Pero a los otros también. Llevamos 6 partidos y estamos a un punto de puestos de ascenso. Esto es a cara de perro y nosotros somos el lebrel elegante al que doblegar, el que muestra a los demás en la tele, el que saca sus nombres de segunda a relucir.
Así que estos seis puntos no deben cegarnos, seguimos muy mal en defensa. Es entendible que los contrarios jueguen atrás y el juego sea feo no, lo siguiente. Pero eso no quita para que ayer hasta el minuto 23 no se viese a un Betis hilvanar seis pases seguidos.
Yo de Rubén pienso que qué suerte de tenerlo. Que tenía todas las papeletas para irse? pues por supuesto, pero apostaron por él y el resultado ahí está, cerca de ser el mayor goleador de la historia del Betis. El año pasado nos trajimos a un crack llamado Verdú, con su carita en la portada de los cromos de la liga y mirad dónde anda ahora.
Institucionalmente estamos bastante mal porque no hay una mano que agarre el mástil aunque se le retuerza. Y ojalá, aunque sólo sea para un espacio breve de tiempo, salga un valiente que ponga bases, aunque después se le entregue a quien sea.
Ojalá a Rubén se le unan los nombres y jueguen como hombres. Mientras, todos los equipos vendrán esperando sacar su particular foto feliz, como ya ha hecho el Albacete. Ojalá sea la única.