Entrevista a Antonio Orozco:
- ¿Qué tal está discurriendo la gira?
- Estoy ‘flipando’. Las sensaciones hasta ahora son inmejorables. Estoy súper feliz de cómo está yendo todo y un poco sorprendido, porque es el segundo año de ‘Cadizfornia’ y la demanda del público es cada vez mayor.
- ¿Es especial tocar en tierras andaluzas?
- Volver a Andalucía es como reencontrarme conmigo mismo. Ayer se lo contaba a mi madre, que me decía que de qué me extrañaba, pues mi educación es totalmente andaluza. Al final me lo explicó así: “¿Tú sabes lo que es una ‘escudella’? ¿A que no?. ¿Pero a que sí sabes lo que es un puchero?” (Risas).
- ¿Se siente catalán, andaluz, una mezcla de todo…?
- Soy catalán, porque nací en L’Hospitalet. Pero también sé que soy andaluz, porque mis padres son de Osuna y llevo esas raíces. Nací en Barcelona como podría haberlo hecho en Buenos Aires. En aquellos momentos, era la punta del iceberg, donde estaba el trabajo, por lo que mis padres, como tantos otros, tuvieron que emigrar allí. Mi relación con Sevilla, eso sí, es incuestionable. Desde un punto de vista gastronómico, por ejemplo, adoro el gazpacho, el puchero... No puedo negar cuáles son mis orígenes.
- ¿Sigue viniendo por su ‘patria chica’?
- Por supuesto. Sevilla es para mí el principio de todo. Cádiz también, en cierto modo, porque allí grabamos los discos (en Tarifa), pero sobre todo Sevilla. Espero de todo corazón que siga siendo así. Paso mucho tiempo por trabajo en Estados Unidos y Colombia, pero Andalucía es el germen. Sólo hay que escuchar mi música para ver que el flamenco está latente.
- ¿Es usted futbolero?
- Me encanta el fútbol.
- En una biografía dicen que empezó en el Can Vidalet y llegó a jugar en el Barça. ¿Es cierto?
- ¿Cómo os enteráis de esas cosas? (Risas) Es cierto todo. Soy del Barça, socio y asiduo al campo. Mi hijo Jan, que tiene un año y medio, lo es también desde el minuto uno. Jugué al máximo nivel como blaugrana, pero en fútbol sala. Eso sí, la música y la noche pudieron más. Jugaba como ala. Fue una experiencia enriquecedora.
- Musicalmente, ha pasado de ser un equipo amateur a un grande en muy pocos años…
- Dicho por ti suena mejor que si lo digo yo, que sería chulesco (vuelve a reírse a carcajada limpia). Lo que sí siento es que en poco tiempo me han pasado cosas importantes como autor y Andalucía ha sido sin duda la clave de todo. Recuerdo el concierto ‘Devuélveme la vida’, en Sevilla y con un montón de artistas invitados, que marcó un antes y un después en mi vida. Aquel evento fue el principio de muchas cosas que todavía hoy me siguen sorprendiendo, afortunadamente.
- Dicen que, además de culé confeso, es simpatizante del Betis...
- Soy culé, pero también bético hasta la muerte. ¡Faltaría más! Los sevillistas, por otra parte, necesitan que haya béticos para que podamos discutir. Si no, ¿qué gracia tendría? (Risas) Ser barcelonista y bético son dos sentimientos perfectamente compatibles. Cuando estoy en casa, voy al Camp Nou y ejerzo de culé con mi niño. Pero mi padre era bético y eso no se olvida. Todavía hoy, mi hijo va por la playa con las camisetas del Betis que le regala su abuela.
- Incluso, algunos anti loperistas ven en su tema con ToteKing (‘Hoy todo va al revés’) un alegato contra el dueño del Betis...
- No me lo puedo creer (ahora sí que ‘se parte’ literalmente de risa)... Creo que el Tote es sevillista, pero lo tendría que confirmar. Es alucinante lo que interpreta la gente, ‘quillo’. Lo que sí destaco es su valentía al cantar con alguien que hace pop. Se ha ganado muchas críticas, pero tenemos la suerte de disfrutar en España de la pluma más fría y cortante que existe. Yo sólo colaboraría con él, no con cualquier rapero. Pensé que con ToteKing, Iván Ferreiro (ex de ‘Piratas’) y Youssou N’Dour (los tres duetos del disco) formaría un equipazo, casi como el que ganó la Eurocopa.
- ¿Qué le parece la interpretación contra Ruiz de Lopera?
- Cómo se le habrá quedado la cara a ese hombre si lo ha leído, ¿verdad? Pero no quiero que haya malentendidos, porque yo no conozco ni a Lopera ni a ningún otro dirigente. Me gusta ir al fútbol a pasarlo bien con los colegas y a beberme unas cervezas, pero paso de lo demás. No tengo ni idea de lo que se está haciendo en el Betis o en el Cádiz, que también me hizo hace poco socio honorífico, así que no voy a opinar de las empresas y sus ‘movidas’. He escuchado algo de que va a vender sus acciones, pero no estoy suficientemente informado. Todos mis respetos para el señor Lopera, al que le deseo todo lo mejor si se va o si queda. Me gusta el Betis por lo que siempre ha representado para mí en Barcelona: un equipo humilde, de ‘currantes’... Mi padre era bético y yo lo seré siempre.
- ¿Haría el himno de un equipo de fútbol?
- Nunca. Lo tengo claro.
- Ha firmado duetos con Malú, David de María, Youssou N’Dour... Si fuera futbolista profesional, ¿con quién le gustaría formar pareja?
- Uno que me cae genial es Güiza, por su naturalidad y por su calidad. Pero también me encantan Villa, Fernando Torres o Silva, que pasó desapercibido para muchos en la Eurocopa, pero que hizo un torneo enorme. ¡Qué ‘maquinón’!
- Se echa de menos en la música la rivalidad que sí existe en el fútbol o los toros...
- A veces en los festivales me dicen “¿contra quién cantamos?”, pero es sólo una broma. Tú cantas para tu público, porque alguien habrá ido a verte.
- ¿Le queda tiempo para practicar deporte?
- Mi hijo sabe decir sólo dos frases: “Quiero caracoles” y “Papá, vamos a la calle” (se ríe abiertamente). Así que no me queda más remedio que hacer deporte con él. Jan es el mejor. Cuando le vi, supe que cambiaría el mundo.
- En cierto modo, es como un deportista: coge fuerzas en pretemporada (cuando compone o graba) y luego le toca ir por los pueblos a jugar...
- La diferencia es que esto no es una carrera de fondo, porque yo no compito con nadie.
- Pero tiene pinta de buena gente; le iría mal en la alta competición…
- ¡Qué va! Jugando al fútbol soy un hijo de la gran **** de mucho cuidado. Lo hago una vez por semana cuando puedo, y no me gusta perder ni en los entrenamientos. Tengo mis movidas con Arcángel, que también juega. Soy seguramente el peor perdedor de todos. Lo reconozco públicamente: ganar es importantísimo para mí.
- Un amigo, viendo los recientes acontecimientos en los campos de fútbol, dice que nunca llevará a su hijo a un estadio…
- Si lo dice, sus motivos tendrá. Lo respeto. El Camp Nou es seguro, pero siempre se tiene más cuidado cuando vas con un pequeño. Yo me quedo con la carita de Jan cuando ve a todos cantando el himno...
http://www.estadiodeportivo.com/betis.php?id=1074
- ¿Qué tal está discurriendo la gira?
- Estoy ‘flipando’. Las sensaciones hasta ahora son inmejorables. Estoy súper feliz de cómo está yendo todo y un poco sorprendido, porque es el segundo año de ‘Cadizfornia’ y la demanda del público es cada vez mayor.
- ¿Es especial tocar en tierras andaluzas?
- Volver a Andalucía es como reencontrarme conmigo mismo. Ayer se lo contaba a mi madre, que me decía que de qué me extrañaba, pues mi educación es totalmente andaluza. Al final me lo explicó así: “¿Tú sabes lo que es una ‘escudella’? ¿A que no?. ¿Pero a que sí sabes lo que es un puchero?” (Risas).
- ¿Se siente catalán, andaluz, una mezcla de todo…?
- Soy catalán, porque nací en L’Hospitalet. Pero también sé que soy andaluz, porque mis padres son de Osuna y llevo esas raíces. Nací en Barcelona como podría haberlo hecho en Buenos Aires. En aquellos momentos, era la punta del iceberg, donde estaba el trabajo, por lo que mis padres, como tantos otros, tuvieron que emigrar allí. Mi relación con Sevilla, eso sí, es incuestionable. Desde un punto de vista gastronómico, por ejemplo, adoro el gazpacho, el puchero... No puedo negar cuáles son mis orígenes.
- ¿Sigue viniendo por su ‘patria chica’?
- Por supuesto. Sevilla es para mí el principio de todo. Cádiz también, en cierto modo, porque allí grabamos los discos (en Tarifa), pero sobre todo Sevilla. Espero de todo corazón que siga siendo así. Paso mucho tiempo por trabajo en Estados Unidos y Colombia, pero Andalucía es el germen. Sólo hay que escuchar mi música para ver que el flamenco está latente.
- ¿Es usted futbolero?
- Me encanta el fútbol.
- En una biografía dicen que empezó en el Can Vidalet y llegó a jugar en el Barça. ¿Es cierto?
- ¿Cómo os enteráis de esas cosas? (Risas) Es cierto todo. Soy del Barça, socio y asiduo al campo. Mi hijo Jan, que tiene un año y medio, lo es también desde el minuto uno. Jugué al máximo nivel como blaugrana, pero en fútbol sala. Eso sí, la música y la noche pudieron más. Jugaba como ala. Fue una experiencia enriquecedora.
- Musicalmente, ha pasado de ser un equipo amateur a un grande en muy pocos años…
- Dicho por ti suena mejor que si lo digo yo, que sería chulesco (vuelve a reírse a carcajada limpia). Lo que sí siento es que en poco tiempo me han pasado cosas importantes como autor y Andalucía ha sido sin duda la clave de todo. Recuerdo el concierto ‘Devuélveme la vida’, en Sevilla y con un montón de artistas invitados, que marcó un antes y un después en mi vida. Aquel evento fue el principio de muchas cosas que todavía hoy me siguen sorprendiendo, afortunadamente.
- Dicen que, además de culé confeso, es simpatizante del Betis...
- Soy culé, pero también bético hasta la muerte. ¡Faltaría más! Los sevillistas, por otra parte, necesitan que haya béticos para que podamos discutir. Si no, ¿qué gracia tendría? (Risas) Ser barcelonista y bético son dos sentimientos perfectamente compatibles. Cuando estoy en casa, voy al Camp Nou y ejerzo de culé con mi niño. Pero mi padre era bético y eso no se olvida. Todavía hoy, mi hijo va por la playa con las camisetas del Betis que le regala su abuela.
- Incluso, algunos anti loperistas ven en su tema con ToteKing (‘Hoy todo va al revés’) un alegato contra el dueño del Betis...
- No me lo puedo creer (ahora sí que ‘se parte’ literalmente de risa)... Creo que el Tote es sevillista, pero lo tendría que confirmar. Es alucinante lo que interpreta la gente, ‘quillo’. Lo que sí destaco es su valentía al cantar con alguien que hace pop. Se ha ganado muchas críticas, pero tenemos la suerte de disfrutar en España de la pluma más fría y cortante que existe. Yo sólo colaboraría con él, no con cualquier rapero. Pensé que con ToteKing, Iván Ferreiro (ex de ‘Piratas’) y Youssou N’Dour (los tres duetos del disco) formaría un equipazo, casi como el que ganó la Eurocopa.
- ¿Qué le parece la interpretación contra Ruiz de Lopera?
- Cómo se le habrá quedado la cara a ese hombre si lo ha leído, ¿verdad? Pero no quiero que haya malentendidos, porque yo no conozco ni a Lopera ni a ningún otro dirigente. Me gusta ir al fútbol a pasarlo bien con los colegas y a beberme unas cervezas, pero paso de lo demás. No tengo ni idea de lo que se está haciendo en el Betis o en el Cádiz, que también me hizo hace poco socio honorífico, así que no voy a opinar de las empresas y sus ‘movidas’. He escuchado algo de que va a vender sus acciones, pero no estoy suficientemente informado. Todos mis respetos para el señor Lopera, al que le deseo todo lo mejor si se va o si queda. Me gusta el Betis por lo que siempre ha representado para mí en Barcelona: un equipo humilde, de ‘currantes’... Mi padre era bético y yo lo seré siempre.
- ¿Haría el himno de un equipo de fútbol?
- Nunca. Lo tengo claro.
- Ha firmado duetos con Malú, David de María, Youssou N’Dour... Si fuera futbolista profesional, ¿con quién le gustaría formar pareja?
- Uno que me cae genial es Güiza, por su naturalidad y por su calidad. Pero también me encantan Villa, Fernando Torres o Silva, que pasó desapercibido para muchos en la Eurocopa, pero que hizo un torneo enorme. ¡Qué ‘maquinón’!
- Se echa de menos en la música la rivalidad que sí existe en el fútbol o los toros...
- A veces en los festivales me dicen “¿contra quién cantamos?”, pero es sólo una broma. Tú cantas para tu público, porque alguien habrá ido a verte.
- ¿Le queda tiempo para practicar deporte?
- Mi hijo sabe decir sólo dos frases: “Quiero caracoles” y “Papá, vamos a la calle” (se ríe abiertamente). Así que no me queda más remedio que hacer deporte con él. Jan es el mejor. Cuando le vi, supe que cambiaría el mundo.
- En cierto modo, es como un deportista: coge fuerzas en pretemporada (cuando compone o graba) y luego le toca ir por los pueblos a jugar...
- La diferencia es que esto no es una carrera de fondo, porque yo no compito con nadie.
- Pero tiene pinta de buena gente; le iría mal en la alta competición…
- ¡Qué va! Jugando al fútbol soy un hijo de la gran **** de mucho cuidado. Lo hago una vez por semana cuando puedo, y no me gusta perder ni en los entrenamientos. Tengo mis movidas con Arcángel, que también juega. Soy seguramente el peor perdedor de todos. Lo reconozco públicamente: ganar es importantísimo para mí.
- Un amigo, viendo los recientes acontecimientos en los campos de fútbol, dice que nunca llevará a su hijo a un estadio…
- Si lo dice, sus motivos tendrá. Lo respeto. El Camp Nou es seguro, pero siempre se tiene más cuidado cuando vas con un pequeño. Yo me quedo con la carita de Jan cuando ve a todos cantando el himno...
http://www.estadiodeportivo.com/betis.php?id=1074
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