Los que pagamos nuestro abono, los que nos mojamos por las goteras o la falta de techado en el estadio cuando llueve, los que se pegan las palizas para venir cada dos semanas desde más de 100 kilómetros, los que tenemos que hacer malabares para sacar X dinero para ir al campo... qué hacemos para demostrar que nos han hecho sentir vergüenza. Y no hablo exclusivamente de los jugadores. Hablo de eso, del planteamiento, los cambios y la rueda de prensa de Mel, hablo de las lamentables palabras de nuestro presidente, de la falta de autocrítica por parte de (casi) todos los estamentos del club.
Espero que, como poco, la semana que viene se escuche una señora pitada cuando se den por megafonía los nombres de los que hoy se han arrastrado, que se mire al palco y se pidan responsabilidades, que se le de caña al entrenador.
Y ya que estamos, quiero hacer una reflexión. Y es que no se puede escupir para arriba, porque cae en lo alto. Ya que se sacó el tifo aquel de "vamos a sentarnos que queremos verlo" cuando ganamos en el anterior derby (muy desafortunado en mi opinión por eso que digo de que escupir para arriba es como mear en contra del viento), deberíamos reflexionar y sacar algo parecido para demostrar que nos avergonzamos del bochorno que le han hecho pasar todos y cada uno de los estamentos del club, como poco, a la mitad de la provincia de Sevilla y a miles de béticos que hay repartidos por toda la geografía española.
Espero que, como poco, la semana que viene se escuche una señora pitada cuando se den por megafonía los nombres de los que hoy se han arrastrado, que se mire al palco y se pidan responsabilidades, que se le de caña al entrenador.
Y ya que estamos, quiero hacer una reflexión. Y es que no se puede escupir para arriba, porque cae en lo alto. Ya que se sacó el tifo aquel de "vamos a sentarnos que queremos verlo" cuando ganamos en el anterior derby (muy desafortunado en mi opinión por eso que digo de que escupir para arriba es como mear en contra del viento), deberíamos reflexionar y sacar algo parecido para demostrar que nos avergonzamos del bochorno que le han hecho pasar todos y cada uno de los estamentos del club, como poco, a la mitad de la provincia de Sevilla y a miles de béticos que hay repartidos por toda la geografía española.
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