Cuando el club comenzó hace meses la planificación de esta temporada, todos los técnicos señalaron el nombre de Álvaro Vadillo como una de las piezas indiscutibles del proyecto, y no sólo por su condición de canterano. Después de debutar en 2011 con el primer equipo y de sufrir una grave lesión que truncó su progresión, Mel confía en que éste año sea el del despegue definitivo del puertorrealeño, a quien ya se ascendió al primer equipo el pasado mes de enero.

No ha sido un verano fácil para Vadillo. Con apenas unos días de vacaciones, el extremo quedó concentrado con la selección sub 19, con la que logró la clasificación para la fase final del Europeo, que se disputó en julio en Lituania. En aquel torneo, Vadillo fue una de las piezas destacadas del combinado nacional y su nombre apareció en todas las agendas de los ojeadores que acudieron a la cita. Tras quedar eliminada España en semifinales, el puertorrealeño se incorporó de inmediato a la concentración del equipo en tierras inglesas, renunciando a unos días de descanso para meterse de lleno en los planes de Mel.

Pero el rendimiento del canterano ha sido irregular hasta el momento. Ni en los amistosos de pretemporada ni en los minutos que ha disputado en competición oficial, Vadillo ha ofrecido la imagen que se espera, aunque el propio Mel, su principal valedor, ha mandado mensajes de tranquilidad en torno al canterano. Eso sí, el técnico también le exige más en cada oportunidad de la que disponga, por más que a sus 19 años, que cumplirá el próximo jueves, aún tenga un amplio margen de progresión.

"Lo importante es que se entrena muy bien. Ha mejorado eso mucho respecto a otras temporadas. En cada entrenamiento se exige para ser mejor. Avanza en cada paso que da hacia arriba. Va a dar mucho al Betis. Si ahora es bueno, estoy seguro que en dos años será mucho mejor", aseguró recientemente el propio entrenador verdiblanco.

Hasta el momento, Vadillo ha disputado 22 minutos en la Liga, en el estreno liguero en el Santiago Bernabéu, y 66 en la Liga Europa, en el encuentro de ida ante el Jablonec, donde, excepto con un pase de gol a Jorge Molina, su actuación pasó desapercibida.

Aun así, el nombre del canterano bético sigue en la agenda de los principales clubes europeos, que no le pierden de vista desde hace años. Sus actuaciones con las selecciones inferiores siempre han llamado la atención como una de las promesas de la prolífica cantera española, aunque en el club verdiblanco se han negado en todo momento a sentarse a negociar un hipotético traspaso.

Si mucho se escribió sobre un presunto interés del Tottenham, un intermediario cercano al club puso encima de la mesa en los últimos días del mercado una propuesta de un club de la Bundesliga que estaba dispuesto a realizar un esfuerzo por Vadillo, pero se encontró con la negativa por respuesta.

Y es que tanto Mel como el resto de los técnicos de la entidad verdiblanca confían en que esta temporada sea la del despegue del puertorrealeño. Con una evidente mejoría física propia del crecimiento con su edad, Vadillo tiene ante sí el reto de consolidarse en la élite con un Betis que lo considera una pieza importante del engranaje de esta temporada.

Vadillo y su año para el despegue