Re: Rubén Castro, libre pero con una orden de alejamiento hacia su expareja
Desde que era un jovencillo siempre me vanaglorié de conocer la psicología de las personas. Cuando salía en la tele o en prensa algún caso de asesinato, recopilaba los datos y me hacía un juicio de valor sobre el tema. Me decía:"Ha sido fulanito y por esto". Y la verdad es que solía acertar. Entonces sonreía y me decía:"Si es que estaba claro!!!"
Hace unos 13 o 14 años apareció muerta una chica llamada Rocío Wanninkhof y cuando empezaron a indagar la policía apareció como sospechosa Dolores Vázquez. Cuando dieron los datos de la mala relación con la cría, su relación con la madre, esa cara que tenía de mala persona lo tuve claro: Había sido ella. Había cometido un crimen horrendo y tenía que pagar por ello. Fue condenada por ello en el 2001 y lo único que pensaba es que se tenía que pudrir en la cárcel.
Resulta que no fue ella. Fue absuelta en el 2002 al aparecer el verdadero asesino. Aquello me sirvió para dos cosas:
1.- Me di cuenta de que era peor persona de lo que pensaba
2.- Para no hacer nunca más juicios de valor o paralelos.
Dicen que nadie aprende por cabeza ajena.
Es posible, y así lo espero, que Rubén Castro sea inocente y si es así, todos aquellos que habéis juzgado y emitido sentencia esbozaréis una sonrisa y os diréis que la cosa estaba clara. Eso os animará a seguir haciendo juicios del mismo tipo. Hasta que un día os deis cuenta de que no sois tan buenas personas.
Dejemos a la justicia actuar.
Desde que era un jovencillo siempre me vanaglorié de conocer la psicología de las personas. Cuando salía en la tele o en prensa algún caso de asesinato, recopilaba los datos y me hacía un juicio de valor sobre el tema. Me decía:"Ha sido fulanito y por esto". Y la verdad es que solía acertar. Entonces sonreía y me decía:"Si es que estaba claro!!!"
Hace unos 13 o 14 años apareció muerta una chica llamada Rocío Wanninkhof y cuando empezaron a indagar la policía apareció como sospechosa Dolores Vázquez. Cuando dieron los datos de la mala relación con la cría, su relación con la madre, esa cara que tenía de mala persona lo tuve claro: Había sido ella. Había cometido un crimen horrendo y tenía que pagar por ello. Fue condenada por ello en el 2001 y lo único que pensaba es que se tenía que pudrir en la cárcel.
Resulta que no fue ella. Fue absuelta en el 2002 al aparecer el verdadero asesino. Aquello me sirvió para dos cosas:
1.- Me di cuenta de que era peor persona de lo que pensaba
2.- Para no hacer nunca más juicios de valor o paralelos.
Dicen que nadie aprende por cabeza ajena.
Es posible, y así lo espero, que Rubén Castro sea inocente y si es así, todos aquellos que habéis juzgado y emitido sentencia esbozaréis una sonrisa y os diréis que la cosa estaba clara. Eso os animará a seguir haciendo juicios del mismo tipo. Hasta que un día os deis cuenta de que no sois tan buenas personas.
Dejemos a la justicia actuar.
Comentario