Una jornada más, entrando ya en la fase decisiva del campeonato, se acumulan las necesidades para un Betis que sigue sin hacer sus deberes ante un Valencia que tampoco realiza los suyos.

Una cita que llega tras una semana (inacabable) de los más movida en el área institucional -para no abandonar la espiral negativa en la que lleva una década sumergido el club verdiblanco-, que repercute en múltiples deficiencias que viene arrastrando el Betis temporada tras temporada, ya asumida como parte del “ADN Betis”.

Urgencias en el Benito Villamarín: si la competición doméstica hubiese arrancado allá por las postrimerías de noviembre, tanto Betis como Valencia serían los últimos de la clasificación. La escuadra de Heliópolis suma 9 encuentros sin ganar –desde el 0-1 al Levante con gol de Rubén Castro, que parece haber desconectado el cable goleador- mientras que la racha de los valencianistas es aún peor –no han celebrado victoria alguna en los últimos 11 compromisos de Liga-. Urge ganar; por tanto, duelo de necesidad severa para ambos equipos.


Un adversario de gratos recuerdos. La tarde dominical sevillana traerá consigo la visita de uno de los clubes con más solera de todos los que forman la liga nacional: el Valencia CF. Los chés vieron esfumarse sus posibilidades de sacar algo positivo del Villamarín en los últimos 3 enfrentamientos ligueros: aquel mágico 2-1 con una remontada en el alargue con dos goles de Rubén Castro, que terminó por encumbrarse a la vez que salvó la cabeza de Mel, el exiguo pero válido 1-0 del curso 2012-2013 y el último precedente de la temporada del descenso, que se saldó con un contundente 3-1 –con exhibición de Jorge Molina a la limón con Salva Sevilla inclusive-. Todo ello invita a pensar en positivo, el incapaz Valencia de Neville se antoja el rival más propicio para enterrar la horrible dinámica casera, y comenzar a sumar de 3 en 3.

Con permiso de los Ollero, Haro y López Catalán, cuyo proyecto está dejando mucho que desear, Juan Merino es el hombre de actualidad en La Palmera. En medio de la vorágine vivida en los despachos en los últimos días, una vez presentada la dimisión irrevocable de Ollero y asumido el sillón de mando por Ángel Haro, el preparador de la casa, natural de la Línea de la Concepción, ha sido ratificado como entrenador definitivo de la primera plantilla bética, obviando la posibilidad de encargar a Juande Ramos, un técnico de postín y con un historial notable detrás, la dirección deportiva del equipo. Una muestra más de la ineptitud que caracteriza a los que llevan traje y corbata, que contraen el riesgo de abordar el experimento de un entrenador que hace muy poco no valía ni para el filial. Sin embargo, no cabe otra que confiar en las dosis de carácter que Merino ha impreso al equipo, su suerte será la del Betis.

Así bien, culminada la semana de trabajo diario y entrenamientos con la mayor parte de los componentes de la plantilla verdiblanca disponibles, Merino rompe definitivamente con la añeja fórmula de difundir la lista de convocados el mismo día de partido. La citación para el compromiso frente al Valencia incluye las novedades de la nueva ‘doble M’ (Musonda y Montoya), toda vez que Kadir y Fabián continúan recuperándose de sus respectivas lesiones, mientras que Joaquín ha visto cómo sus opciones de estar ante su exequipo se desvanecían teniendo que ausentarse en los últimos entrenamientos de la semana.

Por lo que se apunta desde la capital del Turia, Gary Neville afrontará un ultimátum en tierras hispalenses. Para ello, el entrenador blanquinegro ha dispuesto una lista de convocados en la que resalta la inclusión de Siqueira y Cheryshev, refuerzos invernales de los ché, al tiempo que los lesionados Enzo Pérez, Paco Álcacer y Javi Fuego, además de Bakkali y Diego Alves no han viajado en la tripulación que pernoctará la noche del sábado en Sevilla.

Tras el mancillado primer acto del Betis de Merino en San Sebastián, que dio lugar a la derrota verdiblanca aunque en el segundo tiempo el equipo mejorara la imagen, arriba a Heliópolis el peor conjunto de la Liga BBVA de los últimos meses de competición, un equipo cuyos jugadores parece como si se hubieran olvidado de lo que es jugar al fútbol, con un entrenador más que cuestionado, casi sentenciado. Escenario ideal para levantarse, borrar de un plumazo todos sucesos desarrollados en los últimos tiempos en la casa verdiblanca, demostrar que hay equipo para no pasar los apuros de siempre y empezar a mirar al futuro con algo más de ilusión. El Betis-Valencia, que comienza a las 16:00 horas, lo arbitra Sánchez Martínez, del comité murciano; un choque entre enfermos críticos, en el cual el que caiga derrotado divisará un panorama más que tenebroso.

Alineaciones probables:

Betis: Adán; Montoya, Bruno, Pezzella, Vargas; N’Diaye, Petros; Musonda, Ceballos, Portillo; y Rubén Castro.

Valencia: Ryan; Barragán, Mustafi, Abdenour, Gayá; Danilo, Parejo, André Gomes; Cheryshev, Feghouli y Negredo.

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