23 de Mayo, día que pasará a la historia.
Hoy no es como cualquier otro sábado, este sábado es especial, hace unos días me habían llamado para decir que mi hijo lo había cogido para jugar en la escuela de la UD LA LLAGOSTA, tengo que decir que mi hijo solo tiene 3 años, no cumple los 4 hasta Agosto, pero tenía que jugar este sábado un partidillo con los niños de la escuela, para una pequeña prueba, mezclando los niños de la escuela con las nuevas incorporaciones, hay que anotar que hay niños hasta de 5 años, la diferencia es notoria.
Cuando mi hijo se ha levantado, ha venido a mi cama, con su camiseta del Real Betis, y me dice, papa me pongo esta para el fútbol. Como el novillero que debuta en su primera plaza, esos nervios para su primer traje de luces, me pongo a cambiarlo primero sus medias verdes, sus calzonas blancas y por último su camiseta trecebarrada, encima su chándal del Real Betis, yo evidentemente le acompaño en la indumentaria. Nos dirigimos hacia el campo de fútbol con los nervios correspondientes.
Llegamos al campo y los niños van llegando, hay que decir que como era de esperar la mayoría de niños poblaban de blaugrana el campo de la Llagosta, parecía que uno de los equipos de las categorías inferiores del barça nos visitaban, siempre hay alguien que da la nota, esta vez éramos dos los que dábamos la nota, el padre y el hijo.
Nos adentramos en el vestuario después de una pequeña charla, da comienzo el reparto de las equipaciones, no tengo que ocultar que me gustaba que le tocara el número 6, mi número, el número de Dani aquel pequeñito que nos dio una copa, el de Merino etc.
Pero no, no se podía pedir número, y el reparto era de la siguiente manera, el Presidente y el Coordinador llamaban al niño y le entregarían la equipación (tengo que decir que el número que le toque no es para toda la temporada, pero es por la ilusión de saber que número le tocaría en su debut) la camiseta la cogerían al azar, meterían la mano y la que salga es la que te toca. Comienza el reparto, por mi lado van pasando número con solera como el 10 de Cañas, el 11 de Alfonsito, mi querido y amado 6, para mis adentros pensaba joer que número le tocará, llegó la hora Alex Rios, le dan su camiseta, pero no puedo ver el número, viene mi niño y le doy un beso y seguidamente cojo la camiseta y la giro, no me lo podía creer, coincidencia o premonición, sin mi hijo saberlo iba a debutar, con el número del jugador más grande, con el número del hombre que mejor ha corrido nuestra banda izquierda, si lo habéis adivinado el número 3 el número de Don Rafael Gordillo. Si lo sé, luego puede ser que mi hijo no le guste el fútbol, pero este debut y con este número no lo olvidaremos.
Os hago participe de esta anécdota, por que se muchos amigos que tengo en este gran foro os alegraréis como si fuese vuestro propio hijo.
PD: El debut ha sido discretito, ahora me ha salido vergonzoso, y no quiere que lo miremos mientras juega. Pues a esconderse toca.
PAZZO
Hoy no es como cualquier otro sábado, este sábado es especial, hace unos días me habían llamado para decir que mi hijo lo había cogido para jugar en la escuela de la UD LA LLAGOSTA, tengo que decir que mi hijo solo tiene 3 años, no cumple los 4 hasta Agosto, pero tenía que jugar este sábado un partidillo con los niños de la escuela, para una pequeña prueba, mezclando los niños de la escuela con las nuevas incorporaciones, hay que anotar que hay niños hasta de 5 años, la diferencia es notoria.
Cuando mi hijo se ha levantado, ha venido a mi cama, con su camiseta del Real Betis, y me dice, papa me pongo esta para el fútbol. Como el novillero que debuta en su primera plaza, esos nervios para su primer traje de luces, me pongo a cambiarlo primero sus medias verdes, sus calzonas blancas y por último su camiseta trecebarrada, encima su chándal del Real Betis, yo evidentemente le acompaño en la indumentaria. Nos dirigimos hacia el campo de fútbol con los nervios correspondientes.
Llegamos al campo y los niños van llegando, hay que decir que como era de esperar la mayoría de niños poblaban de blaugrana el campo de la Llagosta, parecía que uno de los equipos de las categorías inferiores del barça nos visitaban, siempre hay alguien que da la nota, esta vez éramos dos los que dábamos la nota, el padre y el hijo.
Nos adentramos en el vestuario después de una pequeña charla, da comienzo el reparto de las equipaciones, no tengo que ocultar que me gustaba que le tocara el número 6, mi número, el número de Dani aquel pequeñito que nos dio una copa, el de Merino etc.
Pero no, no se podía pedir número, y el reparto era de la siguiente manera, el Presidente y el Coordinador llamaban al niño y le entregarían la equipación (tengo que decir que el número que le toque no es para toda la temporada, pero es por la ilusión de saber que número le tocaría en su debut) la camiseta la cogerían al azar, meterían la mano y la que salga es la que te toca. Comienza el reparto, por mi lado van pasando número con solera como el 10 de Cañas, el 11 de Alfonsito, mi querido y amado 6, para mis adentros pensaba joer que número le tocará, llegó la hora Alex Rios, le dan su camiseta, pero no puedo ver el número, viene mi niño y le doy un beso y seguidamente cojo la camiseta y la giro, no me lo podía creer, coincidencia o premonición, sin mi hijo saberlo iba a debutar, con el número del jugador más grande, con el número del hombre que mejor ha corrido nuestra banda izquierda, si lo habéis adivinado el número 3 el número de Don Rafael Gordillo. Si lo sé, luego puede ser que mi hijo no le guste el fútbol, pero este debut y con este número no lo olvidaremos.
Os hago participe de esta anécdota, por que se muchos amigos que tengo en este gran foro os alegraréis como si fuese vuestro propio hijo.
PD: El debut ha sido discretito, ahora me ha salido vergonzoso, y no quiere que lo miremos mientras juega. Pues a esconderse toca.
PAZZO
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