El jóven portero de 21 años Adrián, que realizó la pretemporada con el primer equipo en Montecastillo y, habitualmente, entrena bajos las órdenes de Paco Chaparro - es el tercer portero de la primera plantilla-, no puede esconder su alegría por haber gozado de una oportunidad: "El día antes del partido, Nogués habló conmigo y René y nos dijo que somos dos buenos porteros y que ambos merecíamos minutos. Llevaba tiempo sin jugar y me comentó que iba a tener ocasión de jugar ante los jiennenses".

Es más, reconoce que se sintió muy cómodo y que solventó bien el poco trabajo que tuvo: "Al inicio, estuve un poco nervioso, pero me encontré muy seguro en todas las acciones en las que tuve que intervenir. Sobre todo, en una en la que tuve que detener el esférico en la misma raya de gol. Con el paso de los minutos, me sentí cada vez más cómodo y no tuve problemas a la hora de blocar y despejar los balones aéreos".

Mucho se ha hablado en fechas atrás sobre la titularidad de Ricardo o Casto, y muchas son las voces que piden que el Betis se refuerce en esa posición. Sin embargo, ha aparecido en escena un portero que viene apretando fuerte -el cuerpo técnico del Betis confía plenamente en sus posibilidades- que tiene una cualidad que no poseen ni los dos primeros porteros ni René, altura. Adrián, que mide 1,90, es más espigado que Casto (1,80), Ricardo (1,88) y René (1,83).

El portero sevillano, criado en Su Eminencia, es consciente de su ocasión y confía en su posibilidades para demostrar su valía: "La relación con los tres es buena. Por mi parte, estoy trabajando duro para llegar los más alto posible. Espero seguir así y, si me siguen dando oportunidades, las aprovecharé. Tengo que estar bien, pues al más mínimo fallo te crucifican".

No obstante, Adrián, que fue fichado por el Betis para acudir al torneo alevín de Brunete cuando jugaba en el Altair, sólo piensa en realizar un buen trabajo en el segundo equipo verdiblanco para conseguir jugar el play off: "Desde el inicio de temporada, el objetivo que nos marcamos en el vestuario es acabar entre los cuatro primeros. Tenemos mucha ilusión por hacer una gran temporada".

Para ello, sabe que tendrá que trabajar duro para poder seguir gozando de la confianza del técnico catalán: "El entrenador nos aprieta y exige mucho durante los entrenamientos. Tenemos dos jugadores por puestos y tengo que seguir esforzándome".



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