Dedicado a esa señorita que era más que alguien que atendía un teléfono.

Me consta y mucho que sufrió enormemente cuando dedició abandonar su puesto en las oficinas del Centenario, me la imagino dando vueltas y más vueltas a su cabeza sabiendo que la decisión que tomaba era la mejor para su Betis, y no la mejor para ella.

Ella ha sido algo más, mucho más, infinítamente más que una chica al otro lado del teléfono, ha llevado la gestación y el pulso del Centenario desde esa mesa al principio de la oficina. Todo pasaba por allí: las peñas, los aficionados que nunca se imaginaban que iban a poder pisar esa planta entraban en su casa y eran atendidos exquisítamente por ella. Ella ha sido una más, nunca la ví darse aires de grandeza, los actos, los preparativos, incluso palmerín. Ni siquiera disimulaba la humildad cuando pasaba allí horas y horas haciendo Betis. Por supuesto que atendía el teléfono, y que salga alguien que diga que no le atendió bien, que no le indicó como nunca nadie había indicado sobre temas del centenario y nunca (lo siento por quien lo haga ahora) lo hará como ella. Ella vivía día a día todo lo que allí pasaba y siempre tenía una sonrisa agradable incluso para cuando no era correspondida.

No puedo hablar por nadie, pero sí por mí. Sé que he hecho una amiga, que me ayudó mucho y que seguirá haciendo cosas igual de buenas por su Betis, ya sea como abonada de a pié ya sea en cualquier trabajo o ayuda que le requieran.

Si estuvo en Barcelona se lo curró y se lo pagó ella, si hizo lo que hizo y dice el señor que más acciones tiene que lo hizo no lo haría nunca, y digo esto poniendo la mano en el fuego y hasta el pié y la cara si hace falta, no lo haría nunca destrozando un acto del centenario. Aquella levantá la hicieron muchos béticos, aunque lo quieran personificar en dos o tres para buscar protagonistas, la hicieron muchos béticos no sólo al final de ese acto donde el señor de más acciones acudió para contarnos lo de siempre y nada nuevo. Muchos béticos nos levantamos antes y se levantaron allí y se volverán a levantar en muchos sitios no contra el Centenario, ni contra el Betis, sino todo lo contrario.

Gracias señorita.