El Betis anunció ayer que la junta de accionistas correspondiente al ejercicio 2011-12 se celebrará el próximo 10 de diciembre, a partir de las 20.00, en el hotel Silken Al-Ándalus, lugar habitual de estas asambleas. El club verdiblanco presentará ante sus accionistas un resultado positivo en ese ejercicio de 33.244.411,93 euros, matizados por contar con una partida importantísima procedente de los ingresos fincancieros derivados del convenio de acreedores, suscrito la pasada primavera, que alcanzan 25.331.561,05 euros. De esta manera, el balance positivo de la gestión del consejo actual en la pasada campaña es de 7.908.114,6 euros. Por vez primera no hay números rojos en los últimos años, ya que desde la temporada 2007-08 se han producido pérdidas en los resultados finales: 11,7 millones en esa campaña, 4,98 en la siguiente, 39,4 en la primera en Segunda y 35,96 en la del ascenso. Al evitar los números rojos en su balance, el club reduce el impacto de los fondos propios, que siguen siendo negativos pero pasan de -67.114.582,56 a los -31.485.527,91, lo que repercute en el patrimonio neto, que también transita de manera favorables desde los -68.282.257,86 a los -28.336.367,51 actuales. Además de todo ello se han ajustado dos millones en las reservas de años anteriores por cambios de criterios contables.


Los resultados positivos son consecuencia del aumento de los ingresos por televisión, que pasan de los 2,3 millones en Segunda a los 24,5 en Primera, aunque son sensiblemente inferiores de lo esperado, ya que según el contrato televisivo debían ser de 27. Quizás esta reducción esté enmarcada en el nuevo acuerdo con Sogecable y los famosos diez millones por los que se litigaban. Este ingreso es fundamental para la supervivencia del club, ya que supone más de la mitad de la cifra de negocios (40,8 millones, cifra que no se alcanzaba desde la 2008-09). El resto de partidas son sensiblemente inferiores, como los 9,9 ingresados por abonos y los 4 por publicidad. Sin embargo, en el apartado de ingresos lo que influye prioritariamente es el resultado del concurso, que supone un ingreso extraordinario de 25,3 millones, como consecuencia de la quita del 50 por ciento aprobada en el convenio. Todo ello refleja que el mantenimiento y control de gastos no han aumentado significativamente si se comparan con el ejercicio anterior. Esa quita también ha saneado el balance, reduciendo la deuda de los créditos ordinarios y subordinados en dicho 50%, y han ocasionado una reclasificación del pasivo, a largo o corto plazo, según el calendario de pagos a ocho años. Por ello el pasivo no corriente (a largo plazo) se ha reducido considerablemente pero se vuelve a tener pasivo a corto, algo que estaba minimizado durante la temporada anterior motivado por el concurso.



Hay que detenerse en varios puntos concretos. En el plano positivo, los gastos de personal sólo alcanzan el 63,5 por ciento del importe neto de la cifra de negocios, con el margen que ello da para maniobrar, sobre todo cuando en las dos temporadas anteriores fue del 198% y del 152%. De esta manera, los gastos de personal se adaptan a lo recomendado y se quedan en los 25,9 millones. Sin embargo, en los servicios exteriores hay un incremento notable, ya que pasan de los 3,5 millones de la 2010-11 a los 6,2 de la pasada. Esta partida ha de ser explicada, aunque 2,4 millones de los mismos proceden de la póliza de seguros suscrita y, seguramente, buena parte de contrataciones de letrados para los diferentes litigios y otros profesionales independientes. Además, llama la atención el punto «gastos de adquisición de futbolistas», que ascienden a 1,6 millones. Se trataría de las cesiones de la pasada campaña, que supusieron un alto coste, como las de Roque Santa Cruz, Tosic, Ustaritz o Jefferson Montero.

Beneficio de 7,9 millones sin tener en cuenta el concurso de acreedores