Grandisimo articulo de ED
Noventa minutos que lo cambian todoCambio en la historia de los derbis, o para ser exactos, frenazo en seco. Doce años después, el Betis rompe la dinámica ganadora del Sevilla y vence en el Sánchez Pizjuán con un fútbol más inteligente que el de su eterno rival. El fútbol es así de grande y los 16 puntos de diferencia que marcaban la tabla -ya son 13- quedaron en nada. Este Betis es un Betis con mucha más calidad que los últimos Betis que tantas veces han perdido en Nervión. El ‘efecto Oliveira’, Sergio García, Emana, Mehmet Aurelio... No es, como algunos lo calificaron anoche, un equipo pequeño que sorprende a un grande. Betis y Sevilla son dos grandes por historia, por estadio y por afición. Tampoco jugó el conjunto de Chaparro como un equipo pequeño. Supo manejar el desgaste copero del Sevilla y también supo aprovechar la inferioridad numérica local -expulsión de Duscher-. Entre las dos actuales plantillas de Sevilla y Betis no hay diferencias abismales, los mundos se igualan, y habrá que ver con el paso de las jornadas cómo afecta el triunfo bético en las próximas jornadas ligueras. El Betis, que no anda inmerso como el Sevilla en la lucha por una final de Copa, logra el triunfo del año, porque sólo una victoria como ésta cambia, en sólo noventa minutos, el estado de ánimo en un vestuario y en una afición que lleva acumuladas demasiadas decepciones. En el ‘pique’ entre entrenadores, mejor Jiménez que Chaparro, que hizo gestos evitables y lanzó dudas sobre el saludo que no recibió de su buen amigo. A las aficiones, nuestra enhorabuena por dar otra lección de civismo. Les toca disfrutar a los béticos.
Noventa minutos que lo cambian todoCambio en la historia de los derbis, o para ser exactos, frenazo en seco. Doce años después, el Betis rompe la dinámica ganadora del Sevilla y vence en el Sánchez Pizjuán con un fútbol más inteligente que el de su eterno rival. El fútbol es así de grande y los 16 puntos de diferencia que marcaban la tabla -ya son 13- quedaron en nada. Este Betis es un Betis con mucha más calidad que los últimos Betis que tantas veces han perdido en Nervión. El ‘efecto Oliveira’, Sergio García, Emana, Mehmet Aurelio... No es, como algunos lo calificaron anoche, un equipo pequeño que sorprende a un grande. Betis y Sevilla son dos grandes por historia, por estadio y por afición. Tampoco jugó el conjunto de Chaparro como un equipo pequeño. Supo manejar el desgaste copero del Sevilla y también supo aprovechar la inferioridad numérica local -expulsión de Duscher-. Entre las dos actuales plantillas de Sevilla y Betis no hay diferencias abismales, los mundos se igualan, y habrá que ver con el paso de las jornadas cómo afecta el triunfo bético en las próximas jornadas ligueras. El Betis, que no anda inmerso como el Sevilla en la lucha por una final de Copa, logra el triunfo del año, porque sólo una victoria como ésta cambia, en sólo noventa minutos, el estado de ánimo en un vestuario y en una afición que lleva acumuladas demasiadas decepciones. En el ‘pique’ entre entrenadores, mejor Jiménez que Chaparro, que hizo gestos evitables y lanzó dudas sobre el saludo que no recibió de su buen amigo. A las aficiones, nuestra enhorabuena por dar otra lección de civismo. Les toca disfrutar a los béticos.
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