El gran artífice del añorado ascenso fue un hombre modesto en su trato, pero que sentía al Betis por encima de todas las cosas. En ocasiones incluso anteponía su cariño por el club al de su familia. Por el Betis abandonó muchas veces sus propios negocios. Pero a él le cabe el honor de haber puesto los cimientos a esta estructura firme y pujante que es ahora la sociedad.
Conocimos y tratamos mucho a Manolo Ruiz en aquella secretaria lóbrega de la calle Mateos Gago. Por allí aparecía a principios de temporada aquel Ángel Rodríguez “El Feo”, con su carga de jugadores, y en aquellos albores de la temporada 53-54 acertó plenamente con su “cargamento”. El Betis se encontró con una plantilla de jugadores, muchos norteños y otros de la propia cantera, que eran auténticos profesionales, y se logró el añorado ascenso. Pero el “padre” de todo aquello fue el singular Manolo Ruiz que se sacaba su dinero del bolsillo para pagar los primeros plazos de la ficha y la comisión del “feo”.
Manolo Ruiz viajaba siempre con el equipo. Y le recordamos muchas veces en aquellos viajes en autocar, discutiendo con Gómez, otro hombre histórico del Betis, la táctica que se iba a emplear al día siguiente.
Manolo Ruiz se había iniciado como presidente de club allá por el año 1932, en su CORIA natal.
ESTOS FUERON SUS PODERES.
Manolo había llegado al Betis con una Sociedad moral y materialmente deshecha y a la que, en varias ocasiones, un grupo de béticos había salvado de entregar a la Federación. Era por el año 1952 y apenas había ochocientos socios. Dos años después se pasaba de los cuatro mil quinientos…
El Betis se proclamó campeón, estableciendo una marca, pues de treinta y seis partidos disputados, gano 25, empató siete y solo perdió cuatro, marcó 81 tantos y solo encajó 28. Logró sumar 57 puntos, 11 más que su inmediato seguidor.
LA DIRECTIVA DEL ASCENSO
Presidente, don Manuel Ruiz:
Secretario, don José Cía. González:
Tesorero, don Alfonso Martínez
Vocales, don Francisco Cuellar Contreras, don Gonzalo Tavares, don Antonio Pascual, don Juan Nieto, y don Juan Polledo.
Muchos de estos directivos estarían después con don Benito Villamarín en aquel otro ascenso inolvidable a Primera División.
LO QUE COSTARON LOS FICHAJES
Aquella temporada fue la que más se desembolsó en concepto de fichas, nada menos que un millón de pesetas, cantidad exorbitante para un equipo que estaba en Tercera. La mayor taquilla se hizo contra el Cádiz y fue de unas trescientas mil pesetas. Y como nota también curiosa, la recaudación por cuotas de socios no llegó a las cincuenta y cinco mil pesetas. El jugador más caro era Sabino Barinaga.
LA PLANTILLA
El equipo que más veces jugó fue el siguiente: González, Portu, Gabilondo, Cifuentes, Peñafuerte, Oscar, Aumesquet, Orive, Barinaga, Del Val, Marco-Martín y Enrique.
También colaboraron: Juan Antonio, Esteve, Benito, Eugenio, Santos, Coto, Cobos, Vilches, Elices y Moruca.
Como dato curioso, Peñafuerte, que jugaba de defensa y medio, logró trece goles. La mayor parte de castigos desde fuera del área.
ENTRENADOR Y MASAJISTA
Entrenador de aquel ascenso fue Gómez, que como jugador, se había proclamado campeón de Liga en la temporada de 1935. Era un hombre adusto, pero de una gran honradez y que hacia luchar en el campo a sus jugadores hasta la extenuación. Y como masajista, Adolfito toda una vida al servicio del club, y que era el terror de los porteros, a los que entrenaba personalmente.
EPILOGO
Y este es el pequeño resultado del ascenso, porque significaba del ascenso más importante, porque significaba salir del ostracismo. Y de verdad que todo fuera obra de un gran hombre, desgraciadamente desaparecido, y que es auténtica historia: Don MANOLO RUIZ.
Fuente El Correo deportivo 2 de Junio 1974
Periodista DON VICENTE BRU.
Conocimos y tratamos mucho a Manolo Ruiz en aquella secretaria lóbrega de la calle Mateos Gago. Por allí aparecía a principios de temporada aquel Ángel Rodríguez “El Feo”, con su carga de jugadores, y en aquellos albores de la temporada 53-54 acertó plenamente con su “cargamento”. El Betis se encontró con una plantilla de jugadores, muchos norteños y otros de la propia cantera, que eran auténticos profesionales, y se logró el añorado ascenso. Pero el “padre” de todo aquello fue el singular Manolo Ruiz que se sacaba su dinero del bolsillo para pagar los primeros plazos de la ficha y la comisión del “feo”.
Manolo Ruiz viajaba siempre con el equipo. Y le recordamos muchas veces en aquellos viajes en autocar, discutiendo con Gómez, otro hombre histórico del Betis, la táctica que se iba a emplear al día siguiente.
Manolo Ruiz se había iniciado como presidente de club allá por el año 1932, en su CORIA natal.
ESTOS FUERON SUS PODERES.
Manolo había llegado al Betis con una Sociedad moral y materialmente deshecha y a la que, en varias ocasiones, un grupo de béticos había salvado de entregar a la Federación. Era por el año 1952 y apenas había ochocientos socios. Dos años después se pasaba de los cuatro mil quinientos…
El Betis se proclamó campeón, estableciendo una marca, pues de treinta y seis partidos disputados, gano 25, empató siete y solo perdió cuatro, marcó 81 tantos y solo encajó 28. Logró sumar 57 puntos, 11 más que su inmediato seguidor.
LA DIRECTIVA DEL ASCENSO
Presidente, don Manuel Ruiz:
Secretario, don José Cía. González:
Tesorero, don Alfonso Martínez
Vocales, don Francisco Cuellar Contreras, don Gonzalo Tavares, don Antonio Pascual, don Juan Nieto, y don Juan Polledo.
Muchos de estos directivos estarían después con don Benito Villamarín en aquel otro ascenso inolvidable a Primera División.
LO QUE COSTARON LOS FICHAJES
Aquella temporada fue la que más se desembolsó en concepto de fichas, nada menos que un millón de pesetas, cantidad exorbitante para un equipo que estaba en Tercera. La mayor taquilla se hizo contra el Cádiz y fue de unas trescientas mil pesetas. Y como nota también curiosa, la recaudación por cuotas de socios no llegó a las cincuenta y cinco mil pesetas. El jugador más caro era Sabino Barinaga.
LA PLANTILLA
El equipo que más veces jugó fue el siguiente: González, Portu, Gabilondo, Cifuentes, Peñafuerte, Oscar, Aumesquet, Orive, Barinaga, Del Val, Marco-Martín y Enrique.
También colaboraron: Juan Antonio, Esteve, Benito, Eugenio, Santos, Coto, Cobos, Vilches, Elices y Moruca.
Como dato curioso, Peñafuerte, que jugaba de defensa y medio, logró trece goles. La mayor parte de castigos desde fuera del área.
ENTRENADOR Y MASAJISTA
Entrenador de aquel ascenso fue Gómez, que como jugador, se había proclamado campeón de Liga en la temporada de 1935. Era un hombre adusto, pero de una gran honradez y que hacia luchar en el campo a sus jugadores hasta la extenuación. Y como masajista, Adolfito toda una vida al servicio del club, y que era el terror de los porteros, a los que entrenaba personalmente.
EPILOGO
Y este es el pequeño resultado del ascenso, porque significaba del ascenso más importante, porque significaba salir del ostracismo. Y de verdad que todo fuera obra de un gran hombre, desgraciadamente desaparecido, y que es auténtica historia: Don MANOLO RUIZ.
Fuente El Correo deportivo 2 de Junio 1974
Periodista DON VICENTE BRU.
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