Precisamente el guardameta fue el mejor verdiblanco el pasado fin de semana en Granada. Imprescindibles sus paradas para que el Betis sumara un punto en su visita al Nuevo Los Cármenes. Intervenciones de mérito las del madrileño, cuando los verdiblancos más sufrían en algunos tramos de la primera parte. Luego, también apareció Rubén Castro al transformar el penalti.
Probablemente el resultado fue lo mejor para el cuadro bético en Granada, en un partido en el que los errores marcaron el encuentro. Un fallo de Westermann nada más comenzar -otro arranque fatídico como ante el Espanyol-, ofreció en bandeja el gol local. Luego otro regalo, en este caso de Rubén Pérez con su mano, significó el penalti del empate para los de Mel.
De por medio el partido verdiblanco fue gris, con problemas a la hora de crear fútbol, con dificultades para pisar el área de Andrés Fernández y con dosis de polémicas en algunas jugadas. Mejor el punto que las sensaciones. Sin embargo, tampoco conviene perder la perspectiva de la posición en la tabla del Betis, décimo, ni el objetivo de la temporada para los heliopolitanos.
El partido sirvió, entre otras cosas, para constatar que hay portero de garantías. Adán fue el mejor verdiblanco y sus paradas bien pueden valer el punto. Una destacada actuación que no es aislada en el madrileño, ya que en salidas como la Valencia, Gijón o Vallecas también ofreció un extraordinario rendimiento que resultó clave -además de otras circunstancias- para las victorias o en el empate en Mestalla.
A día de hoy Adán puede incluirse en esa lista de los imprescindibles del Betis. A pesar de las buenas sensaciones que ofrece cuando aparece Dani Giménez, es un fijo en el equipo. El valor del meta titular radica en sus cualidades como portero, por sus paradas y la seguridad que transmite, pero también por su liderazgo. En apenas dos años en el club es constatable el predicamento que tiene sobre compañeros y afición.
Es llamativo que cuando el Betis firmó a Adán, allá por enero de 2014, ofrecía serias dudas. Su fugaz paso por la titularidad de la portería del Real Madrid y su etapa en Italia no ayudaban. La incertidumbre se despajó pronto en favor del madrileño con su buen hacer. Con su presencia desde el principio de curso, tal vez los verdiblancos hubieran tenido más opciones de permanencia aquella campaña.
El caso es que Adán, que todo apunta a que en breve firmará una más que merecida renovación, ha mostrado regularidad en su etapa bética, independientemente de la categoría. De los mejores del equipo en este arranque liguero, en Granada resultó clave para que los de Mel empataran. Los partidos se ganan marcando goles, también con paradas determinantes.