¿Qué le ocurre a Rubén Castro?
La dolencia del canario se convierte en la principal preocupación de la pretemporada. Mel lo descarta para los dos primeros partidos oficiales.
La principal preocupación de la pretemporada bética lleva el nombre de Rubén Castro. El canario, que apenas se ha entrenado con el grupo en la concentración en tierras británicas, no acaba de sentirse a tope, por más que los médicos le han colocado diversos tratamientos para acabar con sus molestias. "Está descartado para el Bernabéu y para el estreno en Europa. El objetivo es que llegue al partido del Celta", señaló ayer Mel, que no esconde su temor por este asunto.
El cuerpo médico tiene previsto realizarle pruebas complementarias al delantero para aclarar el origen de esa molestia que le bloquea los isquiotibiales y que en un principio se determinó que contaba con un origen neurológico. Lo único cierto es que el canario apenas ha podido entrenarse con el resto de sus compañeros y sus goles se han echado en falta en esta pretemporada.
"El tema de Rubén sí que nos preocupa, es importante. Con él sobre el campo, nuestra efectividad sube exponencialmente. Tener un jugador parado preocupa a todo el club y también le preocupa al chico. A ver si damos con la tecla", manifiesta el preparador verdiblanco.
Y es que desde el entorno del club se apunta a un bloqueo mental como una de las posibles causas de la dolencia muscular. El estrés al que fue sometido Rubén Castro con la causa abierta por una presunta agresión sexual, que todavía no ha encontrado su final en los juzgados de violencia de género, han podido afectar a su cuerpo, de ahí que incluso la preocupación sea aún mayor.
"Preferiría que hubiera sido una rotura muscular, sin más. Ya estaría con nosotros y trabajando como uno más", asevera Mel, quien mantiene una excelente relación con el canario: "Los dos hacemos una buena pareja y sé hasta dónde apretarle. Con Rubén hay que tener cierta comprensión más allá del deporte, le doy consejos pero es mayor de edad. Él tiene que aclarar su día a día. Sabe que tiene una afición que lo idolatra, un club que lo respeta y unos compañeros que lo quieren. Todo volverá a la normalidad y Rubén hará los goles de siempre".
Con el canario, además, existe el problema añadido de su falta de costumbre a perderse entrenamientos y partidos. Rubén Castro apenas ha tenido lesiones en su carrera deportiva, más allá de los esguinces de tobillo sufridos en los inicios de las dos últimas temporadas, o alguna molestia muscular que lo dejó fuera de algún partido puntual. Esto provoca que el delantero le dé más vueltas de las debidas a esta lesión, otro factor que ha jugado en contra de su recuperación.
En las dos últimas temporadas, Rubén Castro ha disputado 68 partidos de Liga con el cuadro verdiblanco, acumulando casi 6.000 minutos de juego, en los que ha anotado 34 goles y ha asistido a sus compañeros en 13 ocasiones, lo que señala bien a las claras su importancia en el esquema de Mel.
A menos de seis días para el comienzo de la competición oficial, el entrenador verdiblanco no puede contar con su atacante preferido, aunque la preocupación no sólo atañe a la fecha de reaparición del canario sino al origen de la dolencia, ante el temor de que se pudiera reproducir durante la temporada.
De momento, Mel coloca el encuentro ante el Celta, el primero oficial en Heliópolis, como la fecha pretendida para que Rubén Castro vuelva a vestir la elástica verdiblanca, algo que sólo ha podido realizar en los primeros amistosos celebrados durante la concentración del equipo en tierras jerezanas.
Fuente: ¿Qué le ocurre a Rubén Castro?
Que poquito me gusta este asunto.
La dolencia del canario se convierte en la principal preocupación de la pretemporada. Mel lo descarta para los dos primeros partidos oficiales.
La principal preocupación de la pretemporada bética lleva el nombre de Rubén Castro. El canario, que apenas se ha entrenado con el grupo en la concentración en tierras británicas, no acaba de sentirse a tope, por más que los médicos le han colocado diversos tratamientos para acabar con sus molestias. "Está descartado para el Bernabéu y para el estreno en Europa. El objetivo es que llegue al partido del Celta", señaló ayer Mel, que no esconde su temor por este asunto.
El cuerpo médico tiene previsto realizarle pruebas complementarias al delantero para aclarar el origen de esa molestia que le bloquea los isquiotibiales y que en un principio se determinó que contaba con un origen neurológico. Lo único cierto es que el canario apenas ha podido entrenarse con el resto de sus compañeros y sus goles se han echado en falta en esta pretemporada.
"El tema de Rubén sí que nos preocupa, es importante. Con él sobre el campo, nuestra efectividad sube exponencialmente. Tener un jugador parado preocupa a todo el club y también le preocupa al chico. A ver si damos con la tecla", manifiesta el preparador verdiblanco.
Y es que desde el entorno del club se apunta a un bloqueo mental como una de las posibles causas de la dolencia muscular. El estrés al que fue sometido Rubén Castro con la causa abierta por una presunta agresión sexual, que todavía no ha encontrado su final en los juzgados de violencia de género, han podido afectar a su cuerpo, de ahí que incluso la preocupación sea aún mayor.
"Preferiría que hubiera sido una rotura muscular, sin más. Ya estaría con nosotros y trabajando como uno más", asevera Mel, quien mantiene una excelente relación con el canario: "Los dos hacemos una buena pareja y sé hasta dónde apretarle. Con Rubén hay que tener cierta comprensión más allá del deporte, le doy consejos pero es mayor de edad. Él tiene que aclarar su día a día. Sabe que tiene una afición que lo idolatra, un club que lo respeta y unos compañeros que lo quieren. Todo volverá a la normalidad y Rubén hará los goles de siempre".
Con el canario, además, existe el problema añadido de su falta de costumbre a perderse entrenamientos y partidos. Rubén Castro apenas ha tenido lesiones en su carrera deportiva, más allá de los esguinces de tobillo sufridos en los inicios de las dos últimas temporadas, o alguna molestia muscular que lo dejó fuera de algún partido puntual. Esto provoca que el delantero le dé más vueltas de las debidas a esta lesión, otro factor que ha jugado en contra de su recuperación.
En las dos últimas temporadas, Rubén Castro ha disputado 68 partidos de Liga con el cuadro verdiblanco, acumulando casi 6.000 minutos de juego, en los que ha anotado 34 goles y ha asistido a sus compañeros en 13 ocasiones, lo que señala bien a las claras su importancia en el esquema de Mel.
A menos de seis días para el comienzo de la competición oficial, el entrenador verdiblanco no puede contar con su atacante preferido, aunque la preocupación no sólo atañe a la fecha de reaparición del canario sino al origen de la dolencia, ante el temor de que se pudiera reproducir durante la temporada.
De momento, Mel coloca el encuentro ante el Celta, el primero oficial en Heliópolis, como la fecha pretendida para que Rubén Castro vuelva a vestir la elástica verdiblanca, algo que sólo ha podido realizar en los primeros amistosos celebrados durante la concentración del equipo en tierras jerezanas.
Fuente: ¿Qué le ocurre a Rubén Castro?
Que poquito me gusta este asunto.
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