso antes del 30 de junio, pues fiscalmente no interesa, por lo que será a partir del 1 de julio cuando se abran las puertas de salida a algunos futbolistas, si es que llegan ofertas interesantes por ellos, pues la idea es no malvender a ninguno de los que aún mantienen un buen cartel.
La LFP impone un tope de gasto de 10 millones al Betis en su plantel | El Correo de Andalucia
La LFP ha fijado un tope de gasto al Betis en su plantilla deportiva de 9,9 millones de euros, según la primera estimación de presupuesto que presentó el club el pasado mes de abril y que giraba en torno a los 20-22 millones de euros para la campaña venidera, en Segunda división (este año en Primera fue de 44 millones). La media presupuestaria en Segunda gira en torno a los 7 millones de euros y el Eibar ha sido campeón con uno que no llegaba a 4.
A tenor del presupuesto de ingresos que presente cada club, la LFP calcula, según diversas variables, el límite de gasto en personal deportivo que puede tener cada equipo, que suele oscilar entre el 50% y el 60% de los ingresos totales. A 30 de junio el Betis presentará otra estimación de presupuesto –más aproximada– y el 30 de septiembre, la definitiva, en la que estarán incluidas las posibles compras y ventas de jugadores que se produzcan en el transcurso del mercado estival y que pueden elevar algo ese tope de gasto para la 2014/15.
Si hay traspasos de futbolistas (el 40% de la plusvalía va destinada al concurso de acreedores) el tope de gasto estimado en el Betis puede girar en torno a los 12 millones de euros, un montante en el que se incluyen fichas y salarios de jugadores y técnicos, amortizaciones de fichajes y rescisiones de contratos.
La mayoría de los jugadores béticos tienen fijadas en sus contratos una quita salarial que oscila entre el 35% y el 50% para poder hace frente a drásticas reducciones de ingresos como las que se van a producir por derechos de TV (de 26 a 3 millones) sin que peligre el plan de viabilidad firmado en el concurso de acreedores, pues no cumplir el mismo supondría la liquidación del club.
El Betis cerró la temporada 2013/14 con un superavit aproximado, antes de impuestos, de 24 millones de euros, aunque 15 de ellos proceden de un pleito ganado a la Hacienda pública y es una deuda que se dejará de pagar –no supone disponer de mayor liquidez en caja–, por lo que el superavit neto en tesorería será solo unos 4 millones, gracias, sobre todo, a la participación del equipo en la Liga Europa, donde llegó hasta los octavos de final, más lejos de lo presupuestado, lo que supuso unos ingresos extra de unos 5 millones de euros.
Después de haber dado de nuevo beneficios en el ejercicio 2013/14 (en el 2012/13 fueron de 12,7 millones) será difícil que el Betis cierre alguna operación de traspaso antes del 30 de junio, pues fiscalmente no interesa, por lo que será a partir del 1 de julio cuando se abran las puertas de salida a algunos futbolistas, si es que llegan ofertas interesantes por ellos, pues la idea es no malvender a ninguno de los que aún mantienen un buen cartel.
La LFP impone un tope de gasto de 10 millones al Betis en su plantel | El Correo de Andalucia
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