REAL BETIS
El sueño se llama Marco Ruben
Jorge Molina firma por cuatro temporadas, pero Víctor Fernández quiere apuntalar la delantera con el joven ariete argentino · Salva Sevilla será el tercer fichaje tras pasar hoy el reconocimiento médico
JAVIER MÉRIDA / SEVILLA | ACTUALIZADO 30.06.2010 - 07:30
La secretaría técnica verdiblanca vive días ajetreados. Los fichajes para la próxima temporada no paran de llegar y las negociaciones se mantienen con varios frentes abiertos y otros por abrir que pueden resultar aún más interesantes, como sería abordar la contratación del delantero Marco Ruben, el sueño para el ataque de Víctor Fernández.
El traspaso seguro de Pavone y la posible marcha de Sergio García o Emana -cada día que pasa es más difícil que el Betis vaya a traspasar a los dos- van a motivar, seguramente, que a Jorge Molina lo vaya a acompañar otro atacante más. Y ahí es cuando entraría en liza el argentino del Villarreal, de 23 años, que esta temporada ha anotado 18 goles con el filial en la Liga Adelante.
El problema de Marco Ruben sería su precio, toda vez que el club levantino solicitó 5 millones de euros -más o menos lo que pagó a River Plate hace dos años- al Wigan en el pasado mercado de invierno, en una operación que, finalmente, no llegó a buen puerto. Por eso no es descartable que el Betis solicitase del Villarreal una cesión con opción de compra.
Mientras, tras el fichaje de Momo el lunes, ayer le tocó el turno a Jorge Molina, quien pasó el pertinente reconocimiento médico en la clínica Nisa del Aljarafe y, tras acordar su contrato en el club, marchó a las oficinas de Manuel Ruiz de Lopera en la calle Jabugo, donde rubricó su contrato con el Betis para las próximas cuatro temporadas.
Jorge Molina, que en abril cumplió 28 años, estuvo ayer en Sevilla acompañado por su representante, Domingo Sevillano, y por el presidente del Elche, José Sepulcre, quienes el pasado viernes alcanzaron un acuerdo con Lopera -adelantado por este diario- sobre las siete de la tarde, horas después de que dijesen que la negociación había quedado paralizada y a punto de romperse.
Los contratos quedaron firmados ayer en El Fontanal poco antes de las ocho de la tarde -había cierta prisa debido al España-Portugal- y el Elche se embolsará finalmente por el traspaso 1,6 millones de euros y medio millón más si el Betis asciende.
Con Momo y Jorge Molina ya firmados, el siguiente en el carrusel es Salva Sevilla, quien ha sido citado para esta mañana en las oficinas del club junto a su representante, Joseba Díaz, que deberá cerrar los últimos flecos del contrato antes de que el futbolista sea autorizado a pasar el reconocimiento médico.
Salva Sevilla, de 26 años, juega como centrocampista ofensivo y esta temporada ha marcado 11 goles con el Salamanca. Tras acabar contrato, el futbolista nacido en Berja (Almería) firmó un preacuerdo con el Córdoba, aunque previó una cláusula por la que podría romper el mismo sin indemnización alguna para firmar por un equipo de Primera División. Fue por eso que cuando entró en liza el Betis, Lopera se puso en contacto con el levante, que firmó al futbolista para hacer de equipo puente, ya que enseguida éste fue traspasado al Betis. la cantidad se desconoce, pero será restada de los 1,8 millones de euros que aún adeuda el club granota al Betis por Xisco y otros asuntos.
El sueño se llama Marco Ruben
Jorge Molina firma por cuatro temporadas, pero Víctor Fernández quiere apuntalar la delantera con el joven ariete argentino · Salva Sevilla será el tercer fichaje tras pasar hoy el reconocimiento médico
JAVIER MÉRIDA / SEVILLA | ACTUALIZADO 30.06.2010 - 07:30
La secretaría técnica verdiblanca vive días ajetreados. Los fichajes para la próxima temporada no paran de llegar y las negociaciones se mantienen con varios frentes abiertos y otros por abrir que pueden resultar aún más interesantes, como sería abordar la contratación del delantero Marco Ruben, el sueño para el ataque de Víctor Fernández.
El traspaso seguro de Pavone y la posible marcha de Sergio García o Emana -cada día que pasa es más difícil que el Betis vaya a traspasar a los dos- van a motivar, seguramente, que a Jorge Molina lo vaya a acompañar otro atacante más. Y ahí es cuando entraría en liza el argentino del Villarreal, de 23 años, que esta temporada ha anotado 18 goles con el filial en la Liga Adelante.
El problema de Marco Ruben sería su precio, toda vez que el club levantino solicitó 5 millones de euros -más o menos lo que pagó a River Plate hace dos años- al Wigan en el pasado mercado de invierno, en una operación que, finalmente, no llegó a buen puerto. Por eso no es descartable que el Betis solicitase del Villarreal una cesión con opción de compra.
Mientras, tras el fichaje de Momo el lunes, ayer le tocó el turno a Jorge Molina, quien pasó el pertinente reconocimiento médico en la clínica Nisa del Aljarafe y, tras acordar su contrato en el club, marchó a las oficinas de Manuel Ruiz de Lopera en la calle Jabugo, donde rubricó su contrato con el Betis para las próximas cuatro temporadas.
Jorge Molina, que en abril cumplió 28 años, estuvo ayer en Sevilla acompañado por su representante, Domingo Sevillano, y por el presidente del Elche, José Sepulcre, quienes el pasado viernes alcanzaron un acuerdo con Lopera -adelantado por este diario- sobre las siete de la tarde, horas después de que dijesen que la negociación había quedado paralizada y a punto de romperse.
Los contratos quedaron firmados ayer en El Fontanal poco antes de las ocho de la tarde -había cierta prisa debido al España-Portugal- y el Elche se embolsará finalmente por el traspaso 1,6 millones de euros y medio millón más si el Betis asciende.
Con Momo y Jorge Molina ya firmados, el siguiente en el carrusel es Salva Sevilla, quien ha sido citado para esta mañana en las oficinas del club junto a su representante, Joseba Díaz, que deberá cerrar los últimos flecos del contrato antes de que el futbolista sea autorizado a pasar el reconocimiento médico.
Salva Sevilla, de 26 años, juega como centrocampista ofensivo y esta temporada ha marcado 11 goles con el Salamanca. Tras acabar contrato, el futbolista nacido en Berja (Almería) firmó un preacuerdo con el Córdoba, aunque previó una cláusula por la que podría romper el mismo sin indemnización alguna para firmar por un equipo de Primera División. Fue por eso que cuando entró en liza el Betis, Lopera se puso en contacto con el levante, que firmó al futbolista para hacer de equipo puente, ya que enseguida éste fue traspasado al Betis. la cantidad se desconoce, pero será restada de los 1,8 millones de euros que aún adeuda el club granota al Betis por Xisco y otros asuntos.
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