Lorenzo Serra Ferrer quiere certificar la salvación lo antes posible, por eso no le vale otra cosa que la victoria en su visita a Mendizorroza "Yo siempre pienso que hay que salir a ganar el partido, aunque al oponente nadie le quitar la idea de pensar en ganador. Si no puedes ganar como mínimo debes empatar, pero no hay que manejar esa idea de principio, porque no tenemos jugadores de estas características. Hay que ganar el partido con argumentos sólidos, pero reales".
Y es que el partido podría calificarse como uno de los más importantes de la temporada, ya que en el caso de victoria llevaría al Betis a alcanzar los 40 puntos y así poder respirar tranquilos con la salvación asegura, "No es un partido trampa, porque la realidad es la que es. Todos sabemos la importancia que tiene el partido, porque podemos decidir esta situación a favor. Tampoco es un partido definitivo, pero no podemos mirarlo bajo esta idea de decir que faltan dos partidos más y, con ganar alguno estamos libres de esta situación. Hay que intentar solventarla en el primer partido, que no será fácil, porque el Alavés también está en una situación delicada y necesita ganar como sea".
"Miedo no tenemos sino que, al contrario, todo el mundo es consciente de que el Betis tiene que dar el nivel que se espera y todos pensamos que tenemos. Debemos exponer bien lo que defendemos y tenemos un prestigio adquirido en muchos años y no puede estar deteriorado. Donde debemos defender esa tesis es en el terreno de juego,lo demás es mirar a otros sitios pero son excusas baratas que no sirven para nada", advirtió.
Así, el entrenador verdiblanco tiene muy claro la forma de jugar de su equipo en el enfrentamiento ante el Alavés, "Cuando estás en una situación tan apurada es importante que partamos y terminemos buscando un concepto del juego a través de la presión, para recuperar el balón lo más arriba posible y manejar la pelota en zonas que nos den la posibilidad de terminar la jugada. Hay que hacer un juego muy fuerte y convincente en este aspecto".
Y es que el partido podría calificarse como uno de los más importantes de la temporada, ya que en el caso de victoria llevaría al Betis a alcanzar los 40 puntos y así poder respirar tranquilos con la salvación asegura, "No es un partido trampa, porque la realidad es la que es. Todos sabemos la importancia que tiene el partido, porque podemos decidir esta situación a favor. Tampoco es un partido definitivo, pero no podemos mirarlo bajo esta idea de decir que faltan dos partidos más y, con ganar alguno estamos libres de esta situación. Hay que intentar solventarla en el primer partido, que no será fácil, porque el Alavés también está en una situación delicada y necesita ganar como sea".
"Miedo no tenemos sino que, al contrario, todo el mundo es consciente de que el Betis tiene que dar el nivel que se espera y todos pensamos que tenemos. Debemos exponer bien lo que defendemos y tenemos un prestigio adquirido en muchos años y no puede estar deteriorado. Donde debemos defender esa tesis es en el terreno de juego,lo demás es mirar a otros sitios pero son excusas baratas que no sirven para nada", advirtió.
Así, el entrenador verdiblanco tiene muy claro la forma de jugar de su equipo en el enfrentamiento ante el Alavés, "Cuando estás en una situación tan apurada es importante que partamos y terminemos buscando un concepto del juego a través de la presión, para recuperar el balón lo más arriba posible y manejar la pelota en zonas que nos den la posibilidad de terminar la jugada. Hay que hacer un juego muy fuerte y convincente en este aspecto".