Desde que cogió las riendas de un área que a mi especialmente me parece importante y que aunque no me gustaba como responsable sí me parecía que el hecho de tenerlo iba a dar un impulso a un área bapuleada, maltratada y abandonada. Desde entonces, han pasado más de seis meses.
Pero después de más de seis meses puedo comprobar que el área bajo la responsabilidad de este señor, Larriba pone en su carné, es ciertamente pobre.
Como responsable de comunicación entiendo una serie de parámetros que son los positivos para el club y que no se han llevado a efecto o han sufrido un retroceso. Por ejemplo, la relación con los medios de comunicación ha empeorado a pasos agigantados, de ser nexo de unión entre prensa y club se ha transformado en un comité de disciplina que impone ridículos castigos. Así, lejos de acercar la prensa al club, la aleja.
Como responsable de comunicación ha tomado como buque insignia la Radio del club. Aquí es donde podemos acercar al aprobado su labor. Acercarla al aprobado porque la radio funciona. El problema es que la mitad de sus contenidos son dedicados a atacar a parte del beticismo. En esto no lo voy a evaluar porque simplemente es deleznable. Así que pasando por alto esto, la radio funciona a pesar de problemas internos graves que llevan al cese del responsable de un apartado muy delicado, la cantera.
Respecto de un proyecto que se presentó como único o primero del mundo, un canal por internet que parecía un medio de ultimísima generación y que sería ampliamente utilizado por el club, aparece abandonado y como almacén de los vídeos de la hora verde. De hecho, salvo ciertas felicitaciones de la época del centenario es lo único que almacena. Y digo almacenar porque no tiene producción propia, no se actualiza con ningún contenido y no se utiliza de ninguna de las amplias maneras que este medio podría tener.
La hora verde. Por lo visto, el programa estrella, y único, que tenía el Real Betis también ha terminado, con lo que el principal elemento de relleno del párrafo anterior también queda desvirtuado. El motivo del ceso de la actividad de un programa que era seguido por muchos béticos no lo sé, pero sí sé del vacío que deja.
Por último, y quizá el medio más antiguo al que me referiré y el más abandonado es la web oficial. Ésta lleva en proceso de renovación (el proceso que conozco siempre es el mismo, temas de presupuestos) desde septiembre. Es especialmente doloroso comprobar como nuestra web oficial, el medio por el cual nos mostramos al mundo tenga como entrenador a un señor destituido, a jugadores y técnicos que ya no están con nosotros y no se dispongan de imágenes de los nuevos que ya llevan más de seis meses con nosotros. Ni que decir tiene algún que otro consejero dimitido también sigue teniendo acomodo.
Todo lo relativo a la web me consta que ha sido ampliamente denunciado y las posibles mejoras hechas llegar al club por múltiples vías. Pero el resultado sigue mostrando la falta de operatividad en este campo cada vez más demandado por los béticos.
Así, sin meterme en las defensas numantinas a las que nos tiene acostumbrado el responsable de comunicación, puedo decir que su responsabilidad no supera el insuficiente bajo, pues todo estaba por hacer y todo sigue por hacer. Y el insuficiente es debido a que algo sí funciona, Radio Betis, pero ahí queda la cosa. Son seis meses, cinco desde que dejó de practicar otras profesiones, en los que mejorar lo que había era bien fácil, pero no ha sido así. Eso sí, como dinámica general del club, desde el medio que sí funciona se han insinuado fechas para la mejora, por ejemplo de la web, que no se han cumplido.
Puede que de aquí a mañana me vea gratamente sorprendido y todo cambie, la web sea nueva y con contenidos atractivos, el área de comunicación hace sus funciones y ayuda a una mejor relación con los medios, la radio del club baja su intensidad agresiva para con otros béticos y la televisión del club empieza a emitir o difundir entrevistas, ruedas de prensa, resúmenes de partidos y amplísima información que, otros medios, mucho más humildes y no oficiales, ofrecen sin necesidad de cargos de por medio.
Por supuesto, esto que escribo creo que es constructivo, porque analizar lo que hace alguien que cobra, entre otras cosas, del club del cual soy abonado y accionista, debe ser saber qué piensan sus abonados y accionistas, sobre todo si es como incentivo para la mejora.
Buenos días y a mejorar, Don Iván.
Pero después de más de seis meses puedo comprobar que el área bajo la responsabilidad de este señor, Larriba pone en su carné, es ciertamente pobre.
Como responsable de comunicación entiendo una serie de parámetros que son los positivos para el club y que no se han llevado a efecto o han sufrido un retroceso. Por ejemplo, la relación con los medios de comunicación ha empeorado a pasos agigantados, de ser nexo de unión entre prensa y club se ha transformado en un comité de disciplina que impone ridículos castigos. Así, lejos de acercar la prensa al club, la aleja.
Como responsable de comunicación ha tomado como buque insignia la Radio del club. Aquí es donde podemos acercar al aprobado su labor. Acercarla al aprobado porque la radio funciona. El problema es que la mitad de sus contenidos son dedicados a atacar a parte del beticismo. En esto no lo voy a evaluar porque simplemente es deleznable. Así que pasando por alto esto, la radio funciona a pesar de problemas internos graves que llevan al cese del responsable de un apartado muy delicado, la cantera.
Respecto de un proyecto que se presentó como único o primero del mundo, un canal por internet que parecía un medio de ultimísima generación y que sería ampliamente utilizado por el club, aparece abandonado y como almacén de los vídeos de la hora verde. De hecho, salvo ciertas felicitaciones de la época del centenario es lo único que almacena. Y digo almacenar porque no tiene producción propia, no se actualiza con ningún contenido y no se utiliza de ninguna de las amplias maneras que este medio podría tener.
La hora verde. Por lo visto, el programa estrella, y único, que tenía el Real Betis también ha terminado, con lo que el principal elemento de relleno del párrafo anterior también queda desvirtuado. El motivo del ceso de la actividad de un programa que era seguido por muchos béticos no lo sé, pero sí sé del vacío que deja.
Por último, y quizá el medio más antiguo al que me referiré y el más abandonado es la web oficial. Ésta lleva en proceso de renovación (el proceso que conozco siempre es el mismo, temas de presupuestos) desde septiembre. Es especialmente doloroso comprobar como nuestra web oficial, el medio por el cual nos mostramos al mundo tenga como entrenador a un señor destituido, a jugadores y técnicos que ya no están con nosotros y no se dispongan de imágenes de los nuevos que ya llevan más de seis meses con nosotros. Ni que decir tiene algún que otro consejero dimitido también sigue teniendo acomodo.
Todo lo relativo a la web me consta que ha sido ampliamente denunciado y las posibles mejoras hechas llegar al club por múltiples vías. Pero el resultado sigue mostrando la falta de operatividad en este campo cada vez más demandado por los béticos.
Así, sin meterme en las defensas numantinas a las que nos tiene acostumbrado el responsable de comunicación, puedo decir que su responsabilidad no supera el insuficiente bajo, pues todo estaba por hacer y todo sigue por hacer. Y el insuficiente es debido a que algo sí funciona, Radio Betis, pero ahí queda la cosa. Son seis meses, cinco desde que dejó de practicar otras profesiones, en los que mejorar lo que había era bien fácil, pero no ha sido así. Eso sí, como dinámica general del club, desde el medio que sí funciona se han insinuado fechas para la mejora, por ejemplo de la web, que no se han cumplido.
Puede que de aquí a mañana me vea gratamente sorprendido y todo cambie, la web sea nueva y con contenidos atractivos, el área de comunicación hace sus funciones y ayuda a una mejor relación con los medios, la radio del club baja su intensidad agresiva para con otros béticos y la televisión del club empieza a emitir o difundir entrevistas, ruedas de prensa, resúmenes de partidos y amplísima información que, otros medios, mucho más humildes y no oficiales, ofrecen sin necesidad de cargos de por medio.
Por supuesto, esto que escribo creo que es constructivo, porque analizar lo que hace alguien que cobra, entre otras cosas, del club del cual soy abonado y accionista, debe ser saber qué piensan sus abonados y accionistas, sobre todo si es como incentivo para la mejora.
Buenos días y a mejorar, Don Iván.
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