Re: ¿Cómo te hiciste del Betis?
Pues yo, como mi nombre indica, soy de Santander, así como toda mi familia.
La familia de mi madre nunca ha sido futbolera, y la de mi padre siempre ha simpatizado con el Madrid.
En cambio, a mi padre, que ha sido siempre mi mentor en el fútbol, le enloquecen los equipos verdiblancos: Real Racing (del que somos leales seguidores ambos), Real Betis (desde pequeño he oido a mi padre el "Musho Betis" y "Viva er Beti Manquepierda" con su acento cántabro en todos los partidos del Glorioso que retransmitían) y Club Atlético España de Cueto (equipo de mi barrio donde hemos jugado ambos toda la vida, que, como mi Betis, juega con una camiseta de franjas verdiblancas).
En mi colegio siempre me miraban raro cuando decía que era del Betis, y al ser un niño tímido supongo que cedí a la presión social de madridistas y culés, pero yo me sentía bético y disfrutaba como un enano viendo a Finidi y Alfonso sentado en el sofá con mi padre.
A medida que crecía, mi Beticismo se iba desinhibiendo y lucía cada vez con menos miedo las camisetas. Supongo que el sumun fue la primera vez que acudí al Villamarín (en aquel momento RdL), coincidiendo con nuestras vacaciones en Málaga. Fue el primer partido en casa de la temporada 2005-2006, contra el Osasuna, 1-0. Jamás se me olvidará.
Y sin duda de lo que más ganas tengo, puesto que aún soy demasiado joven para complicarme la vida con niños, es de llevar a mi hermano pequeño al Villamarín, y que sienta el nerviosismo y la ilusión que sentí yo.
Aunque los tres amemos al Racing, el Betis es un sentimiento mucho más intenso, inexplicable, que nos quita el hambre y el sueño cuando el Betis pierde, e incluso cuando gana.
Pues yo, como mi nombre indica, soy de Santander, así como toda mi familia.
La familia de mi madre nunca ha sido futbolera, y la de mi padre siempre ha simpatizado con el Madrid.
En cambio, a mi padre, que ha sido siempre mi mentor en el fútbol, le enloquecen los equipos verdiblancos: Real Racing (del que somos leales seguidores ambos), Real Betis (desde pequeño he oido a mi padre el "Musho Betis" y "Viva er Beti Manquepierda" con su acento cántabro en todos los partidos del Glorioso que retransmitían) y Club Atlético España de Cueto (equipo de mi barrio donde hemos jugado ambos toda la vida, que, como mi Betis, juega con una camiseta de franjas verdiblancas).
En mi colegio siempre me miraban raro cuando decía que era del Betis, y al ser un niño tímido supongo que cedí a la presión social de madridistas y culés, pero yo me sentía bético y disfrutaba como un enano viendo a Finidi y Alfonso sentado en el sofá con mi padre.
A medida que crecía, mi Beticismo se iba desinhibiendo y lucía cada vez con menos miedo las camisetas. Supongo que el sumun fue la primera vez que acudí al Villamarín (en aquel momento RdL), coincidiendo con nuestras vacaciones en Málaga. Fue el primer partido en casa de la temporada 2005-2006, contra el Osasuna, 1-0. Jamás se me olvidará.
Y sin duda de lo que más ganas tengo, puesto que aún soy demasiado joven para complicarme la vida con niños, es de llevar a mi hermano pequeño al Villamarín, y que sienta el nerviosismo y la ilusión que sentí yo.
Aunque los tres amemos al Racing, el Betis es un sentimiento mucho más intenso, inexplicable, que nos quita el hambre y el sueño cuando el Betis pierde, e incluso cuando gana.
Comentario