Re: Reportaje sobre Dorlan Pabón en canal+
¿Adivina a qué jugador del Betis le apodan Memín? : Beticismo.net
En su día nuestro compañero Miguel Verdugo analizó al colombiano Dorlan Pabón en el plano meramente futbolístico, para completar el análisis vamos a centrarnos en el delantero sudamericano desde otro prisma, dejando a un lado sus características técnicas para mostraros detalles de un jugador que, especialmente en su paso por el Atlético Nacional, dejó un buen recuerdo a las hinchadas por las que ha pasado.
En el plano personal Dorlan no tuvo una infancia fácil, creciendo sin figura paterna y siendo su madre alcohólica. Desde muy pequeño tuvo que vivir con sus tías y utilizó, como muchos chicos sudamericanos, el fútbol como vía de escape y el motor de su vida. En una entrevista realizada para un medio de su país hablaba sobre esta situación:
”A mí me ha tocado muy duro desde niño. Yo vivía con mi mamá y ella tomaba mucho y eso no era futuro para mí. Me fui a vivir con una tía. Ella me sacó adelante. Ahora vivo agradecido con ella, con su esposo y con su hija porque me recibieron”
Las calles y campos de todo tipo del barrio Campo Valdés, de la capital antioqueña, eran testigo de sus precoces goles. Para Dorlan el fútbol era todo para el:
“Me mantenía jugando descalzo, sin camisa… Desde pequeño cogía un balón y me iba para la cancha desde las diez de la mañana y llegaba a las siete de la noche a la casa”
Dorlan Mauricio Pabón Ríos nace en la ciudad de Medellin en 1988, el 24 de enero del mismo año. Su debut como profesional se produjo en el Bajo Cauca, de la segunda división colombiana allá por el 2006, cuando Dorlan tenía solo 18 años. Jugaría en el club hasta 2008 anotando tres goles. Al acabar la temporada ficharía por Envigado, club colombiano que retornaba en aquel tiempo a la primera división y decidía hacerse con sus servicios.
Así, Envigado se hacia con otro joven talento por esas fechas, continuando su apuesta por la incorporación y formación de jugadores jóvenes que actualmente están aportando y siendo importantes en el panorama futbolístico europeo. Freddy Guarin, James Rodriguez o Juan Fernando Quintero son varios ejemplos. Su etapa en Envigado fue muy interesante, ya que desde el inicio el colombiano rindió a un buen nivel. Tanto es así que fue convocado con la selección para encuentros clasificatorios de cara al mundial de 2010, siendo titular ante Chile. Su convocatoria y buena actuación individual no fue recompensada con la clasificación de Colombia. Su rendimiento continua siendo destacado y regular y es a mediados de 2010 cuando Atlético Nacional lo ficha por 1’5 millones de dolares aproximadamente. Los números de Pabón en Envigado son notables, anotando 15 goles en 70 partidos.
Atlético Nacional suponía un nuevo reto para el colombiano, de mayor presión que los anteriores. Aterrizaba en uno de los clubes mas poderosos en el plano económico, que apostaba fuerte por el y quería verle destacar desde primera hora. No defraudó, consolidándose rápidamente como titular en el equipo y ganando en 2011 el Torneo Apertura colombiano, siendo una de las grandes figuras del equipo. A pesar de ello no fue convocado para disputar la Copa América de aquel año, una decisión que fue sorprendente para muchos aficionados por sus méritos. Esta ausencia no es óbice para Dorlan, que sigue mostrando buen rendimiento en su club, lo que le vale para ir convocado para partidos eliminatorios, debutando con gol ante Bolivia y marcando también ante Argentina. Goles que no serian suficientes para un sector de la afición, que criticaba su desconexión en ciertas fases de los partidos y su excesiva individualidad en el verde.
Volviendo a su club, su consolidación en Atlético Nacional llega en 2012, en la Copa Libertadores, donde anota 7 goles y es para la prensa un merecido integrante del 11 ideal de la competición, a pesar de que con su equipo solo llegó a octavos. Vuelve a la convocatoria con su selección, donde nuevamente se reabren las criticas de prensa y afición por su individualismo y falta de asociación con el colchonero Falcao, lo que provoco que abandonase la titularidad para los siguientes partidos. Criticas que siempre saltan cuando las cosas no salen bien, pero que muestran una de las características del colombiano, que no rehusa al disparo desde cualquier posición, “echándose el equipo a la espalda”. Después de estos partidos internacionales abandona Atlético Nacional para poner rumbo a Europa. Con 24 años ficha por el Parma italiano, en una operación tasada en 4 millones de euros.
Desde el inicio generó gran ilusión en la hinchada, teniendo un papel muy destacado en pretemporada en el aspecto goleador. Todas esas expectativas quedaron en el aire. Solo ha durado media temporada en el equipo, recalando cedido en este mercado de invierno en el Real Betis, donde jugará hasta junio de 2013. Solo pudo anotar un gol en Serie A, ante el Catania en Copa, en un paso fugaz. No lo tuvo fácil el colombiano, que tuvo que lidiar con la grave enfermedad de su hijo, que le hacia ausentarse de la dinámica del equipo para viajar a Colombia. Por suerte todo quedó en una mala etapa y su hijo esta recuperado y el en una nueva etapa europea.
A priori los aficionados Béticos vamos a disfrutar poco del colombiano, ya que su cesión dura 6 meses, cuando recale en el Monterrey mexicano. Su nuevo club pretendía que Dorlan siguiese en un club europeo hasta verano y eligieron al club verdiblanco. Deportivo de la Coruña y sobre todo el Espanyol estuvieron a punto de incorporarlo. 500.000 € a cambio de seis meses en los que de momento esta inmerso en un proceso de adaptación a marchas forzadas. Ha empezado como titular y eso le va a ayudar a mostrar todas sus cualidades en poco tiempo, lo que sería mas fácil si la situación del equipo fuese la de la primera vuelta, algo que esperemos que vuelva pronto.
Sudamerica es el territorio predilecto de los apodos, tienen esa habilidad innata para ponerlos, no solo en fútbol. ‘El fideo’, ‘El ******’, ‘El loco’ seguro que son motes que todo el mundo conoce y sabe asociarlo a su jugador. Colombia, y mas concretamente el jugador al que analizamos, no ha sido una excepción y también cuenta con uno propio. Memin es el apodo por el que se le conoce al bueno de Dorlan.
Su parecido con el personaje de caricatura -moreno, menudo y con pelo casi rapado- fue el motivo para que cuajase el apodo. Tiene su origen en la hinchada del Atlético Nacional, equipo donde quizás dió su mejor versión. Sus aficionados lo acuñaron y cada vez que el colombiano anotaba un gol el grito de ”ole, ole, ole, ole, Memín, Memín” empezaba a sonar en el Estadio Tecnológico, que vibró en muchas ocasiones con ese cántico.
“En Colombia me llaman así, es una revista de allá que es muy famosa y son como una especie de muñequitos. Dicen que me parezco”, decía el colombiano en una rueda de prensa con su selección.
Un apodo que a buen seguro volverá a tener protagonismo cuando recale en Monterrey, equipo mexicano, de donde es precisamente Memin. Parecidos o no, es curioso y original. Si el colombiano finalmente se queda en el Betis mas allá de junio ¿Escucharemos en el Villamarín el cántico de Memin? El tiempo lo dirá..
¿Adivina a qué jugador del Betis le apodan Memín? : Beticismo.net
En su día nuestro compañero Miguel Verdugo analizó al colombiano Dorlan Pabón en el plano meramente futbolístico, para completar el análisis vamos a centrarnos en el delantero sudamericano desde otro prisma, dejando a un lado sus características técnicas para mostraros detalles de un jugador que, especialmente en su paso por el Atlético Nacional, dejó un buen recuerdo a las hinchadas por las que ha pasado.
En el plano personal Dorlan no tuvo una infancia fácil, creciendo sin figura paterna y siendo su madre alcohólica. Desde muy pequeño tuvo que vivir con sus tías y utilizó, como muchos chicos sudamericanos, el fútbol como vía de escape y el motor de su vida. En una entrevista realizada para un medio de su país hablaba sobre esta situación:
”A mí me ha tocado muy duro desde niño. Yo vivía con mi mamá y ella tomaba mucho y eso no era futuro para mí. Me fui a vivir con una tía. Ella me sacó adelante. Ahora vivo agradecido con ella, con su esposo y con su hija porque me recibieron”
Las calles y campos de todo tipo del barrio Campo Valdés, de la capital antioqueña, eran testigo de sus precoces goles. Para Dorlan el fútbol era todo para el:
“Me mantenía jugando descalzo, sin camisa… Desde pequeño cogía un balón y me iba para la cancha desde las diez de la mañana y llegaba a las siete de la noche a la casa”
Dorlan Mauricio Pabón Ríos nace en la ciudad de Medellin en 1988, el 24 de enero del mismo año. Su debut como profesional se produjo en el Bajo Cauca, de la segunda división colombiana allá por el 2006, cuando Dorlan tenía solo 18 años. Jugaría en el club hasta 2008 anotando tres goles. Al acabar la temporada ficharía por Envigado, club colombiano que retornaba en aquel tiempo a la primera división y decidía hacerse con sus servicios.
Así, Envigado se hacia con otro joven talento por esas fechas, continuando su apuesta por la incorporación y formación de jugadores jóvenes que actualmente están aportando y siendo importantes en el panorama futbolístico europeo. Freddy Guarin, James Rodriguez o Juan Fernando Quintero son varios ejemplos. Su etapa en Envigado fue muy interesante, ya que desde el inicio el colombiano rindió a un buen nivel. Tanto es así que fue convocado con la selección para encuentros clasificatorios de cara al mundial de 2010, siendo titular ante Chile. Su convocatoria y buena actuación individual no fue recompensada con la clasificación de Colombia. Su rendimiento continua siendo destacado y regular y es a mediados de 2010 cuando Atlético Nacional lo ficha por 1’5 millones de dolares aproximadamente. Los números de Pabón en Envigado son notables, anotando 15 goles en 70 partidos.
Atlético Nacional suponía un nuevo reto para el colombiano, de mayor presión que los anteriores. Aterrizaba en uno de los clubes mas poderosos en el plano económico, que apostaba fuerte por el y quería verle destacar desde primera hora. No defraudó, consolidándose rápidamente como titular en el equipo y ganando en 2011 el Torneo Apertura colombiano, siendo una de las grandes figuras del equipo. A pesar de ello no fue convocado para disputar la Copa América de aquel año, una decisión que fue sorprendente para muchos aficionados por sus méritos. Esta ausencia no es óbice para Dorlan, que sigue mostrando buen rendimiento en su club, lo que le vale para ir convocado para partidos eliminatorios, debutando con gol ante Bolivia y marcando también ante Argentina. Goles que no serian suficientes para un sector de la afición, que criticaba su desconexión en ciertas fases de los partidos y su excesiva individualidad en el verde.
Volviendo a su club, su consolidación en Atlético Nacional llega en 2012, en la Copa Libertadores, donde anota 7 goles y es para la prensa un merecido integrante del 11 ideal de la competición, a pesar de que con su equipo solo llegó a octavos. Vuelve a la convocatoria con su selección, donde nuevamente se reabren las criticas de prensa y afición por su individualismo y falta de asociación con el colchonero Falcao, lo que provoco que abandonase la titularidad para los siguientes partidos. Criticas que siempre saltan cuando las cosas no salen bien, pero que muestran una de las características del colombiano, que no rehusa al disparo desde cualquier posición, “echándose el equipo a la espalda”. Después de estos partidos internacionales abandona Atlético Nacional para poner rumbo a Europa. Con 24 años ficha por el Parma italiano, en una operación tasada en 4 millones de euros.
Desde el inicio generó gran ilusión en la hinchada, teniendo un papel muy destacado en pretemporada en el aspecto goleador. Todas esas expectativas quedaron en el aire. Solo ha durado media temporada en el equipo, recalando cedido en este mercado de invierno en el Real Betis, donde jugará hasta junio de 2013. Solo pudo anotar un gol en Serie A, ante el Catania en Copa, en un paso fugaz. No lo tuvo fácil el colombiano, que tuvo que lidiar con la grave enfermedad de su hijo, que le hacia ausentarse de la dinámica del equipo para viajar a Colombia. Por suerte todo quedó en una mala etapa y su hijo esta recuperado y el en una nueva etapa europea.
A priori los aficionados Béticos vamos a disfrutar poco del colombiano, ya que su cesión dura 6 meses, cuando recale en el Monterrey mexicano. Su nuevo club pretendía que Dorlan siguiese en un club europeo hasta verano y eligieron al club verdiblanco. Deportivo de la Coruña y sobre todo el Espanyol estuvieron a punto de incorporarlo. 500.000 € a cambio de seis meses en los que de momento esta inmerso en un proceso de adaptación a marchas forzadas. Ha empezado como titular y eso le va a ayudar a mostrar todas sus cualidades en poco tiempo, lo que sería mas fácil si la situación del equipo fuese la de la primera vuelta, algo que esperemos que vuelva pronto.
Sudamerica es el territorio predilecto de los apodos, tienen esa habilidad innata para ponerlos, no solo en fútbol. ‘El fideo’, ‘El ******’, ‘El loco’ seguro que son motes que todo el mundo conoce y sabe asociarlo a su jugador. Colombia, y mas concretamente el jugador al que analizamos, no ha sido una excepción y también cuenta con uno propio. Memin es el apodo por el que se le conoce al bueno de Dorlan.
Su parecido con el personaje de caricatura -moreno, menudo y con pelo casi rapado- fue el motivo para que cuajase el apodo. Tiene su origen en la hinchada del Atlético Nacional, equipo donde quizás dió su mejor versión. Sus aficionados lo acuñaron y cada vez que el colombiano anotaba un gol el grito de ”ole, ole, ole, ole, Memín, Memín” empezaba a sonar en el Estadio Tecnológico, que vibró en muchas ocasiones con ese cántico.
“En Colombia me llaman así, es una revista de allá que es muy famosa y son como una especie de muñequitos. Dicen que me parezco”, decía el colombiano en una rueda de prensa con su selección.
Un apodo que a buen seguro volverá a tener protagonismo cuando recale en Monterrey, equipo mexicano, de donde es precisamente Memin. Parecidos o no, es curioso y original. Si el colombiano finalmente se queda en el Betis mas allá de junio ¿Escucharemos en el Villamarín el cántico de Memin? El tiempo lo dirá..
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