Amaya, se fue ganando y regresó victorioso
La evolución de la temporada de Antonio Amaya está siendo para analizar. El central madrileño ha visto marcada su primera campaña en el Betis por la lesión que se produjo en la vuelta copera ante el Córdoba y que le hizo abandonar entonces el campo antes de tiempo y estar de baja durante el arranque de 2012 hasta que ante el Málaga regresó triunfal. Su último partido completo y en la Liga fue en el Vicente Calderón ante el Atlético de Madrid y con un resultado similar, un 0-2 en el que fue un auténtico valladar. Amaya se marchó de la Liga victorioso y ha regresado de la misma manera.
En aquel duelo, comparado hoy con el de Málaga por el juego que practicó el Betis, Amaya formó una dupla infranqueable para los atacantes atléticos junto a Dorado. Fue la misma que solventó muchas situaciones complicadas anoche en La Rosaleda. Amaya estuvo en el equipo titular aquella tarde junto al Manzanares pero no pudo tener continuidad debido a la lesión que se produjo ante el Córdoba y que impulsó el fichaje de Paulao y que dejó al Betis esperando su recuperación, que no ha llegado hasta ahora.
Amaya, un especialista en el juego aéreo y buen recurso para partidos como los de Atlético y Málaga, en los que el Betis se encerró atrás y sacó y sacó balones, ha disputado sólo ocho partidos en la Liga en esta temporada pero tiene una estadística envidiable, ya que estuvo presente en cinco victorias (Mallorca, Athletic, Zaragoza, Atlético y Málaga) y tres derrotas (Levante, Madrid y Rayo), todo en la primera vuelta a excepción del duelo de anoche, ya que estaba inédito en la Liga desde el 18 de diciembre.
El central madrileño fue uno de los fichajes más importantes del verano bético, ya que llegó procedente del Wigan a cambio de un traspaso, aunque no fue muy costoso, y venía avalado por el propio Mel, que lo había tenido a sus órdenes en el Rayo Vallecano en Segunda.
Amaya, se fue ganando y regresó victorioso
La evolución de la temporada de Antonio Amaya está siendo para analizar. El central madrileño ha visto marcada su primera campaña en el Betis por la lesión que se produjo en la vuelta copera ante el Córdoba y que le hizo abandonar entonces el campo antes de tiempo y estar de baja durante el arranque de 2012 hasta que ante el Málaga regresó triunfal. Su último partido completo y en la Liga fue en el Vicente Calderón ante el Atlético de Madrid y con un resultado similar, un 0-2 en el que fue un auténtico valladar. Amaya se marchó de la Liga victorioso y ha regresado de la misma manera.
En aquel duelo, comparado hoy con el de Málaga por el juego que practicó el Betis, Amaya formó una dupla infranqueable para los atacantes atléticos junto a Dorado. Fue la misma que solventó muchas situaciones complicadas anoche en La Rosaleda. Amaya estuvo en el equipo titular aquella tarde junto al Manzanares pero no pudo tener continuidad debido a la lesión que se produjo ante el Córdoba y que impulsó el fichaje de Paulao y que dejó al Betis esperando su recuperación, que no ha llegado hasta ahora.
Amaya, un especialista en el juego aéreo y buen recurso para partidos como los de Atlético y Málaga, en los que el Betis se encerró atrás y sacó y sacó balones, ha disputado sólo ocho partidos en la Liga en esta temporada pero tiene una estadística envidiable, ya que estuvo presente en cinco victorias (Mallorca, Athletic, Zaragoza, Atlético y Málaga) y tres derrotas (Levante, Madrid y Rayo), todo en la primera vuelta a excepción del duelo de anoche, ya que estaba inédito en la Liga desde el 18 de diciembre.
El central madrileño fue uno de los fichajes más importantes del verano bético, ya que llegó procedente del Wigan a cambio de un traspaso, aunque no fue muy costoso, y venía avalado por el propio Mel, que lo había tenido a sus órdenes en el Rayo Vallecano en Segunda.
Amaya, se fue ganando y regresó victorioso
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