[CENTER]Sospecha desde dentro
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[CENTER]Los jugadores granotas se acusan entre ellos de falta profesionalidad
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El vestuario del Levante vive en estado de guerra. La trifulca que se produjo en el descanso del choque ante el Deportivo de La Coruña ha abierto unas heridas imposibles de cerrar. Cuestiones como la profesionalidad de los jugadores se pusieron en tela de juicio y la cosa se fue de madre al punto que casi llegan a la manos. Una información que reveló Radio MARCA y que ha traído cola. Nadie se fía de nadie. Nunca una campaña se les hizo tan larga a los granotas.
El 13 de abril de 2013 será recordado como un día fatídico para el Levante. Ahí se apagó la llama de un vestuario que ha sido la base sobre la que se ha sustentado el mejor equipo de la historia levantinista. Cuando Estrada Fernández pitó el descanso, todo saltó por los aires. El 0-3 que mandaba en el marcador del Ciutat provocó que los jugadores granotas llegaran muy calientes al vestuario y comenzaron los reproches. Un jugador consideró que sus compañeros no estaban mostrando la intensidad habitual y les acusó de falta de profesionalidad. Les pidió explicaciones por su desinterés, dejando entrever que existía cierta complicidad con el rival.
Una acusación que provocó que dos compañeros casi llegaran a las manos, con el consiguiente escándalo. El técnico granota, Juan Ignacio Martínez, mandó fuera del vestuario a todos los suplentes y al cuerpo técnico e intentó solventar la situación. Los jugadores saltaron al campo y acabaron el partido tras recibir un bochornoso 0-4. Ahora, dos semanas después, sigue sin despejarse la incógnita de quién tenía razón. Lo notorio es que el Levante continúa sin levantar cabeza en Liga -suma cuatro derrotas consecutivas- y la idea de que el colchón de 30 puntos que se logró en la primera vuelta ha evitado grandes urgencias está latente en el vestuario. Sin duda, se trata del final más triste para una temporada que comenzó con el Levante en Europa y que ha terminado con el equipo hecho jirones en el campo y en la caseta.
Barkero pide salir
La crispación que se ha apoderado del vestuario granota provoca que algunos jugadores quieran abandonar el proyecto para la próxima temporada. Uno de los primeros que ha pedido salir es José Javier Barkero. Al vasco no le gusta lo que está viendo y quiere abandonar el club. Así se lo ha hecho saber el vasco al presidente Quico Catalán, al que le solicitó la carta de libertad.
Barkero renovó recientemente por dos temporadas más con el Levante, pero ahora quiere romper el contrato. A pesar de que se trata de un titular indiscutible y de que es uno de los máximos goleadores, no se encuentra cómodo en el clima actual y prefiere jugar en otro equipo. Su agente está al corriente de la situación y en breve se reunirá con el Levante para abordar el caso. Con este caldo de cultivo, Juan Ignacio reunió a sus jugadores el pasado lunes y les pidió un último esfuerzo y no sufrir al final. Al vestuario le queda un mes de aguantarse. Después se verá qué pasa.
MARCA.com
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[CENTER]Los jugadores granotas se acusan entre ellos de falta profesionalidad
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El vestuario del Levante vive en estado de guerra. La trifulca que se produjo en el descanso del choque ante el Deportivo de La Coruña ha abierto unas heridas imposibles de cerrar. Cuestiones como la profesionalidad de los jugadores se pusieron en tela de juicio y la cosa se fue de madre al punto que casi llegan a la manos. Una información que reveló Radio MARCA y que ha traído cola. Nadie se fía de nadie. Nunca una campaña se les hizo tan larga a los granotas.
El 13 de abril de 2013 será recordado como un día fatídico para el Levante. Ahí se apagó la llama de un vestuario que ha sido la base sobre la que se ha sustentado el mejor equipo de la historia levantinista. Cuando Estrada Fernández pitó el descanso, todo saltó por los aires. El 0-3 que mandaba en el marcador del Ciutat provocó que los jugadores granotas llegaran muy calientes al vestuario y comenzaron los reproches. Un jugador consideró que sus compañeros no estaban mostrando la intensidad habitual y les acusó de falta de profesionalidad. Les pidió explicaciones por su desinterés, dejando entrever que existía cierta complicidad con el rival.
Una acusación que provocó que dos compañeros casi llegaran a las manos, con el consiguiente escándalo. El técnico granota, Juan Ignacio Martínez, mandó fuera del vestuario a todos los suplentes y al cuerpo técnico e intentó solventar la situación. Los jugadores saltaron al campo y acabaron el partido tras recibir un bochornoso 0-4. Ahora, dos semanas después, sigue sin despejarse la incógnita de quién tenía razón. Lo notorio es que el Levante continúa sin levantar cabeza en Liga -suma cuatro derrotas consecutivas- y la idea de que el colchón de 30 puntos que se logró en la primera vuelta ha evitado grandes urgencias está latente en el vestuario. Sin duda, se trata del final más triste para una temporada que comenzó con el Levante en Europa y que ha terminado con el equipo hecho jirones en el campo y en la caseta.
Barkero pide salir
La crispación que se ha apoderado del vestuario granota provoca que algunos jugadores quieran abandonar el proyecto para la próxima temporada. Uno de los primeros que ha pedido salir es José Javier Barkero. Al vasco no le gusta lo que está viendo y quiere abandonar el club. Así se lo ha hecho saber el vasco al presidente Quico Catalán, al que le solicitó la carta de libertad.
Barkero renovó recientemente por dos temporadas más con el Levante, pero ahora quiere romper el contrato. A pesar de que se trata de un titular indiscutible y de que es uno de los máximos goleadores, no se encuentra cómodo en el clima actual y prefiere jugar en otro equipo. Su agente está al corriente de la situación y en breve se reunirá con el Levante para abordar el caso. Con este caldo de cultivo, Juan Ignacio reunió a sus jugadores el pasado lunes y les pidió un último esfuerzo y no sufrir al final. Al vestuario le queda un mes de aguantarse. Después se verá qué pasa.
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