La lesión de Rubén Castro ha puesto manos a la obra a todo el Betis. Aunque en el club prefieren ser optimistas respecto a la recuperación del delantero canario, lógicamente está obligado también a ponerse en lo peor, en su caso, que tuviese que ser intervenido quirúrgicamente.

Las noticias que llegan sobre el estado de las molestias de Rubén Castro no son buenas y este martes por la mañana, cuando se pasó por la ciudad deportiva de Los Bermejales, casi nadie creyó sus palabras. "Estoy mejor, a ver...", se limitó a decir el jugador a los periodistas desde el interior de su vehículo.

Si claro está que no jugará en San Mamés y que es duda para Villarreal, tampoco están descartadas nuevas molestias cuando vuelva a entrenarse y que tenga que ser infiltrado por tercera vez, lo que significaría, sin duda, la antesala del quirófano para corregir esa ciatalgia tan aguda que sufre y cuyo origen desconcierta a cuanto médico lo está tratando de una u otra manera, incluido el afamado Enric Cáceres.

Sea como fuere, Pepe Mel, en contacto permanente con el director deportivo, Vlada Stosic, ya le ha hecho ver a éste la necesidad de estar atento al mercado para tratar de firmar a un nuevo delantero en invierno. A la lesión de Rubén Castro hay que añadirle que el futbolista está pendiente también de la resolución de los problemas que tuvo con una ex novia y, principalmente, que los dos delanteros llegados este verano no satisfacen los deseos de Mel.

Chuli, más parecido al canario, es una apuesta de futuro. Rápido, incisivo y trabajador, le falta además cuerpo para competir en la élite y fajarse con los centrales. Su futuro se adivina más cayendo a una banda que en uno de los dos puestos centrales del ataque. El otro delantero llegado en el mercado invernal es Braian Rodríguez, a quien el técnico no acaba de ver con un fútbol idóneo para el Betis y así lo demuestra con sus alineaciones y convocatorias. El uruguayo está acostumbrado a ver el fútbol de lado, a rematar todo lo que le llega de las bandas, principalmente de cabeza, y le va a costar adaptarse al fútbol bético.

Así las cosas, Stosic, amén de estar muy atento a posibles cesiones en invierno de futbolistas que no jueguen en sus equipos que ya interesaron en verano (Adrián, Morata, Jesé...), ha comenzado un seguimiento de ligas menores de Europa a la búsqueda de un ariete. En teoría, el Betis podría pagar hasta 3 millones de euros, aunque la apuesta en ese caso debería ser muy firme y pensando ya incluso en un futuro sin Rubén Castro.

Mientras, Juanfran y Beñat hablaron este martes del grancanario. "Rubén es un compañero más que en el campo marca las diferencias, pero dentro es uno más y sufrimos por él. Él está poniendo todo de su parte, cuando tiene que entrenar se entrena y cuando tiene que guardar reposo lo guarda. Creo que hay que tener tranquilidad porque está siendo difícil para él. Rubén se nota, pero no es una excusa si no marcamos", dice el extremo. "Está preocupado, porque le duele unas veces y otras no. Ese problema lo he vivido yo y hay semanas en las que de repente no te duele y no sabes cómo vas a estar. Le he dicho que esté tranquilo para que se recupere cuanto antes. Desde luego, para nosotros es mejor que no juegue, pero yo quiero verlo en el campo, me hubiera gustado jugar contra él; a ver si puede ser en la segunda vuelta", afirmó el vasco en Radio Sevilla.

Real Betis - Stosic ya busca un delantero - Diario de Sevilla