Obras para un túnel único para los dos equipos y el árbitro
Escrito por Mateo González
El verano va a ser movido en el Villamarín. Muchas obras para adecentar sus vestuarios, zona mixta y oficinas. Lo más llamativo para el aficionado, por ejemplo, será que ambos equipos y árbitro saldrán al terreno de juego desde una misma boca de vestuarios, cuando hasta ahora lo hacían cada uno por la suya. De hecho, el heliopolitano es uno de los pocos campos de España en el que aún tiene el árbitro su túnel de acceso propio. Ahora se ensanchará éste, el central, para que todos los protagonistas pasen por ahí y haya más uniformidad en la puesta en escena de los intervinientes en el espectáculo. De esta manera, no sólo habrá movimientos en el Villamarín en materia de fichajes, sino que también será de manera física con el estadio bético.
Esa es la obra más llamativa para el espectador, pero se sucederán muchas más durante este estío de trabajos en el coliseo bético. La clasificación para la Liga Europa conlleva una serie de adaptaciones a requisitos de la UEFA que ha de cumplir el Betis para albergar partidos de esta competición. La mayoría atañe a las referentes a las instalaciones para los medios de comunicación que quieran cubrir el evento. Y es que las cabinas del estadio tendrán que aumentar su número hasta las 20 y el club tendrá que buscar localizaciones para sets de televisión. Además de estas mejoras, la entidad ya preveía remodelar la zona mixta, en la que los jugadores salen al encuentro de los periodistas para ser entrevistados tras los partidos, y ésta será más grande, común y supondrá el traslado de salas como el despacho del entrenador local a otra ubicación. Todo eso ocurrirá en las entrañas de la grada de Preferencia.
En 2005, cuando el Betis jugó la Liga de Campeones, la entidad verdiblanca ya acometió pequeñas reformas para adaptarse a los requerimientos en este sentido pero gran parte de la ubicación para los medios de comunicación y la zona hospitality se trasladaron a carpas provisionales que se instalaron fuera del recinto, en la explanada que sirve habitualmente de aparcamiento. Ahora el club va a hacer modificaciones que, sin alto coste según fuentes de la entidad, permanezcan y tengan buen desarrollo también en la Liga y otras competiciones que se disputen en el Villamarín.
Las oficinas, también
Además, ya han comenzado las obras de mejora de las oficinas, que precisaban de esta puesta al día. Ahora se apuesta por unos despachos y salas más diáfanos y se han ido reubicando a los primeros afectados. La obra ha comenzado por la zona más cercana a Gol Norte. Con ello se quiere generar un mejor ambiente de trabajo, facilidades para los empleados y una imagen más moderna para las oficinas de un club de elite. Con todo ello se constata, por si a alguien aún no le había quedado claro, que la terminación del estadio Benito Villamarín no es un proyecto a corto plazo precisamente. Lleva parado una década y no continuará en un futuro cercano. Las obras no tendrán un presupuesto elevado y se prevé que se finalicen durante el verano.
Escrito por Mateo González
El verano va a ser movido en el Villamarín. Muchas obras para adecentar sus vestuarios, zona mixta y oficinas. Lo más llamativo para el aficionado, por ejemplo, será que ambos equipos y árbitro saldrán al terreno de juego desde una misma boca de vestuarios, cuando hasta ahora lo hacían cada uno por la suya. De hecho, el heliopolitano es uno de los pocos campos de España en el que aún tiene el árbitro su túnel de acceso propio. Ahora se ensanchará éste, el central, para que todos los protagonistas pasen por ahí y haya más uniformidad en la puesta en escena de los intervinientes en el espectáculo. De esta manera, no sólo habrá movimientos en el Villamarín en materia de fichajes, sino que también será de manera física con el estadio bético.
Esa es la obra más llamativa para el espectador, pero se sucederán muchas más durante este estío de trabajos en el coliseo bético. La clasificación para la Liga Europa conlleva una serie de adaptaciones a requisitos de la UEFA que ha de cumplir el Betis para albergar partidos de esta competición. La mayoría atañe a las referentes a las instalaciones para los medios de comunicación que quieran cubrir el evento. Y es que las cabinas del estadio tendrán que aumentar su número hasta las 20 y el club tendrá que buscar localizaciones para sets de televisión. Además de estas mejoras, la entidad ya preveía remodelar la zona mixta, en la que los jugadores salen al encuentro de los periodistas para ser entrevistados tras los partidos, y ésta será más grande, común y supondrá el traslado de salas como el despacho del entrenador local a otra ubicación. Todo eso ocurrirá en las entrañas de la grada de Preferencia.
En 2005, cuando el Betis jugó la Liga de Campeones, la entidad verdiblanca ya acometió pequeñas reformas para adaptarse a los requerimientos en este sentido pero gran parte de la ubicación para los medios de comunicación y la zona hospitality se trasladaron a carpas provisionales que se instalaron fuera del recinto, en la explanada que sirve habitualmente de aparcamiento. Ahora el club va a hacer modificaciones que, sin alto coste según fuentes de la entidad, permanezcan y tengan buen desarrollo también en la Liga y otras competiciones que se disputen en el Villamarín.
Las oficinas, también
Además, ya han comenzado las obras de mejora de las oficinas, que precisaban de esta puesta al día. Ahora se apuesta por unos despachos y salas más diáfanos y se han ido reubicando a los primeros afectados. La obra ha comenzado por la zona más cercana a Gol Norte. Con ello se quiere generar un mejor ambiente de trabajo, facilidades para los empleados y una imagen más moderna para las oficinas de un club de elite. Con todo ello se constata, por si a alguien aún no le había quedado claro, que la terminación del estadio Benito Villamarín no es un proyecto a corto plazo precisamente. Lleva parado una década y no continuará en un futuro cercano. Las obras no tendrán un presupuesto elevado y se prevé que se finalicen durante el verano.
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