...es culpa de Mel.
Siempre he sido defensor suyo y no estaba de acuerdo con los que lo criticaban porque lo veía un tío centrado, listo y que sabía hablar bien. Pero este año no sé que le pasa, lo veo con mala cara, como sobrepasado por la presión, como intuyendo que el equipo está roto y no puede hacer nada más que esperar a que lo sustituyan. Se le ve muy nervioso siempre, sin saber tomar esas decisiones de cabeza bien amueblada tanto fuera como dentro del campo.
Un ejemplo es lo de Nosa ayer, que por mucho que digan yo creo que no puedes meterle presión de esa forma a un chaval nigeriano de 21 años que ni habla español y que iba a hacer su debut en la liga española. Pienso que de tratarlo con cariño desde el principio, demostrándole confianza, animándolo a hacer un buen partido, palmadita en la espalda, etc... el chaval hubiese salido motivado. Y si tiene un problema porque se le cayeron los tacos pues se espera para cambiarlo, porque de la prisa que le metió tuvo que entrar Nosa sin tacos (se vió en la tele) con el consiguiente riesgo de lesión importante y además dejando cojo al equipo en su puesto, ya que no pudo aportar nada al no tener agarre al campo. Fatal Mel ahí, de los nervios que tiene hizo esa locura y esperemos que no se haya cargado mentalmente al jugador.
No es normal que un equipo que el año pasado jugaba bien este año apenas llegue al 40% de posesión y que el Valladolid o el Rayo manejen el partido a su antojo. El Bilbao también jugó agusto y con la posesión, lo que pasa es que ese día las 5 veces que tiramos fueron dentro de la portería.
Creo que el equipo ve a Mel fuera de sí y se contagia de ese nerviosismo, esa es la razón de estos partiditos que estamos viendo.
Quizá la clave esté en la psicóloga Patricia como ha dicho un forero en otro hilo...
Siempre he sido defensor suyo y no estaba de acuerdo con los que lo criticaban porque lo veía un tío centrado, listo y que sabía hablar bien. Pero este año no sé que le pasa, lo veo con mala cara, como sobrepasado por la presión, como intuyendo que el equipo está roto y no puede hacer nada más que esperar a que lo sustituyan. Se le ve muy nervioso siempre, sin saber tomar esas decisiones de cabeza bien amueblada tanto fuera como dentro del campo.
Un ejemplo es lo de Nosa ayer, que por mucho que digan yo creo que no puedes meterle presión de esa forma a un chaval nigeriano de 21 años que ni habla español y que iba a hacer su debut en la liga española. Pienso que de tratarlo con cariño desde el principio, demostrándole confianza, animándolo a hacer un buen partido, palmadita en la espalda, etc... el chaval hubiese salido motivado. Y si tiene un problema porque se le cayeron los tacos pues se espera para cambiarlo, porque de la prisa que le metió tuvo que entrar Nosa sin tacos (se vió en la tele) con el consiguiente riesgo de lesión importante y además dejando cojo al equipo en su puesto, ya que no pudo aportar nada al no tener agarre al campo. Fatal Mel ahí, de los nervios que tiene hizo esa locura y esperemos que no se haya cargado mentalmente al jugador.
No es normal que un equipo que el año pasado jugaba bien este año apenas llegue al 40% de posesión y que el Valladolid o el Rayo manejen el partido a su antojo. El Bilbao también jugó agusto y con la posesión, lo que pasa es que ese día las 5 veces que tiramos fueron dentro de la portería.
Creo que el equipo ve a Mel fuera de sí y se contagia de ese nerviosismo, esa es la razón de estos partiditos que estamos viendo.
Quizá la clave esté en la psicóloga Patricia como ha dicho un forero en otro hilo...
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