El periodista bético Luis Carlos Peris, tan venerado como vituperado, realiza hoy en su columna de Diario de Sevilla una reflexión que a mí no me gusta, y lleva unas cuantas en muy pocas semanas, pues para criticar al ditero del Fontanal, lo hace por la vía de la comparación entre el Betis y el Sevilla de la que no salimos demasiado bien parados.
Pienso que la realidad es así, pero que precisamente hay otros equipos con los que compararse y no someternos a la humillación frente al vecino como acostumbra.
Hago de tripas corazón y traigo aquí su artículo que sé hará las delicias de más de uno y dos de aquí, aunque para mí es innecesario, con que se regocigen los palanganas en sus madrigueras y bajo sus sombrillas de playa tengo bastante, pero como es políticamente correcto aplaudir a este maestro de las letras béticas, rindámonos a sus pies por lo escrito hoy:
Una rivalidad en hibernación
La campaña del Sevilla por las playas ya no hace falta dirigirla al sevillista, sino a pescar en aguas antes rivales
Luis Carlos Peris | Actualizado 14.07.2009 - 01:00
DESDE Ayamonte a Matalascañas, de Sanlúcar a Bolonia, una avioneta con un enorme escudo del Sevilla va haciendo proselitismo y en su eslogan ya no está aquel Abónate de cuando había que ir arañando clientela en clara competencia con el otro club de la ciudad, el entonces pujante Real Betis Balompié. El eslogan que luce la banderola a los cuatro vientos está bien claro que no va dirigido al sevillista. La indirecta es muy directa al hígado del rival, ¿o puede interpretarse de otra manera el mensaje? Dice asi: "Seguimos aquí arriba, ¿nos ves?". A buen entendedor con muy pocas palabras basta y la cosa es como es.
Es una continua, y diaria, lanzada al moro muerto lo que está pasando en el cainismo de esta ciudad mariana, invicta y no recuerdo cuántas cosas más. Todo con elegancia, sin cuerpo a cuerpo alguno, entre otras cosas porque el rival está abochornado por la ominosa dirección que padece. Ya dijo José María del Nido no ha mucho que, en la actualidad, el Betis no significa competencia alguna para el Sevilla. Y lo dijo de la forma en que más duele, con la razón acompañándole como se acompaña a cualquier dato objetivo, por lo que no tendría nada de extraño que el lacerante eslogan de la avioneta haya salido de su bien amueblado y nunca ocioso caletre.
"Seguimos aquí arriba, ¿nos ves?" es un puñetazo con guante de seda, pero a un fantasma. No tiene mérito ese descubrimiento del departamento de propaganda del Sevilla porque va dirigido a un ente indefenso, maniatado por el mandarinato más oprobioso que haya conocido club alguno. Lo dijo Del Nido y lo suscribo yo, no hay partido, las gestiones respectivas han alejado a ambas sociedades tanto que la rivalidad se ha convertido en facilidad para el proselitismo. Y no es, válgame el Cielo, que haya béticos que vayan a hacerse sevillistas, pero que tal como están las cosas, difícil será que el indeciso tire para Heliópolis. "Seguimos aquí arriba, ¿nos ves?". Qué bárbaro.
Como no sé "linkar", decir que está publicado en: http://www.diariodesevilla.es/articl...bernacion.html
Pienso que la realidad es así, pero que precisamente hay otros equipos con los que compararse y no someternos a la humillación frente al vecino como acostumbra.
Hago de tripas corazón y traigo aquí su artículo que sé hará las delicias de más de uno y dos de aquí, aunque para mí es innecesario, con que se regocigen los palanganas en sus madrigueras y bajo sus sombrillas de playa tengo bastante, pero como es políticamente correcto aplaudir a este maestro de las letras béticas, rindámonos a sus pies por lo escrito hoy:
Una rivalidad en hibernación
La campaña del Sevilla por las playas ya no hace falta dirigirla al sevillista, sino a pescar en aguas antes rivales
Luis Carlos Peris | Actualizado 14.07.2009 - 01:00
DESDE Ayamonte a Matalascañas, de Sanlúcar a Bolonia, una avioneta con un enorme escudo del Sevilla va haciendo proselitismo y en su eslogan ya no está aquel Abónate de cuando había que ir arañando clientela en clara competencia con el otro club de la ciudad, el entonces pujante Real Betis Balompié. El eslogan que luce la banderola a los cuatro vientos está bien claro que no va dirigido al sevillista. La indirecta es muy directa al hígado del rival, ¿o puede interpretarse de otra manera el mensaje? Dice asi: "Seguimos aquí arriba, ¿nos ves?". A buen entendedor con muy pocas palabras basta y la cosa es como es.
Es una continua, y diaria, lanzada al moro muerto lo que está pasando en el cainismo de esta ciudad mariana, invicta y no recuerdo cuántas cosas más. Todo con elegancia, sin cuerpo a cuerpo alguno, entre otras cosas porque el rival está abochornado por la ominosa dirección que padece. Ya dijo José María del Nido no ha mucho que, en la actualidad, el Betis no significa competencia alguna para el Sevilla. Y lo dijo de la forma en que más duele, con la razón acompañándole como se acompaña a cualquier dato objetivo, por lo que no tendría nada de extraño que el lacerante eslogan de la avioneta haya salido de su bien amueblado y nunca ocioso caletre.
"Seguimos aquí arriba, ¿nos ves?" es un puñetazo con guante de seda, pero a un fantasma. No tiene mérito ese descubrimiento del departamento de propaganda del Sevilla porque va dirigido a un ente indefenso, maniatado por el mandarinato más oprobioso que haya conocido club alguno. Lo dijo Del Nido y lo suscribo yo, no hay partido, las gestiones respectivas han alejado a ambas sociedades tanto que la rivalidad se ha convertido en facilidad para el proselitismo. Y no es, válgame el Cielo, que haya béticos que vayan a hacerse sevillistas, pero que tal como están las cosas, difícil será que el indeciso tire para Heliópolis. "Seguimos aquí arriba, ¿nos ves?". Qué bárbaro.
Como no sé "linkar", decir que está publicado en: http://www.diariodesevilla.es/articl...bernacion.html
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