Si su señoría le dice «ven», el ciudadano Galera lo deja todo
FRANCISCO PÉREZ (ABC)
Mercedes Alaya, titular del Juzgado de Instrucción número 6 de Sevilla, lo ha citado como testigo, y a él, que sigue siendo un romántico, le ha sonado el exhorto judicial como aquel «si tú me dices ven, lo dejo todo» y ese día, Hugo Galera Davidson, ex presidente del Real Betis, catedrático de Anatomía Patológica y acreditado especialista «loperiano», estará clavado a la hora que le digan en el despacho de la jueza para contarle a ésta unas cuantas cosas que sabe, o cree saber, que en estos casos hay presunción de creencia, acerca del supuesto delito societario cometido por Manuel Ruiz de Lopera como máximo accionista del club.
La comparecencia de Galera en el juzgado tiene carácter de hito para quien, bien a su pesar, ha dedicado los últimos años de su vida a fiscalizar de manera implacable la gestión del mandatario bético, a alertar a la afición sobre los presuntos excesos de Jabugo y a aunar las voluntades del capital crítico para, aprovechando el resquicio que le ofrece la ley, poner contra las cuerdas a quien es, y no vale la pena disimularlo ya a estas alturas, un enemigo personal.
La actual situación que vive el máximo accionista bético, con varios frentes abiertos y muy delicada defensa, sería impensable si durante años, apenas acompañado de unos cuantos fieles, que hoy, con no pocos oportunistas de por medio, son legión, el catedrático sevillano no se hubiera mantenido firme como baluarte de la oposición pese a los ataques que, como él mismo ha denunciado muchas veces, invadieron incluso su parcela más íntima. Ser opositor ahora tiene poco mérito. Lo difícil era serlo cuando una masa ciega idolatraba a su líder y él era el muñeco de feria que recibía todos los golpes. Hugo Galera no fue un buen presidente del Betis, pero ha demostrado ser un buen bético.
Verdades como puños las que escribe hoy Francisco Pérez...y esa última frase le va a costar un disgusto...¿que os apostáis?
FRANCISCO PÉREZ (ABC)
Mercedes Alaya, titular del Juzgado de Instrucción número 6 de Sevilla, lo ha citado como testigo, y a él, que sigue siendo un romántico, le ha sonado el exhorto judicial como aquel «si tú me dices ven, lo dejo todo» y ese día, Hugo Galera Davidson, ex presidente del Real Betis, catedrático de Anatomía Patológica y acreditado especialista «loperiano», estará clavado a la hora que le digan en el despacho de la jueza para contarle a ésta unas cuantas cosas que sabe, o cree saber, que en estos casos hay presunción de creencia, acerca del supuesto delito societario cometido por Manuel Ruiz de Lopera como máximo accionista del club.
La comparecencia de Galera en el juzgado tiene carácter de hito para quien, bien a su pesar, ha dedicado los últimos años de su vida a fiscalizar de manera implacable la gestión del mandatario bético, a alertar a la afición sobre los presuntos excesos de Jabugo y a aunar las voluntades del capital crítico para, aprovechando el resquicio que le ofrece la ley, poner contra las cuerdas a quien es, y no vale la pena disimularlo ya a estas alturas, un enemigo personal.
La actual situación que vive el máximo accionista bético, con varios frentes abiertos y muy delicada defensa, sería impensable si durante años, apenas acompañado de unos cuantos fieles, que hoy, con no pocos oportunistas de por medio, son legión, el catedrático sevillano no se hubiera mantenido firme como baluarte de la oposición pese a los ataques que, como él mismo ha denunciado muchas veces, invadieron incluso su parcela más íntima. Ser opositor ahora tiene poco mérito. Lo difícil era serlo cuando una masa ciega idolatraba a su líder y él era el muñeco de feria que recibía todos los golpes. Hugo Galera no fue un buen presidente del Betis, pero ha demostrado ser un buen bético.
Verdades como puños las que escribe hoy Francisco Pérez...y esa última frase le va a costar un disgusto...¿que os apostáis?
Comentario