Pues os comento. Viendo que nuestro Club ha tenido la magnífica iniciativa de plantear un Centenario participativo (dice mucho de su grandeza, y su idiosincracia, por mucho que mande lopera), llevaba tiempo carburando una idea que creo que puede ser excepcional. La he titulado el Mejor recuerdo. Consiste en que cada uno de nosotros pongamos en este post y en otros que abriré en otros foros nuestro mejor recuerdo relacionado con el betis, de aquí a final de año. Cuando cumpla el plazo, enviarlo a la comisión del centenario, depurarlo e intentar sacar una publicación que muestre el verdadero valor sentimental que tiene nuestro club en nuestras vidas. Me gustaría que me ayudaráis a recopilar la información mi email es [email protected]. Si alguien me ayuda a coordinarlo lo sacamos adelante. Puede ser una iniciativa preciosa.
Sin más ahí va el mío:
Corrían los años finales de la década de los 90. Pleno invierno. Era una época dura, en la que los libros de texto de la escuela se usaban aunque pasaran ediciones y ediciones. El jamon: de york y cuando se podía. Vacaciones: la bañera hasta arriba. En fin lo normal. Sin embargo, las notas del cole fueron buenas y mi padre decidió que una vez escalada a duras penas la durísima pared de septiembre, me llevaría a ver un partido de fútbol. Ropa de abrigo e interminables escaleras hacia voladizo. Un sueño hecho realidad, mi primer partido en el estadio donde se sueña en verdiblanco.
Neri Alberto Pumpido salvaguardando nuestras redes ante un Atlético Madrileño tedioso. Gollllllllllll!!! Que sensación más grande por dios. Los ojos de mi padre de emoción al verme disfrutar, no se me olvidarán nunca, siempre estarán presentes en un lazo verdiblanco de amor y respeto.
Siempre te lo agradeceré Papá, el esfuerzo fue tremendo, pero no podrás decirme que no mereció la pena. Eres el más grande del mundo, y después mi Betis.
Sin más ahí va el mío:
Corrían los años finales de la década de los 90. Pleno invierno. Era una época dura, en la que los libros de texto de la escuela se usaban aunque pasaran ediciones y ediciones. El jamon: de york y cuando se podía. Vacaciones: la bañera hasta arriba. En fin lo normal. Sin embargo, las notas del cole fueron buenas y mi padre decidió que una vez escalada a duras penas la durísima pared de septiembre, me llevaría a ver un partido de fútbol. Ropa de abrigo e interminables escaleras hacia voladizo. Un sueño hecho realidad, mi primer partido en el estadio donde se sueña en verdiblanco.
Neri Alberto Pumpido salvaguardando nuestras redes ante un Atlético Madrileño tedioso. Gollllllllllll!!! Que sensación más grande por dios. Los ojos de mi padre de emoción al verme disfrutar, no se me olvidarán nunca, siempre estarán presentes en un lazo verdiblanco de amor y respeto.
Siempre te lo agradeceré Papá, el esfuerzo fue tremendo, pero no podrás decirme que no mereció la pena. Eres el más grande del mundo, y después mi Betis.
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